-¿Traer a la Sannin Tsunade? -cuestioné, estando en la puerta de la Aldea con Naruto.
-Sí, la traeré y ayudará a Rock Lee a que se recupere, ya verás. Dattebayo.
-Hm... supongo que está bien... ve con cuidado, rubio -lo abracé-. Adiós, Jiraiya.
-Adiós jovencita, cuiden de la aldea mientras nosotros nos vamos.
Ellos comienzan a caminar, alejándose de la Aldea a cada paso. Decidí ir caminando por la Aldea y vi la torre del Hokage. Me abracé a mí misma al recordar al abuelo y que ya no estaría allí.
-______ -miré al costado encontrando a Hinata.
-Oh, Hinata... hola -sonreí.
-H..Hola... ¿Estás bien?
-Sí... creo... ¿Y tú? -asiente- ¿Quieres caminar conmigo un rato y hablar?
-Claro -me sonríe.
Ambas seguimos con nuestro camino hablando de cualquier tema hasta que comenzamos a hablar de su amor por Naruto.
-¡______! -se cubre el rostro completamente sonrojada, mientras que yo me comencé a reír.
-Deberías tomar la iniciativa y hablarle más a menudo -comenté.
-N..No sé si pueda...
-Si no tienes confianza entonces no, pero para eso estoy yo. Cuando Naruto venga no te atrevas a escapar.
Se puso aún más nerviosa y más roja.
-O..Oye.. ______-chan.. ¿A..A t..ti no te g..gusta alguien?
Me sorprendí por la pregunta y sin siquiera darme tiempo a procesarlo comencé a sonrojarme y a pensar de inmediato en aquel mapache pelirrojo.
-N..No sé... no lo creo -respondí mirando para otro lado.
-¿Hm? No te hagas... te pusiste roja -sonríe.
-¿Así como tú cuando te hablan de Naruto o piensas en él? -hice que se ponga más roja y comencé a reír por mi venganza-. Sinceramente no estoy segura... debería esperar un poco para ver como suceden las cosas con él.
-¿Con quien?
-Pues... no te lo diré, pero solo voy a mencionar que parece un mapache -respondí riendo levemente.
-¿Mapache? -pregunta confundida y yo asentí.
-Es un mapache problemático, pero al fin del cabo es mi amigo.
Ambas nos encontramos con Tenten, Ino y Sakura en la zona de entrenamiento. Ellas nos invitaron a entrenar juntas y no pudimos negarnos a hacerlo.
***
***
Los días desde que Tsunade vino junto a Naruto y Jiraiya fueron pasando. Naruto me relató lo sucedido sobre el enfrentamiento con Orochimaru cuando fueron a buscarla...
-¿Crees que podrá ayudar a Lee? -le pregunté a Naruto.
-Yo sí lo creo. Dattebayo -me sonríe para tranquilizarme.
Suspiré y me quedé esperando mientras la nueva Hokage hacía lo que podía para ayudar a Lee. Mi pierna comenzó a moverse de arriba a abajo por los nervios pero me detuve y pensé en otra cosa para distraerme. Mi mano fue a la botellita del collar y comencé a mirar la flor de Gaara.
Cuando la nueva Hokage sale de la habitación y avisa que la operación fue un éxito, un sentimiento de alivio traspasó mi cuerpo por completo haciéndome suspirar y abrazar a Hinata que la tenía al otro lado y luego miré a Naruto.
-Tenías razón, Naruto -mencioné sonriéndo y él a mí.
Para celebrar, fuimos a comer a Ichiraku, hasta que se hizo de noche y todos tuvimos que irnos a nuestras casas para descansar, pero Naruto me acompañó a la mía.
-Gracias por acompañarme, rubio, nos vemos mañana.
-Nos vemos ______-chan.
Él se aleja y yo entré en casa, cerrando la puerta tras de mí, me aparté de esta bostezando y estirándome cansada. Pasé por la cocina pero me detuve en seco al estar allí. Levanté una mano haciendo un escudo de cristal para evitar el kunai que se dirigió a mí de manera repentina.
-Tienes buenos reflejos -me di la vuelta estirándo mi pierna para patearlo pero me agarra del tobillo y luego del cuello de la remera que traía. Formé una cuchilla en mi mano y se la puse en el cuello.
-¿Quién eres? -cuestioné.
Él sonríe y me suelta, mete sus manos en su bolsa y saca dos kunais para tirármelos, me cubrí con mi cristal pero sentí un golpe en mi espalda haciendo que rompa el cristal y caiga al suelo, me hice a un lado cuando el ninja saltó hacia mí y luego golpeé sus piernas.
Golpeé de igual forma su rostro pero me agarra del cuello dejándome contra el suelo ahogándome y golpea mi rostro. Escupí sangre y formé una aguja de cristal para clavársela en el brazo y cuando me soltó lo golpeé en el pecho y luego lo pateé en el estómago. Me levanté y alcé mis brazos para crear cristal alrededor de su cuerpo dejando su cabeza libre para que pueda hablar pero antes de encerrarlo por completo me lanza un kunai que me dió en el costado derecho profundamente.
-¡Agh!
Me quité el kunai agarrándo mi costado y apoyándome en la pared.
-Es sorprendente, una niña pudo atraparme...
-Debe de ser muy humillante para ti ¿no? -me reí y él hizo una mueca.
El dolor de mi costado se hizo más fuerte por lo que me deslicé por la pared hasta el suelo. Levanté mi brazo hacia la ventana y disparé una bala de cristal. Suspiré para calmarme. Miré por la ventana y solo esperaba que la bala haya llegado hasta alguien...
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MI FLOR DE ARENA || Sabaku No Gaara y tú ||
FanfictionDesde pequeños ella amaba jugar con el niño pelirrojo al que todos temían en Sunagakure. Pero ella no, ya que lo consideraba su amigo o tal vez, en unos años, algo más... Pero todo se complica cuando su madre dice que deberán dejar Suna para ir a la...