PODEROSA ILUSIÓN

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Apenas vió aquel panorama supo que había caído en un Genjutsu muy poderoso. Lo que le faltaba, tener que lidiar con ésto en momentos así. ¿Cuándo pasó aquello?

Quizás debió ser cuando entró a esa cueva tan extraña. Ahora tenía que salir de alli. Quiso comunicarse con Kurama pero no pudo. Estaba dormido como efecto de aquel poderoso Genjutsu también. Por más que lo intentó no pudo despertarlo.
Significaba que estaba solo. Tampoco podía oír a su hijo ni siquiera le era posible localizarlo con su chakra. Malo, muy malo resultaba ser eso.

Se encontraba en Konoha pero no había ningún habitante, parecía como si hubiesen tenido que marcharse rápidamente dejando las cosas allí mismo.

Caminaba por las desérticas calles mirando los papeles exparcido por doquier, los puestos de ventas con los productos a la vista, los locales abiertos con las cosas allí. Pasó por varias cafeterías y restaurantes viendo los pedidos de las personas servidos en las mesas algunos intactos y otros comidos a media. Nadie habia en esa Konoha. Fue a su casa y encontró la puerta abierta. Todo estaba tal como lo recordaba pero no estaban ni su esposa ni su hija. La cocina con las verduras y la carne en plena preparación. Los dormitorios a medio arreglar.

Naruto salió de allí y se dirigió a la torre del Hokage para encontrarlo todo tal como solía estar pero sin las personas. Las montañas de papeles en su oficina como de costumbre, la computadora encendida, el ramen abierto y humeante. Como si tan solo un segundo antes hubiese sido abierto. ¿Qué clase de genjutsu era ese en el que había caído?

Intentó una vez más rastrear a su hijo mediante el chakra pero le resultó imposible. No podía localizarlo ni contactarlo con su mente. Había sido alejado de Boruto al completo. ¿Quién tendria el poder suficiente como hacerle eso a alguien como él?

Naruto salió de ese lugar y siguió caminando por las vacías y solitarias calles de Konoha en busca de algo o de alguien que pueda ayudarlo a liberarse de ese Genjutsu.

Caminaba sin césar recorriendo la inmensa aldea contemplandolo todo, entrando a las casas de quienes conocía allí y confirmando que solo estaba él. Hasta las ropas que solían usar estaban exparcidas por doquier pero no las personas.

Cuando se cansó de caminar empezó a saltar de techo en techo para ver a la aldea desde otra perspectiva aunque el resultado fue el mismo.

Comenzaba a impacientarse, algo tenía que encontrar allí. Pero por más que caminase o corriera no había nadie ni nada que le fuese útil para escapar de esa situación.

Entonces se detuvo en el techo de la torre del Hokage y empezó a utilizar los diversos métodos que conocía para liberarse de esa ilusión. Pero nada funcionaba. Quiso detener el flujo del chakra y aunque lo hubo conseguido no logró liberarse del Genjutsu aquel que lo tenía atrapado. Así fue recurriendo a diversos métodos y técnicas conocidas pero nada funcionaba.

Lo extraño era que no recibía ningún ataque por parte del enemigo. Al tenerlo atrapado allí lo lógico sería que empezara a atacarlo para debilitarlo y finalmente matarlo pero no era eso lo que sucedía. ¿Qué estaba pasando entonces?

Recordó las palabras de Jiraya cuando siendo niño le había enseñado cómo liberarse de los Genjutsus si caía en esas técnicas.

"Si nada de lo que te enseñé funciona...entonces deberás darte por vencido Naruto. Significa que quien te atrapó es muy poderoso y no tienes escapatoria. En ese caso ríndete...salvo que cuentes con tus amigos cerca. Si es así tendrás una posibilidad de escape...de lo contrario deberás darte por vencido".

La desesperación se adueñó de todo su ser ¿Cómo podría darse por vencido estando su hijo en peligro? Tenía que salir de ésta a como dé lugar ya que él lo necesitaba. Y no solo su hijo sino toda la aldea. Pero antes que ser Hokage era padre y si no podía salvar a Boruto....menos aún podría proteger a toda la aldea.
- ¡¡¡Kuramaaaaaa reacionaaaaa!!!!! ¡¡¡Ayúdameeeeee!!!!!!

Gritó con toda el alma pero solo sintió un leve calor recorrer su cuerpo, era inútil. El Kyuubi estaba bajo los efectos de esa técnica también. En ésta ocasión tendría que valerse por sí mismo...como solía hacerlo en el pasado cuando Kurama era aún su enemigo. Pero no se rendiría, saldría de ésta y salvaría tanto a Kurama como a Boruto. 

- No podrás vencerme tan fácilmente, quizás hayas podido neutralizar a Kurama momentáneamente pero conmigo no podrás. Te demostraré de lo que soy capaz de hacer.
Naruto volvió a intentar detener el flujo del chakra empleando así todo lo que le hubo enseñado su maestro Jiraya. Lentamente fue sintiendo cómo la oscuridad retrocedía y algunas casas de esa Konoha desaparecían.

Aquello era buena señal, solo tenía que seguir intentándolo. El chakra celeste fue emergiendo de su cuerpo para envolverlo al completo mientras más casas y edificios iban desapareciendo junto a la oscuridad que seguía retrocediendo.

En un determinado momento pudo oír el desgarrador grito de Boruto que clamaba por su ayuda, ésto le dió fuerzas para seguir intentando liberarse de ese infernal Genjutsu. Respiraba entrecortado debido al cansancio que sentía pero continuaría haciéndolo. A medida que los edificios y casas de Konoha iban desapareciendo podía sentir el chakra de Boruto nuevamente aunque lejano.

Lentamente su voz llegaba a él. Su hijo intentaba ayudarlo estando prisionero.
- Iré por tí Boruto

"¡Papá...papá...papá despierta!"

Su voz se volvía más cercana y nítida cada vez. Solo tenía que seguir así. Pero lo cierto era que el agotamiento amenazaba con vencerlo. No obstante no podía darse por vencido habiendo llegado tan lejos.

"¡¡¡¡Papá despierta!!!!!"

La voz de su hijo resonó en su mente con tal fuerza que pudo lograr hacer desaparecer a casi toda Konoha junto a ese genjutsu.
- Boruto - susurró débilmente ya que no le quedaba casi chakra pero repentinamente el chakra de Kurama empezó a fluir en su interior. Fue cuando lo vió. Un gigantesco dragón de hielo apareció frente suyo con esos malignos ojos rojos mirándolo con odio.

- Tu hijo es mío y tú increíble poder también lo será - su voz resonó en su mente pero Kurama despertaba del todo en esos instantes y su rugido junto a su poderoso chakra lo alejó de allí en menos de un segundo - ¡Ninguno de los dos podrán resistirse!
- ¡Alejate de una vez! - la voz de bajo de Kurama resonó en el lugar y fue cuando el genjutsu se quebró.

Naruto abrió los ojos y vió tanto a Shinki como a Sarada a su lado introduciendole sus chakras en su cuerpo tras haberlo desenterrado de aquella tumba en la que había caído. Naruto estaba exausto pero aquello había acabado.
- Chicos...gracias - dijo sonriendo.

"Gracias hijo, pronto serás libre de nuevo"

"Papá...qué alivio....pudiste despertar"

"¿Estás bien Kurama?"

"Por supuesto muchacho. Es hora de ponerse en marcha, ya dormimos demasiado".

Tras colocarse de pie corrió junto a Sarada y Shinki lejos de esa cueva infernal acercándose cada vez más a Boruto.

Ahora sabía que el verdadero enemigo era ese dragón de hielo. Dentro de muy poco podría pulverizarlo.

SECRETOS DE UNA PASIÓN (BORUSHIN) (SASUNARU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora