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Decir que no estaba nervioso era un total mentira.
Repasó los echos sucedidos durante aquellos momentos en su cabeza por segunda vez, sin creerlos del todo.

Había salido de su casa durante la noche mientras llovía.
Estaba pensando ingresar en su institución sin permiso.
Se encontró con la figura del cazador, el cual parecía seguir cada uno de sus movimientos.
Habló cosas que no debía.
Se abrazó al cazador y lloró.
Al parecer había llorado más que otras veces ya que se había dormido; o eso era lo que creía.
Despertó en una casa que claramente no era la suya.
Ahora se hallaba usando ropas que no eran las suyas.
Había admirado la belleza del cazador de una manera muy posesiva.
Se había preguntado seriamente como se sentiría besar los labios de aquel hombre nuevamente.
El detalle del lunar sobre la comisura de sus labios lo había enloquecido.
Y en aquel momento se hallaba en el auto de aquel cazador dirigiéndose hacia su instituto.
Y estaba por utilizar su celular para llamar a su amigo para que lo ayudará inventando una excusa para su madre.

HoSeok lo observaba de reojo mientras esperaba que el joven sentado en el asiento del copiloto le indicará a dónde debía dirigirse.
Lo sorprendía la manera de actuar de aquel jovencito. Lucía como alguien demasiado tímido y cohibido comparado con los otros jóvenes del lugar. Entonces tomó del bolsillo de su saco su celular.

- Ten, estoy seguro que querrás llamar a tu madre para avisarle que estás bien - ordenó entregándole el móvil al chico de cabellos rojizos.

El rostro de TaeHyung palideció a tal punto que creyó que podría desfallecer en aquel preciso instante.
No podía llamar a su madre y decirle que no estaba en su casa, porque conocía a aquella mujer y estaba seguro que derrumbaría cada casa, comercio u hospital buscándolo para cerciorarse que él se hallaba bien; pero si se enteraba que estaba con alguien mucho más mayor que él y sobretodo que éste último era un cazador, se encargaría de matar al contrario sin dudarlo.
Porque había aquel pequeño detalle, él era un brujo y se encontraba en un auto con un cazador; y no con cualquier cazador si no que con el mismísimo Jung HoSeok.
Definitivamente no podría hablar con su madre.

Marcó un número y acercó el aparato hasta su oído, rogando internamente para que del otro respondieran a su llamado.
Luego de dos tonos y varios segundos que parecían interminables para él, escuchó una voz del otro lado.

- ¿Hola? - la voz adormilada de su amigo le devolvió aquella tranquilidad que había creído pérdida - ¿Quién es? - estaba seguro que su amigo se estaría preguntando quién era aquella persona y cómo había obtenido su número telefónico.

- ¿YoonGi? - se animó a preguntar a pesar de saber que era el.

- ¿TaeHyung? - preguntó la voz del pálido un tanto sorprendida - ¿Dónde estás y por qué me llamas de un número desconocido? - indagó con clara señal de enojo.

- Esto es un tanto largo y complicado de explicar - contestó intentando que su amigo no se interesara demasiado en su explicación - pero puedo pedirte un favor - suplicó para que el pálido no cortara la llamada en aquel momento - ¿Se encuentra SeokJin Hyung allí contigo? - preguntó dudoso de la respuesta del contrario.

Entonces la voz de un tercero se hizo presente y TaeHyung tuvo que apartar un momento el móvil ajeno de su oído para evitar quedar sordo.

- ¡KIM TAEHYUNG! - la voz de SeokJin se notaba completamente cargada de nervios - será mejor que te aparezcas en diez minutos en la puerta del instituto o te juro que te arrancaré uno por uno los cabellos rojizos que posees ¿Me entendiste? - amenazó dejándole en claro que no esperaría ni un solo segundo más.

El rostro del menor volvió a tornarse blanco y susurrando un suave "de acuerdo" colgó el llamado observando al cazador él cual esperaba que le indicará a dónde debía dirigirse.

- Al parecer están furiosos contigo - rompió el silencio incómodo HoSeok guardando el celular en su saco nuevamente.

- Es solo que se preocupan demasiado por mí, eso es todo - respondió guiando su mirada al suelo del auto.

- De acuerdo - dijo con voz neutral colocando sus manos sobre el volante - ¿Donde debo dejarte? - preguntó sin desviar su mirada del paisaje frente a él.

- ¿La Universidad de Seúl, le queda cerca? - preguntó sin levantar su vista.

- Sí, a veinte minutos - respondió poniendo en marcha el auto observando por el espejo retrovisor las expresiones del menor a su lado - ¿Aunque no estás llegando tarde a tus clases a estas horas? - preguntó curioso sin apartar su vista de enfrente - abróchate el cinturón - ordenó un poco serio.

- Sí, voy tarde, pero recuperaré las horas - respondió mientras intentaba en vano colocarse bien el cinturón de seguridad.

- permíteme - habló luego de frenar el vehículo en el semáforo en rojo.

TaeHyung sintió una fuerte presión sobre su pecho al observar tan de cerca a HoSeok el cual se había acercado con la intención de abrochar el cinturón que claramente a él se le había dificultado.
Sus mejillas se colorearon casi de inmediato al respirar el perfume del cazador, aquel aroma era idéntico al de la cama donde se había despertado y no pudo evitar ruborizarse aún más al recordar donde había descansado tan cómodamente.
HoSeok acomodó el cinturón sobre el pecho de TaeHyung para que éste no lo apretara demasiado y sin notarlo se había quedado observando los labios de color rojo por un largo tiempo hasta el sonido de una bocina tras ellos los devolvió a la realidad.

TaeHyung maldecía internamente al conductor que se encontraba tras ellos ya que gracias a él o ella no había podido sentir los labios del cazador sobre los suyos una vez más.
El silencio en aquel auto era demasiado grande y cualquier intento de conversación entre ambos era casi imposible de realizar.
HoSeok llegó al instituto antes del tiempo estimado y luego de aparcar en el costado de la vereda volteó su vista hacia el joven de cabellos rojizos.

- Llegamos - habló soltando un pesado suspiro y liberando su cinturón el cual inmediatamente regresó a su lugar.

- Gracias por esto y por todo - dijo TaeHyung observando por la ventanilla del auto como tres jóvenes observaban y esperaban ansiosos la aparición de alguien; y ese "alguien" era él.

- No fue nada - respondió HoSeok acercando su mano hasta el lugar donde el cinturón del copiloto se hallaba ajustado y rozando suavemente la mano de TaeHyung lo soltó - ya debes irte, es evidente que están esperando por tí - agregó con un leve movimiento de su cabeza indicando la presencia de los tres jóvenes que aún esperaban.

TaeHyung acercó su mano a la manecilla de la puerta del auto sin despegar sus ojos del rostro del cazador, el cual lo observaba con una expresión que él no lograba descifrar.
Entonces regalándole una sonrisa se bajó del vehículo sintiendo la brisa suave golpear delicadamente sobre su rostro y a los tres jóvenes acercarse rápidamente a él.

Las expresiones de sus amigos se transformaron al descubrir quién era el conductor de aquel auto.

- Por favor no le permitan salir en la lluvia nuevamente - habló HoSeok desde el asiento del conductor - y si lo hacen, asegúrense de que lleve consigo un paraguas - añadió antes de cerrar la puerta y arrancar el auto para luego marcharse.

TaeHyung observaba con temor las caras de sus tres amigos, los cuales realmente se sentían preocupados y disgustados por aquella escena. Aunque el más afectado parecía ser el mayor de los tres.

- Tú y yo hablaremos adentro - espetó Kim SeokJin dándose vuelta y caminando hacia el interior del instituto en clara señal de enojo.

Cacería De Brujas [HopeV] ✧\(>o<)ノ✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora