Apuestas peligrosas

Capitulo 11

Cap. 11

 

Llegue a la universidad temprano y fui directo al salón de clases, me senté junto a la ventana como siempre, minutos más tarde empezaron a llegar los demás estudiantes entre ellos Chen que siempre me mostraba una cálida sonrisa.

-Llegaste temprano hoy _______.-beso mi mejilla saludándome.

-En cambio tu llegaste un poco más tarde, cuando llego siempre estas aquí.-le respondí con una sonrisa también.

-Hice una parada antes de llegar aquí.-se sentó a mi lado como siempre y empezaron las clases.

Estuve toda la clase pensando en los besos de Luhan, quería recordar la noche que pasamos juntos pero nada llegaba a mi mente, me sentía frustrada y tenía la necesidad de comerme un delicioso chocolate. Pensaba en chocolate y se me hacia la boca agua, lo peor de todo es que no tenía ninguno en mi bolso. Las clases acabaron y solo pensaba en ir a la cafetería a comprar un delicioso chocolate.

Iba a pasos rápidos por el pasillo, baje unas escaleras y luego caminaba por el campus, tenía que atravesarlo para llegar a la cafetería.

Al fin llegue y casi lloro cuando me dicen que no había chocolates, que el ultimo lo había comprado un chico 10 minutos antes de yo haber llegado y que no habrá más hasta mañana que abastecían el lugar.

Iba caminando cabizbaja por no tener un chocolate que calmara mi frustración y choque con alguien, vi que cayó un Kiss (Chocolate) al suelo y lo recogí, levante la mirada y me encontré con la cara de Luhan.

-¿Me das mi chocolate?-dijo.

-No, no quiero dártelo.-le respondí volteándome con el chocolate en la mano. Si él era el causante de mi frustración al menos pagaría con esto.

-¡Oye! Es mi chocolate.-grito tratando de quitármelo mientras yo lo alejaba de él evitándolo.

-¡Dámelo!-forcejeábamos pero me zafé de su agarre y de manera rápida destape el chocolate y me lo comí.

-Ya está en mi boca ¿Ahora qué harás?-le dije sonriendo descaradamente.

Me sonrió, me agarro y me comió la boca. Retrocedí unos pasos y choqué mi espalda con la pared, lleve mis manos a su cabeza y lo despeiné mientras él me amarraba con sus brazos. El sabor de sus labios  se mesclaba con el sabor del chocolate, era delicioso. El no paraba de besarme y ya me faltaba oxígeno, yo también quería seguir saboreando su boca pero tuve que empujarlo para que me dejara respirar ¡cielos! Me dejo sin aliento. Me dejo respirar por un momento, él también se notaba agitado pero cuando mi respiración se empezaba a regular me tomo otra vez y ¡wau! no dejo residuos de chocolate en mi boca, nos despegamos otra vez y nos miramos a los ojos.

-¿Tanto te gusta el chocolate?-pregunte con la respiración agitada sin quitar la vista de sus ojos sintiéndome quemar por dentro, el tardo un poco en responder. Unos 5 segundos mínimo.

-No, pero no me gusta que tomen lo que es mío.-tampoco dejaba de verme y estaba igual de agitada su respiración.