𖥦 ٭࣭ . ‹ 💌 › 𝐴𝑁𝑌 𝑇𝐼𝑀𝐸 𝐴𝑇 𝐴𝐿𝐿 𓍼 ꒰ʙᴇᴀᴛʟᴇsʜɪᴘs꒱ . ‧ ˎˊ◌

[10] 🌇࿔⃝࿑ؘ֪᭫֓༅McHarrisonˎˊ˗

Época: The Quarrymen - With The Beatles.

Tenía una pequeña sospecha...

O no una pequeña, una gran sospecha.

A Paul le gustaba John.

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Al principio era manejable. John, Paul y él saldrían a algunos sitios por las tardes o noches, ─con o sin permiso, porque la rebeldía estaba en sus venas─. La pasarían bien, comentarían cosas de la escuela y de la banda, se quejarían del baterista o pensarían en algún bajista, darían varias ideas para hacer el proyecto más grande o se burlarían de algún idiota ebrio que pasara por ahí.

Pero en cierto punto, John y Paul se fueron acercando mucho más de lo que habían previsto.

Y en cierto punto, ambos hicieron algunas salidas sin el más joven.

Vamos, que George no lo tomó tan mal antes. Pensaba que era bueno darle espacio a su amigo, era bueno crear lazos y no quedarse en un mismo lugar, él llegó a hacer lo mismo.

Pero al pasar las semanas la situación se hizo cada vez más dolorosa.

Aún los tres daban sus paseos y aún conversaban y tal, pero George fue sintiéndose más y más como una tercera rueda, o como se le conocía también: "violinista". Porque sus compañeros tenían una afinidad impresionante y tenían tanto que aportar, John poseía un encanto natural y no era de extrañar que Paul le siguiera el juego.

Claro, ahí estaba ese muchacho que no era tan aplicado en el estudio, pero tenía creatividad y carisma, un chico atractivo por dónde sea que lo mires, justo para Macca.

Y aquello era insufrible. No había pensado en la posibilidad de que alguien más pudiera tener a Paul tan engatusado. Sí, el más alto se acercó a él cuando lo vio tocar la guitarra en el descanso y luego se fueron comunicando con naturalidad, pero hey, quién pensaría que otro le podía quitar el puesto al mayor confidente que podía tener, ¿tan fácil era mirar a otros horizontes y dejarlo apartado?

Harrison fue hablando menos y quedando atrás. Decidió dejar que siguieran en lo suyo.

Y si bien él tenía más amistades, ninguna era Paul.

Estaba en su cuarto, leyendo un libro como tarea escolar. Pero no se estaba concentrando ni siquiera en el primer párrafo. Tenía una inquietud que le estaba colmando la paciencia hace rato, paralelamente con esa mezcla de emociones que no había cesado desde que John y Paul se iban a pasear solos.

Escuchó como alguien entraba a su casa y poco después, ingresó a su cuarto.

──Hola George.

──¿Qué no te enseñaron a tocar la puerta antes de entrar?