Polos Opuestos

CAPITULO 27: ROMANCE FURTIVO

Nota de Autor: Buenas, este capitulo debería haberlo subido ayer, junto con el que le sigue; pero no me dieron los tiempos. Espero les guste, es un poco mas largo de lo habitual. No olviden votar y comentar! 

Noah

Pasé la noche entera intentando conciliar el sueño. Me despertaba cada una o dos horas con pesadillas. En cada una de ellas aparecía Marcus descubriéndonos, Amanda llorando y todo se volvía caótico.

Me levanté repetidas veces para ir al baño y mojarme el rostro; como si eso fuese a calmarme.

Cuando llegó una hora prudente de la mañana, tomé el celular y le marqué; necesitaba saber que había sucedido.

Al tercer tono contestó:

— ¿Noah? ¿Pasó algo? ¿Por qué me llamas tan temprano?—se la escuchaba entre dormida.

—Perdona, no quería despertarte; los nervios están matándome. Necesito saber que paso con Marcus anoche—. Dije tan rápido que apenas se me entendió.

—Despacio, tranquilo; no sucedió nada. Sigue intentando volver conmigo, cosa que tú y yo sabemos no sucederá. Intentó algo así como asustarme, o eso creo; no lo sé con certeza, fue extraño.

— ¿Asustarte? ¿Intentó hacerte algo? No me asustes Amy—. Pronuncie preocupado.

—Calma, no me hizo nada; estoy bien, estamos bien. ¿Sí? Ahora intentaré dormir un rato más. Esta tarde, luego de la escuela voy a encontrarme con Pía, pienso contarle a detalle lo nuestro. Si quieres esta noche podríamos vernos, obviamente no en un lugar muy público.

— ¿Estás segura de contarle lo nuestro? Ella fue prácticamente quien te presentó a Marcus.

Realmente ansío verte; ¿qué dices de venir a mi casa? Mi madre va a salir con unas amigas a cenar, seguramente vuelva tarde—. Quería verla, la extrañaba a pesar de haberla visto el día anterior.

—Me agrada la idea, hablaré con mi madre y luego te confirmo por mensaje. Noah, hoy nos veremos en la escuela; sé que será extraño, pero debemos seguir manteniendo la apariencia de ser "amigos". ¿De acuerdo?—la idea me disgustaba, quería poder besarla frente a todos y demostrar que la quería sin temor.

—No, pero lo entiendo. Quédate tranquila. Bueno te dejo dormir un rato más preciosa. Te quiero, nos vemos luego.

—Gracias Noah, eres un dulce; nos vemos más tarde, también te quiero—. Pronunció y cortó, mi corazón se saltó un latido al oírla decir que me quiere.

Lo cierto es que cruzarla en los pasillos de la escuela y no poder abrazarla o besarla fue una tortura. La observaba hablar, sonreír y me derretía.

Definitivamente ésta chica tenía algo especial, que me estaba enloqueciendo.

Deseaba que llegara la noche para poder tenerla entre mis brazos. La había invitado a casa con la intención de darle una sorpresa, si bien sé que no es de esas chicas cursis y melosas; espero que la cena romántica que tengo planeada para ambos le encante.

Por supuesto la comida es encargada, me encantaría cocinarle como en las películas, pero no tengo la menor noción de cocina y probablemente terminaría incendiando la casa.

Compré velas para la ocasión, encargué desde la mañana la comida y estuve arreglando la casa antes de venir a clases.

Y tengo pensado al salir de la escuela ir al centro, hace unos días andaba caminando por allí y vi un vestido que sin dudas es de su estilo; por lo que pienso comprárselo y enviarlo a su casa para que lo use está noche. Estoy completamente seguro que se verá aun más preciosa de lo que es con el puesto.