-¿Por qué no estoy en casa?-Volteo y veo a Antony, que está concentrado conduciendo a más de 110 kilómetros por hora.-¿A dónde vamos?
-No es seguro que regresaras a casa, te estarían esperando allí. En cuanto a dónde vamos...no lo sé. Por el momento buscaremos un lugar donde pasar la noche y llamar a tu...prima. Tienes que decirle lo que pasó.
-¿Qué es...qué sucedió?
-Nos atacaron. Solo dile eso. Y asegúrate de que sea ella. Paige sabrá que hacer.
Después de un par de horas más en carretera encontramos un lugar donde pasar la noche. Antony pide una habitación y el señor que atiende le lanza una sonrisa juguetona. Yo me retuerzo incómoda. Cuando llegamos a la puerta correspondiente, el saca la llave y la abre. Hay una cama y un sofá frente a una televisión. En cuanto cierra la puerta se va contra el sofá y se deja caer en él, agotado.
-Yo dormiré aquí. La cama es para ti. El señor me dijo que había un teléfono en una de las paredes. ¿Te sabes el número de casa?
-No. Y antes que lo preguntes, es porque están guardados en mi celular.
-Tendremos que esperar, entonces. Tu familia se ha de estar muriendo de preocupación. Por lo mientras solo queda descansar.
En cuanto me acuesto me quedo dormida. En mis sueños me encuentro de vuelta en el jardín lleno de flores, tan colorido como siempre. Parece que ni la próxima llegada del invierno puede hacer que pierda el color. Me vuelvo cuando escucho un grito ahogado a mis espaldas. Una chica se dirige hacia mi corriendo y me abraza. Segundos después me doy cuenta que es mi hermana. Me suelta y me toma por los hombros.
-¿Dónde estás? Estábamos preocupadas por ti.¿Estas bien?
-Si, si. Estoy en un hotel en la carretera.
-¿Qué haces en un...?
-Antony y yo...
-Voy a matar a ese chico, quien quiera que sea.-Dice haciendo una mueca.
-Hermana, no es lo que estas pensando.-En el momento en el que le dije hermana se relajó.-Él me ayudó a escapar de unos tipos que nos atacaron.-Intento explicarle lo más tranquila que puedo lo que sucedió, procurando hacer que las cosas no suenen tan mal, aunque resultaba difícil.
-¿Qué? ¿Dónde estás?-Dice en cuanto termino de explicarle.
-Sabes que jamás se me han dado las direcciones.
-Cierto. Eso será más difícil. Tendremos que localizarte de otra forma. Mis padres van a enloquecer. Habrá que llevarte antes. No se muevan de ahí a menos que haya otro peligro.
-¿Qué pasará con Antony?
-Tendré que consultar a mamá...y...a la Reina.-Parece confundida mientras dice esto.
-¿Anhelisse?-Llam una voz en algún lugar del jardín.
-Me llaman. Tengo que irme, hermana.
-¿Hija?-Repite la voz.
-¿Te llamas Anhelisse?
-Si. Es mi verdadero nombre.
-Pensé que eras Paige.
-Solo es mi nombre mortal. Nos vemos en la mañana. Descansa.
-¿Hija?-Vuelve a llamar una voz de mujer que se me hace conocida. Yo quería ver de quién se trataba. Tal vez era nuestra madre. Pero no puedo quedarme. Soy arrojada del jardín y regreso a mis sueños normales.Otra vez veo esos ojos rojos. Burlándose de mi.
-¿Quién...quien eres tu?-Tartamudeo. Es la primera vez que me atrevo a hablarle. Aún así me siento con miedo-¿Qué quieres de mi?
-¿Aún no lo sabes? Pensé que eras más inteligente.
-¿Qué eres?-Digo más molesta por la insinuación de que soy tonta al no descubrir lo que un patético tío quiere de mi. Como si fuera adivina.
-Cuidado con lo que dices. Niña insolente.-Espero a que se refiera a que le dije "Que" en vez de "quien" y no a lo de "patético tío"-Que yo soy tu peor pesadilla.
-Eso ya lo se. -Mi respuesta le causa risa. Empieza a caminar alrededor de mi. Es más alto y más flaco que yo. Su piel morena y su cabello plateado hacen que sus ojos rojos como la sangre se vean más amenazadores.
-Debería matarte.
-¿Por qué...por qué no...lo...lo haces?.-Otra vez el tartamudeo.
-No me tientes, mocosa. Solo estoy esperando.
-¿A qué?
-A que descubras la verdad.
-Ya se la verdad.
-Eso es lo que crees.
-¿Por qué debería confiar en lo que dices?
-No deberías. Pero esta vez tienes que hacerlo. No me conviene mentirte.
-¿Por qué?
-Haz lo que te digo y descubre la verdad, mocosa. Te están mintiendo. No te han dicho toda la verdad.
-Ella no me mentiría.-Tengo la sensación de que ambos sabemos a que con ella me estoy refiriendo a mi hermana.
-Tal vez.-Otra vez esa risa que retumba en el cerebro.-Tal vez no. No sé porque te ayudo. Debería dejar que te sigan engañando. Si. Eso sería divertido.-En eso caigo en la cuenta. Esta jugando conmigo. Con mis pensamientos. Quiere que dude de mi hermana. No. No lo dejare.
-¡Déjame es paz!
Todo a mi alrededor se cubre de niebla y despierto en la habitación. Antony sigue acostado en el sofá. Todavía es de madrugada. Vuelvo a dormir, sabiendo que será un duro día por delante.
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Archai: El Origen
CasualeKiara es una chica diferente a las demás. No sólo por su cabello, que es blanco-a pesar de que apenas va a cumplir 16 años,-sino también por sus habilidades... Su vida era relativamente normal, hasta que todo comenzó. Ahora tiene que lidiar con el h...