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JooHyun terminó de desempacar todo lo que estaba en las cajas

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JooHyun terminó de desempacar todo lo que estaba en las cajas. Suspiró y limpió algunas gotitas de sudor que caían por su frente.

Sonrío orgullosa al ver todo ordenado, se había demorado unos días, pero estaba bien para ser su primera -y esperaba que última- mudanza.

Esta vez no tendría que compartir con niñas mimadas que solo querían tener maquillaje costoso, y tampoco tendría que seguir con peleas sin sentido, esta vez solo era ella.

Pero después de unos días de haberse mudado oficialmente sentia la Soledad en su hogar, salía temprano de su casa al trabajo y volvía en la noche sin ser recibida por nadie, bueno, en el departamento anterior la recibían con gritos.

Así que busco alguna tienda de mascotas donde pudiera adoptar alguna animal, quedaba a unas cuantas cuadras de su hogar y solo debería tomar un autobús que la dejaría afuera del local.

En su día libre por ser fin de semana, se dirigió hasta el lugar, que estaba muy bien decorado, con estampados de huesos y juguetes en las paredes, jaulas con aves que cantaban, ladridos y maullidos

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En su día libre por ser fin de semana, se dirigió hasta el lugar, que estaba muy bien decorado, con estampados de huesos y juguetes en las paredes, jaulas con aves que cantaban, ladridos y maullidos.

Habían jaulas con lindos conejitos, también con roedores, y JooHyun no podía estar más que encantada con cada animalito que veía.

Habló con una chica que le fue diciendo sobre el pequeño trámite que debía de hacer para adoptar a algún animal, y ella escuchaba todo.

Un pequeño corgi color anaranjado llamo su atención, era solo un cachorro, y fue el que entró en su corazón. Lo cargó dejando que este dejara lamidas en su rostro y manos con algunos ladridos.

La misma chica la guió hasta el mesón donde debía de hacer el trámite.

Había una pelinegra allí escuchando música solo por un auricular, una de sus piernas estaba sobre un estante y miraba su teléfono con la cabeza gacha.

Al parecer no noto la presencia de las chicas y el cachorro porque siguió en lo suyo. JooHyun pudo saber que eso pasaba a menudo, ya que la chica murmuró un "otra vez" mientras bufaba.

—kang SeulGi— llamó y la pelinegra se enderezó en la silla quitando el auricular. — ayúdale con el trámite.— ella se fue y JooHyun se quedó admirando los lindos rasgos de la persona delante de ella.

—señorita... aquí, tiene que llenar esto.— llamó dándole una hoja de papel con varios espacios vacíos.

JooHyun dejó al cachorro en el mesón, el cachorro no tardo en empezar a jugar con la pelinegra, que tenía una sonrisa y hacía sonidos raros por la tierna criatura.

Llenó cada uno de los espacios con información y se lo dio a la pelinegra. Ella leyó la hoja y se levanto de su asiento buscando una placa con forma de huesito color celeste.

Tomó un lápiz, o más bien tenía forma de el, era más bien una especie de cúter, escribió el nuevo nombre del corgi y atrás el número de JooHyun.

Después sacó un collar del mismo color con un cascabel y lo colocó alrededor del cuello del animal que no perdió la oportunidad de lamer la cara de ella también.

— Bien, bonggie está listo.— la castaña asintió con una sonrisa, la chica tras el mostrador le explico algunas cosas más sobre las vacunas futuras y demás.

JooHyun salió con el cachorro en sus brazos, obviamente había comprado una Correa, pero era tan pequeñito que tenía miedo de que lo pisarán, además de que era muy liviano, también llevaba una bolsa en su mano libre donde había comprado accesorios para el animal y la comida que necesitaba.

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