15- Cuesta abajo

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"Es sobre mi hijo, que es un bueno para nada y ha causado problemas a la Gran Maestra". La señora Wang suspiró, temblando. "En marzo del año pasado, me dijo que estaba aburrido en el pueblo y quería salir para encontrar algo que hacer. Así lo hizo. En ese entonces había un distinguido invitado en el pueblo que quería llamar a alguien para que lo recogiera, así que lo invitó. En junio dijo que había recibido a la persona. En la última carta de octubre dijo que habían llegado a la frontera de Dongting y que volvería para el año nuevo. Desde entonces no ha habido más noticias."

"Señora, ya no mencione la palabra 'problema'; Chenfei originalmente estaba haciendo cosas para mí en las Cuarenta y Ocho Aldeas". Li Jinrong hizo una pausa y agregó: "Los distinguidos invitados eran la familia de Wu Fei, el general Zhong Wu fue seguido en secreto por ladrones. Más tarde, su esposa se llevó a su hijo e hija, ahora huérfanos de padre, lejos de Zhongnan. El año pasado, su escondite fue descubierto y recurrieron a mí por ayuda. Trece personas de nuestra aldea también fueron enviadas, todos ellos son confiables".

La Sra. Wang susurró: "Que vergüenza".

"Los ladrones están desenfrenados en el área de Dongting, no es un sitio fácil de transitar. No hay noticias de que la familia del general Wu haya detenido su viaje. Señora, no tiene que preocuparse. No deben estar muy lejos". Li Jinrong con un gesto de su mano le dijo a Zhou Fei y Li Sheng: "Este viaje no necesita que ustedes dos sean una carga. Me atreví a pedirle a la anciana que los llevara a ambos para que salieran por un tiempo. Cuando estén afuera, no pueden hacer reclamos y no se atrevan a dar problemas si es que quieren conservar sus piernas. Eso es todo, no necesito dar instrucciones adicionales. Además, la señora ya es vieja y necesita apoyo en el camino. No esperen a que alguien les diga qué hacer. Lo digo por ti, Zhou Fei".

Zhou Fei rodó los ojos en secreto y murmuró: "Sí".

Li Sheng dijo apresuradamente: "Tía, despreocúpate".

La cara de Li Jinrong se suavizó un poco y se quedó pensando con el ceño fruncido. Obviamente tenía muchas cosas que decir, pero las analizó una por una y sintió que todas eran palabras triviales. Era innecesario, así que le dijo a Li Sheng: "Adelántate con la Sra. Wang, tengo que hablar con A-Fei por un momento".

Después de que Li Sheng guió a la Sra. Wang hacia afuera, Li Jinrong le dijo a Zhou Fei: "Ven aquí".

Zhou Fei estaba un poco inquieta y miró la espalda de Li Sheng distraídamente. Siempre sintió que no era bueno estar a solas con la Gran Maestra. Según sus experiencias pasadas, esta idea era correcta.

Li Jinrong la llevó al pequeño patio donde ellas solían practicar con Li Sheng y Li Yan, tomó en su mano una larga espada del estante para armas y le preguntó a la confundida Zhou Fei: Ming Feng tiene muy poco contacto con la gente y su puerta está cerrada durante todo el año. Hasta donde yo sé, rara vez se comunican con los demás. Además, Ming Feng no tiene una técnica de esgrima decente, ¿dónde lo aprendiste?"

Zhou Fei se sorprendió por un momento y luego respondió rápidamente, porque Yu Lao también le había dicho que había estado produciendo ese método, pareciendo como si hubiera atrapado muchos espíritus malignos en el arma.

"No he estado allí, ¿no se les permite entrar aquí?" dijo Zhou Fei. "Todo lo aprendí de la máquina y la red del río".

Li Jinrong estaba un poco sorprendida porque Zhou Fei no era el tipo de niña que nunca olvidaba. Cuando estudiaba con Zhou Yitang intentaron incluir algunos libros en su educación. Fue imposible, pero en las artes marciales ella era un talento peculiar: era posible que no pudiera escribir a detalle los movimientos que había visto, pero podía pescar los puntos más críticos y a menudo obtenía la técnica con precisión. Lo practicaba, retrocedía y siempre adivinaba y obtenía una nueva comprensión para finalmente darle su propio toque...Algo inexplicable.

Legend of Fei / Bandits- Autor: PRIESTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora