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Me muero de amor.

Eso es lo único que puedo decir por el momento. Y si no entienden mi sentimiento, la explicación es sencilla.

Ruggero dijo que subiría a echar un vistazo de cómo está Aarón. Pero eso fue hace más de una hora y cuando decidí venir a ver lo que ocurría, la respuesta se manifestó ante mis ojos.

Él italiano estaba completamente dormido y Aarón lo seguía durmiendo sobre su pecho.

Ambos se veían demasiado tiernos en esa posición. Y odiaría despertarlos, pero Ruggero debe ir con el oftalmológo y yo debo ir a trabajar ahora mismo.

Con cuidado me siento en el borde de la cama y llevo mi mano a la pequeña mejilla de Aarón. Él se remueve y se aparta de mí contacto acomodándose mejor en el pecho de Ruggero.

Y él del mismo modo se remueve y sin dejar de abrazar al niño se pone de lado. Es que son tal para cual.

— Ruggero, despierta. —ordeno moviendo su brazo.— Amor...

— ¿Qué? —gruñe adormilado.— Déjame.

— Tienes consulta con el oftalmólogo, mi amor.

Él reniega, se remueve un poco más y al final termina sentándose contra el respaldar de la cama. Aarón en cambio se estira y sigue durmiendo.

Al parecer no soy la única perezosa en este lugar. Me quitaron el trono.

— ¿Con quién va a quedarse? —señala a Aarón que sonríe dormido.— No voy a tardar mucho pero igual.

— Agustín.

Él niega de inmediato pero me río asegurándole que si va a suceder. Por mucho que mi italiano no confíe en Agus lo dejaremos con él.

Además no será mucho tiempo, y sé que el cordobés podrá hacerse cargo. Dijo que se moría por practicar el arte de ser padre.

Ignorando sus quejas voy hacia el tocador buscando mi bolso y le pido que se apure porque ni quiero que llegue tarde. Finalmente beso la frente del pequeño, los labios del italiano y salgo apurada.

Hace dos días salí de vacaciones, y de hecho diría que es perfecto. Pero estas dos semanas de vacaciones en la universidad significan mucho trabajo en la agencia.

Habíamos trabajado mucho para San Valentin. Como siempre, fue un éxito, pero ahora estamos trabajando en el catálogo de vestidos de novia de primavera.

El catálogo en físico saldrá para finales de este mes y comienzos de marzo. Por eso mismo estamos trabajando muy bien.

Apenas pongo un pie en la agencia tengo a todo el mundo sobre mi, tienen que arreglar mi cabello, maquillaje y todas esas cosas. Yo solo me dejo hacer y espero pacientemente a que todo esto termine rápido.

He de admitir que se siente relajante que traten tu cabello con delicadeza y que te maquillen mucho cuidado. Comienza a darme sueño aquí.

— Lista. —quiero renegar pero al final me levanto analizando mi apariencia.— Los vestidos están en el perchero. Los ordené según debes ir poniéndotelos.

— Gracias.

Ella asiente y sale dejándome sola para que pueda cambiarme. Voy hacia el perchero buscando el primer vestido y con mucho cuidado de no dañar el peinado o maquillaje, termino poniéndomelo.

Con cuidado termino de subir el cierre y busco los tacones antes de mirarme al espejo. Wow, de verdad es un sueño para mi vestirme así.

Me encanta aunque sea umuy sencillo.

Mexican Girl Donde viven las historias. Descúbrelo ahora