Cacería De Brujas [HopeV] ✧\(>o<)ﾉ✧

3🔮

TaeHyung observó aquella flor violácea por más de media hora mientras intentaba en vano descifrar el actuar de aquel humano. Nadie jamás le había dado una flor. Ni siquiera su propia madre.

Se sorprendió cuando alguien se la arrebató de sus blancas manos y quiso enojarse, pero cambió de pensamiento cuando descubrió con sus ojos de quién se trataba.

- Es bonita - dijo acercando la flor hasta su nariz para sentir su aroma.

- Lo sé - respondió estirando la mano hacia el contrario para que le devolviera la flor.

- No debiste aceptarla - se escuchó la voz del pálido tras el mayor.

- ¿Tú crees? - preguntó al pálido de cabellos negros.

- Claro que lo creo - contestó sentándose a su lado siendo severamente reprendido por la mirada del mayor - ¿Sabes tú acaso quién fue el que te entregó esa dichosa flor? - preguntó mirando a los ojos del más joven.

- Yoongi tranquilo, lo asustaras - recriminó el mayor devolviendole la flor al joven pelirrojo.

- Tranquilo Jin Hyung - lo calmó el menor tomando la delicada flor en sus manos - quisiera saber quién es el dueño de la flor - habló guiando su mirada hacia el pálido.

Yoongi se acomodó en su lugar como si las palabras que fuesen a salir de su boca pesaran el doble de lo que deberían.

- Su nombre es Jung HoSeok - clamó observando como el mayor de los tres sufría un escalofrío.

- Jung HoSeok - murmuró él menor con cierta curiosidad.

Ahora que sabía su nombre, la curiosidad dentro suyo lo carcomía, quería saber más cosas acerca de aquel humano.
Quería conocerlo más a fondo; aunque fuese prohibido debido a que él era un brujo y aquel un simple humano.
Entonces como un balde de agua helada, las palabras del pálido llegaron a sus oídos.

- Él, es el mejor cazador de brujas de todos los tiempos - añadió a lo dicho anteriormente - y es el más peligroso en este pueblo - concluyó observando un punto fijo.

Aquellas palabras rasgaron su corazón. Dolía y no comprendía porque.
Era un cazador. O mejor dicho.
Era "el cazador".
Aquel de quién tanto lo protegía su madre.
Aquel del cual su madre había huido toda la vida, porque estaba obsesionado con asesinarla.
Aquel que había matado a más de unas de sus hermanas y a más de un hermano, con tal de mantener a salvo el pueblo.
Era aquel que odiaba a las brujas y brujos.

Y era el mismo que le había regalado aquella bella flor.

- Ya Yoongi - la voz del mayor siempre lo tranquilizaba - no debemos asustarlo tanto - continuó regalándole una sonrisa al menor - de seguro que la señora Kim ya se habrá encargado de eso desde que TaeTae era un bebé - repuso acertando cada una de sus palabras.

- Realmente lo hizo - suspiró TaeHyung observando nuevamente la flor - pero no pensé que ese cazador de vería así - aseguró observando a sus dos amigos.

- ¿Así cómo? - preguntaron ambos jóvenes al unísono.

- Tan... - su voz salía dudosa y se le formaba un nudo en la garganta de tan solo pensar en aquel hombre nuevamente.

- Tan qué... - lo alentó a seguir SeokJin posando una mano sobre su hombro.

- Nada, olvidenlo - repuso intentando no sonrojarse - ¿Qué les parece si caminamos por el pueblo? - invitó levantándose de su lugar seguido por el de cabellos negros.

- Me parece una gran idea - acotó acercándose al mayor - ¿Les parece que vayamos al cementerio? - preguntó con una sonrisa ladina - hay algunos nuevos hechizos que quiero probar y me parece el lugar ideal - añadió frotando sus manos.

- ¿Al cementerio? - preguntó con desgano el mayor mientras comenzaban a caminar - ¿Podemos llevarnos aunque sea uno de esos jóvenes inquietos? - sugirió mientras un brillo de malicia se instalaba en sus ojos.

- Nada de niños - la voz del pálido se tornó tan sombría que sorprendió a los dos jóvenes - sabés cómo son mis reglas Hyung - le recordó al mayor - nada de lastimar niños en mí presencia - acotó parándose en seco haciendo que los dos voltearon a verlo.

- Descuida - habló el menor para intentar tranquilizarlo - no llevaremos a ningún niño - continuó regalándole una sonrisa sincera - Jin Hyung solo bromeaba.

- Por supuesto que bromeaba - acotó el mayor acercándose al pálido y recostando sus manos sobre los hombros de éste - tu sabes que yo tampoco lastimo niños - le recordó mientras giraba solo un poco su rostro para sacarle así una sonrisa al contrario; que parecía ligeramente enojado.

Caminaron los tres a la par mientras se hacían bromas entre ellos y conversaban acerca de la tan esperada Luna de Sangre.
Sería de la primera Luna Roja que serían participantes, ya que la última que la Tierra había presenciado había sido cien años antes de sus nacimientos. Y pos supuesto había sido interrumpida por los malditos cazadores de brujas.
Los cuales les habían impedido a sus ancestros el alcanzar la inmortalidad.

Durante sus infancias habían escuchado tantas historias perturbadoras acerca de como los cazadores mataban, torturaban y aniquiliban a sus ancestros que el echo de encontrarse con algún cazador de brujas les causaba temor o en ciertos casos el deseo innegable de matarlo, para así vengar a sus hermanos y hermanas.

Pero para el joven TaeHyung aquel pensamiento no era tan importante. Él había escuchado aquellas historias por parte de su madre desde muy pequeño y solo le daban más curiosidad acerca del porque los cazadores las querían muertas.
Y sobre todo sentía la necesidad de encontrarse con un cazador frente a frente para asimilar su actitud en aquella situación.

Aunque si debía ser completamente sincero no creyó posible el sentirse tan bien frente a un cazador.
Ni se había percatado en que aquel hombre o joven hubiese sido un cazador, si su Hyung Yoongi, no se lo hubiese dicho.
Hasta podía asegurar que sintió un extraño sentimiento de calidez en todo su ser al recibir aquello flor de parte de aquel joven. Le había gustado.
Le había agradado el que se haya disculpado entregándole una flor.

Al llegar a la puerta del cementerio el aire comenzó a escasear en sus pulmones. Allí estaba de nuevo.
Luciendo su bello traje negro, con un pantalón del mismo color; el cual lo hacía lucir aún más misterioso.
Se encontraba sentado frente a una olvidada lápida al parecer y apoyaba una mano sobre ella.

- Observalo Jin Hyung - repuso el pálido en tono burlón mientras golpeaba cuidadosamente al mayor con el codo - realmente cree que la persona que descansa allí lo escucha.

- Los humanos suelen ser tan tontos que hasta me dan pena - habló el mayor con una de sus típicas risas - mira que yo me pararía a hablarle a un pedazo de roca vieja - añadió haciendo que su risa fuese más evidente.

- Yo no creo que eso sea tonto - aclaró el menor observando aquella escena - es más lo encuentro fascinante - continuó sin despegar su mirada de la figura frente a la lápida.

- A veces me preguntó cómo es que naciste brujo - habló el pálido rascandose la cabeza con su mano izquierda - te atraen demasiado las pequeñeces de los humanos - concluyó abriéndose paso hacía las tumbas.

- Ya déjalo tranquilo Yoongi - reclamó el mayor siguiéndolo - te recuerdo que tú también eras así de pequeño - le recriminó apuntándole con el dedo.

- Exacto “era” - dijo el de cabellos negros mientras observaba al menor - pero ya se me pasó el interés por saber cómo son - concluyó.

- Interesante - se dijo a si mismo TaeHyung mientras observaba como el joven parecía tener una conversación fluida con aquella lápida.

Y nuevamente ese sentimiento raro en su corazón que le hacía anhelar el ser un poco más humano.