𖥦 ٭࣭ . ‹ 💌 › 𝐴𝑁𝑌 𝑇𝐼𝑀𝐸 𝐴𝑇 𝐴𝐿𝐿 𓍼 ꒰ʙᴇᴀᴛʟᴇsʜɪᴘs꒱ . ‧ ˎˊ◌

[21] 🌇࿔⃝࿑ؘ֪᭫֓༅McHarrisonˎˊ˗

Época: Post-Beatles.

Tenía todo lo que había deseado.

Una creciente independencia, la toma de decisiones que caía solamente en sus manos, el absoluto control de todo lo que involucraban sus trabajos musicales, los estilos y letras eran de su entero gusto sin que nadie pudiera quejarse al respecto.

Una casa perfecta en la ubicación ideal, un equipo completo de instrumentos de cuerdas de distintas culturas, sin olvidar sus confiables guitarras. Estabilidad económica, grandes amistades y una posición social admirable.

Su primer álbum como solista estaba rindiendo muchos frutos, ¿quién lo diría? El dizque "beatle callado" estaba dando mucho de qué hablar y eso le fascinaba, estar en boca de todos para que vieran que tenía talento, más no que se quedaran con la sombra que había dejado hace un año.

Era la imagen del éxito.

Entonces, ¿por qué sentía que le faltaba algo?

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Pattie se había ido a visitar a su hermana, ella le había insistido que la acompañara pero él se excusó con que "quería meditar un rato".

Realmente no tenía ganas de hacer meditación, como era su costumbre.

Solo en su estudio y sin ánimos de salir ese día hacía trazos al azar en una hoja.

Había adquirido este diario vivir entre sus shows, fiestas y eventos sobre la cultura de la India que en ocasiones lo hacían colapsar.

Era dueño de su propio mundo en el que no parecían haber objeciones, tenía sus dosis de locuras por momentos, luego vendría la sobriedad y así pasaría por un círculo vicioso que no iba a detener, ¿para qué?. Aún con eso sacaba tiempo para sí mismo, donde no quería que lo molestaran con banalidades.

Y a pesar de su tan anhelada vida soñada, de la que tenía en mente desde que era un adolescente había una especie de escozor que lo carcomía.

El teléfono sonó y tuvo que obligarse a levantarse y contestar.

──¿Diga?

──Amigo. ── Era Ringo y se escuchaba feliz.──, ¿Cómo estás? ¿Andas ocupado?

──No, ¿por qué? ¿Qué necesitas Ritchie?

──Me preguntaba si podríamos vernos un día de estos, hace rato no conversamos apropiadamente. ── George se rascó la nuca, sin tener alguna excusa para decirle que no al de ojos azules.

──Claro... Puede ser mañana.

──Estupendo, ¡nos vemos! ── Ni llegó a responder algo más debido a que el otro había colgado. Aquello lo dejó sin cuidado, por lo que se devolvió a donde estaba antes.