CAPÍTULO 1

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JUNGKOOK

El unicornio de peluche era su estilo, me llamó la atención que subiera una historia a su Instagram, por lo general era cuando estaba emocionada, seguramente sintieron infinita alegría ya que después de dos años volvía a casa y esta vez era para siempre. He imaginado muchas veces como se verá ahora, ¿Será que ya se retiró los frenos? ¿Los lentes que usaba eran permanentes o solo de lectura? La última vez que la vi fue hace un año en vacaciones de navidad, todavía usaba sus frenos y los lentes cambiados de marco, era un marco transparente con lunas cuadradas.

-¡Jungkook! - gritó Taehyun - Vamos que se nos hace tarde y si la princesa espera demasiado se quejará todo el camino. - Taehyun amaba demasiado a su hermana, pero a veces lo sacaba de quicio.

-Lo sé Tae, ¿A qué hora llegaba su vuelo? - pregunté mirando el reloj que marcaba las 2:18 pm

-Papá dijo que a las 3, si no nos apresuramos seremos atacados por el tráfico.

Camino al aeropuerto pensaba en cómo me recibiría después de lo que pasó; aquella navidad me porté muy mal con ella y al irse no se despidió de mí, desde ahí no hemos hablado ya que estuvo ausente en mi cumpleaños, supuestamente tomó unos créditos extra y por eso no podía venir a las vacaciones cortas. Eran escusas que usaba para no hablar conmigo, cuando le escribía dejaba mi mensaje marcado por la viñeta azul y si Taehyun hablaba con ella colgaba antes de que me la pase.

- ¡Al fin! - gritamos al unísono, el tráfico estaba horrible, pero llegamos a tiempo y parqueamos el auto  junto a la puerta del ascensor para subir al pequeño centro comercial que había en el aeropuerto.

-Por aquí Kook, ¡Vamos! - Tae estaba emocionado y quería ir como una bala, pero se detuvo a comprar una botella de agua en la cafetería.

- ¡Hey Tae!, No es tiempo para eso- dije un poco molesto, estaba emocionado y no quería perderme el momento en que saliera de la puerta de arribo.

-La emoción me hace acalorar Kook, déjame tomarme un respiro- bufó cansado.

La pantalla que indicaba los vuelos anunciaba que el vuelo 358 que venía de Londres había llegado, eso significaba que Lalisa estaba en aduana presentando papeles para entrar al país. No pasaron más de 5 minutos y una "niña" (para mi) con un saco blanco y coleta alta luchaba por levantar sus maletas, el gran unicornio de peluche estaba en el piso con algunas manchas negras, Taehyun se quedó viéndole sin hacer nada al respecto, resoplé un poco con enojo, pero a la vez alegre de que no haya hecho y me dirigí a ella, está a unos 8 o 9 metros de mi así que apresuré el paso.

Quería ver su rostro, pero seguía agachada en dirección opuesta a la mía, caminaba tan concentrado en ella que no percaté de lo que sucedía a mi alrededor y es cuando choqué con algo ... Más bien con alguien.

Llevaba una chaqueta ploma (después me enteré de que se llama blazer) que le llegaba hasta la cadera, una especie de camiseta negra sin mangas que estaba pegada a su cuerpo y un pantalón del mismo color de la camiseta que llegaba hasta la parte en donde iniciaban sus tobillos, y si digamos que la vi de pies a cabeza. ¿Cómo haces que un traje formal se vea elegante al combinarlo con deportivos blancos? ¿Ese color de cabello es chocolate, cenizo? ¿Por qué el flequillo le tapa la frente?

Los enormes lentes de sol le tapaban casi toda la cara; pude ver unos labios rosados ​​que empezaron a abrirse mostrando sus dientes, una sonrisa un poco coqueta. ¡Concéntrate! - me dije a mi mismo- Estás aquí por Lisa.

-Disculpa no fue mi intención lindura- le dije a chica que empezó a reír de manera sarcástica.

- Jungkook, Jungkook, Jungkook - dijo-No te perdono.

CORAZONES DE PAPEL - LIZKOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora