Apuestas peligrosas

Capitulo 2

Cap. # 2

Escuche una voz femenina irrumpir en mi territorio de juego clandestino, levante la mirada y vi dos señoritas, a una ya la conocía pues la veía en muchas fiestas con mi amigo Lay pero a la otra era la primera vez en verla, la recorrí de arriba abajo con los ojos y de inmediato me di cuenta que era una princesita de alta sociedad, solo con ver unos zapatos de más de 2,000 dólares se puede saber que viene de una familia millonaria.

Cuando les dije que se fueran la princesita me llamo “muñequito” ¿Es enserio? A mí nadie me llama de esa forma, cuando me le acerque para reclamar note que tenía unos ojos hermosos y una boca bastante apetecible. Me pregunte que sabor tendrían, pregunta que descubrí más tarde cuando le di una probada de lo que puedo hacer con mi boca y mi lengua. Fue como comer una fresa bien jugosa, espero que realmente vaya el viernes para poder mostrarle con quien juega y quitarle esa arrogancia que lleva en su boca.

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Después de recuperar el aliento por semejante beso recordé que había salido de allí sin mi acompañante.

-¡Rayos! ¡Elisa!.-marque rápidamente su número y me contesto enseguida.

-Estoy afuera ¿Tu dónde estás? ¿Estás bien?-hablaba preocupada.

-Sí, estoy en un callejón al lado de la universidad, del lado izquierdo para ser específicas.

-Ok, te espero en la esquina con el auto.

Ella paso por mí y nos fuimos a tomar unos tragos cerca del lugar.

-¿________? Tierra llamando a ________ tierra llamando a _______. Agitó sus manos en frente de mi cara y me hiso salir del recuerdo de hace un rato.

-Si ¿Qué pasa? ¿Ya nos vamos?-dije algo desorientada.

-¿Qué te pasa ________? Desde que te subiste al auto estas muy pensativa ¿Paso algo que yo no sepa mientras nos separamos?

-Pues…Él me dijo que fuera a este lugar el viernes.-le mostré la tarjeta con la dirección del lugar.

-¿El? ¿A quién te refieres?

-Al muñequito. No terminamos el juego y me dijo que fuera a ese lugar el viernes a las 9:00 pm. Para acabar lo que empezamos.-tome un sorbo de la margarita que estaba tomando.

-Pues hay que ir, no te puedes perder esta oportunidad. Además yo sé dónde queda este lugar.

-¿Has estado allí?-pregunte curiosa.

-Estuve ahí con Lay una vez, es un buen lugar. Según lo que he escuchado decir los viernes se reúnen los mejores jugadores de Póker en la parte trasera.

-No se diga más, estaremos ahí el viernes. Dejare a ese muñequito sin un solo dólar.-dibuje una sonrisa en mi rostro decidida a encontrarme con ese lobo que mordió y lamio mis labios sin previo aviso. Tome el ultimo sorbo de mi bebida y nos levantamos para irnos.

Esa noche antes de dormir recordé una vez más el sabor de sus labios y su lengua paseando por toda mi cavidad bucal, sin darme cuenta rosaba mis dedos en mi labio inferior donde había recibido la pequeña mordida. Para tener la cara de un niño sabe cómo dejar a una chica sin aliento, si eso hace con un beso no me imagino que sería capaz de hacer en la cama.

-Debes quitarte esos lujuriosos pensamientos de la cabeza y concentrarme en cómo ganar dinero para cumplir mi sueño de vivir en Francia.

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Viernes en la noche

……………………

-Toma, ponte esto.-Elisa me paso un vestido corto rojo y con un escote bastante provocativo.

-¿Para qué es esto? Voy a jugar póker, no a seducir el mundo masculino con mi atuendo, además sabes que no me gusta andar por ahí mostrando todo lo que Dios le puso a mi cuerpo.

-¿No te diste cuenta verdad?-me dijo con una mueca.

-¿De qué?-dije confusa.

-Cuando el chico levanto la vista el otro día solo me vio por unos segundos mientras que a ti te miro de arriba abajo mordiéndose los labios.

-¿Y eso que tiene que ver?

-¿Enserio no te diste cuenta? Te miraba con deseo.-giro los ojos hacia arriba.

-[bufe] Entonces pretendes que lo provoque con este vestido?-dije con el vestido aun en mi mano.

-¡Exacto!

-Aaah lo que quieres decir es que lo provoque sexualmente mientras jugamos ¿cierto?

-¡Al fin comprendes mi lenguaje!-exclamo con sus manos hacia arriba.

Deslice el provocador vestido por mi cuerpo tonificado (modestia aparte) me puse unos tacones bastante altos que alargaran mis piernas, luego Elisa termino el trabajo colocando maquillaje en mi rostro, incluyendo delineador en mis ojos, peino mis cabello y por ultimo coloque unos largos aretes en mis orejas.

-¡bien! ¿Qué te parece?-pregunte modelando mi atuendo en frente de mi amiga.

-Toda una bomba sexual.-dijo con algarabía.-¡Vamos!-Tomo las llaves de su auto que estaban encima de la mesita de noche de la habitación donde estábamos.

-Espera, aún falta algo.-dije devolviéndome. Tome mi perfume y lo esparcí por detrás de mis orejas, en mis muñecas y por último en mi pecho.

-Ahora si nos vamos.

Salimos de casa, subimos al auto y después de unos segundo Elisa introdujo las llaves y lo puso en marcha, estaba ansiosa por llegar. No sé porque me sentía como una niña cuando le dicen que va a los columpios del parque donde suele jugar.

-Bueno, aquí es. Este es el Growl.