Harry Styles
Estaciono frente a un restaurante y apago el motor al instante, localizando el trabajo de Dhalia. La noche ya pronto llega a Holmes Chapel y no puedo creer que la chica me haya convencido de venir para llevarla a su casa. Otra cosa que no me gusto para nada fue que Edward se aprovechara de la situación, para quedarse con mi esposa, cosa que a ella no le molesto para nada quedarse sola con él mientras yo salí a base de mentiras. No puedo decirle que vendré a ver a Dhalia de nuevo, esta vez me estoy arriesgando a que me descubra otra vez Cassie. No insistió a preguntarme más acerca de mi escapada secreta, pero tampoco se quedó muy conforme con mi mentira.
Dhalia sale por las puertas de color café y me bajo de inmediato, quitando las llaves del contacto. Espero a que los autos pasen y cruzo la calle trotando hasta llegar al otro lado de la parada. La chica sonríe de pronto cuando me mira:- Hola.- saluda, cuando ya estamos cerca.
Me detengo a solos unos metros de su persona:- ¿Qué era tan importante de lo que querías decirme?- pregunto rápido, solo para librarme de ella pronto y regresar a casa.
Se acerca a mí y su brazo se engancha al mío:- Primero vamos a por un café.- propone, jalándome con ella cuando comienza a caminar.
El silencio se hace presente entre nosotros, pero no quiero quedarme callado, así que insisto de nuevo:- ¿Qué tenías que decirme, Dhalia?- demando ya serio por su actitud.
Llegando a la esquina de la calle, nos detenemos sin decir algo más. Llevo mis manos a los bolsillos del pantalón e introduzco los dedos para cubrirlos del frio. La chica parece pensar las palabras, porque solo miro como suspira repetidas veces y frunce los labios como si quisiera decirlo en voz alta. Su agarre se intensifica más, apretando mi brazo como si estuviera conteniéndose de algo grave, pero no suelta ninguna palabra.
-Ven.- susurra la chica después de unos minutos y vuelve a caminar conmigo. Recarga su cabeza en mi hombro y baja su mano hasta encontrar la mía para entrelazarla.
De nuevo, se queda en silencio y esto ya me tiene desesperado. Estamos caminando en dirección opuesta de la camioneta y la luz del sol ya se ha ocultado, para que la oscura noche envuelva el lugar. Hay personas que se nos queda mirando, algunos sonríen de lado, otros se miran extrañados. Puede que ya me conozcan por aquí y sepan que estoy casado con otra mujer, pero de que me miren con otra caminando de la mano, a lo mejor levanto dudas. Damos vuelta en otra esquina más, recorriendo la banqueta de la cuadra. Vuelvo a enfocar mi atención en la chica que está en silencio, ella por el contrario, está mirando al suelo o está sumida en sus pensamientos que no presta atención a nada de lo que hay a su alrededor. Suspiro cansado y exasperado porque quiero irme pronto, y mirar que el maldito de Edward no haya hecho una de las suyas. Donde solo me entere que estuvo jugando con Cassie, tomare medidas drásticas.
Después de dar otra vuelta en la siguiente esquina de la calle, decidí tener el paso yo mismo y quitar mi brazo de Dhalia. El silencio me tiene estresado y más porque no dice nada, así que retomo de nuevo la conversación:- Dime de una vez, Dhalia, lo que querías decirme hace unos momentos.- me pongo frente a ella, para que me mire directo a los ojos.
Ella levanta su vista del suelo y noto que ha fruncido el ceño:- No es nada malo, Styles, si es lo que piensas. Ni tampoco estoy embarazada, por si creías que te llame para eso.- explica la chica, logrando que mi cuerpo dejara de tensarse al pensar que podía estarlo.
-¿Entonces?- vuelvo a insistir.
Una sonrisa aparece en sus labios y sus brazos rodean mi cuerpo al instante:- Solo quiero pasar un tiempo contigo, ¿no puedo hacerlo?- habla con tanta dulzura, que hace que ría con sarcasmo.