Luego de comer lavamos los trastes y nos fuimos a acostar, Adelina se quedó dormida sobre mi pecho mientras le hacía cariño en la cabeza, no me di cuenta cuando me quede dormida y me desperté porque Adelina me había pegado un codazo al darse vuelta en la cama, intenté moverme para mirar la hora pero algo me lo prohibió y era una persona llamada Adelina, que me tenía abrazada por la cintura con sus piernas enredadas en las mías haciendo que el simple hecho de respirar se me hiciera imposible.
— Ad — le llamé en un susurro y ella me respondió con un gruñido cual Dante — Quiero orinar — ella me soltó al instante.
— No te demores, aún es temprano— fue un balbuceo somnoliento y se dio media vuelta para seguir durmiendo.
Yo me levanté de la cama y mire la hora, aun eran como las 6 de la mañana, me llamó un poco la atención que Adelina no se levantara, ya que normalmente se levantaba tipo 5 de la mañana pero parecía estar cansado así que la dejé dormir, camine al baño en silencio y antes de llegar a mi destino apareció Jonathan, aún estaba recién despertando así que no tuve tiempo para reaccionar y termine chocando con él.
— Lo siento, no te vi — le dije alejándome de él pasándome la mano por el cabello
— No entiendo porque sigues aquí — estaba con el ceño fruncido y su tono de voz natural cuando hablaba conmigo específicamente era como si estuviera constantemente enojado — No entiendo porque sigues insistiendo con Adelina — comentó él y yo lo mire, fruncí el ceño y me crucé de brazos.
— Ella me ofreció quedarme.
— ¿Si? entonces ten cuidado — fue una amenaza evidente, era como la hermana de Adelina, Vanessa que se daba a entender a través de amenazas — porque ella es mía y no me importa que es lo que tenga que llegar a hacer para que ella este conmigo — miro a alguna parte del pasillo — Prepárate para lo peor — terminó de decir.
— Créeme que ya estoy preparada — le desafié porque a esa hora de la mañana era lo más lógico que se me paso por la cabeza — Ella es una persona, no tiene dueño.
— Bien, que ella elija entonces — termino por irse.
Yo solté un suspiro y camine al baño en donde hice todas las cosas que debía hacer, aproveche de darme una ducha, no fue una ducha como las típicas, me llevó más tiempo intente relajarme, soltar todo el odio que me había causado la conversación con Jonathan porque en serio pensaba que iba a terminar por matarlo. Cuando termine de ducharme me puse pijama otra vez y volví a la habitación, Ad seguía durmiendo y dante estaba hecho bolita a los pies de la cama, me senté en la cama al lado de Dante y Adelina se movió.
— Te demoraste — señaló ella recién despertando y yo solo asentí con la cabeza — ¿Qué paso? — ella se sentó en la cama y en ese momento entró Jonathan en la habitación.
— Nada — sonreí de forma forzada porque no le quería preocupar, mas de todas formas se iba a dar cuenta — voy a ir a la oficina y quizá más tarde me pase por Gregsons Corp. para ver la propuesta de Gossens — me acerque a mi bolso para sacar ropa.
— Claro — dijo ella y Jonathan seguía parado en la puerta de la habitación sin decir nada
Yo tome mi ropa y me fui al baño para cambiarme, no me demore mucho pero fue lo suficiente como para que cuando volviera a la habitación Adelina se encontrara en shock por algo que probablemente Jonathan le había dicho, el surfista seguía parado en la puerta de la habitación y yo solo entre.
— Lo voy a pensar — Logro decir Adelina cuando salió de esta especie de transe y el surfista asintió con la cabeza y salió de la habitación — Me acordé que tengo una reunión ahora temprano — se levantó de la cama con rapidez
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Joyerías Izaro
RomanceSegunda parte de "La CEO" Luego de un tiempo distanciadas Adelina y Lara se vuelve a encontrar por asuntos de trabajo. ¿podrán ambas ser unas personas normales y apoyarse entre ellas en las situaciones mas complicadas? - No estabas cuando me desper...