Mi cuerpo dolía de todos lados que no sabía donde comenzaba y donde terminaba pero no me malentiendan, dolía de una buena manera. Por suerte las paredes eran lo bastante gruesas porque no sabía cuanto ruido habíamos hecho en la noche al entrar, tenía una resaca de los mil demonios pero después de una ducha con mi Dios Ruso eso ayudó bastante, bueno, por no decir que lo de anoche también.
Bajamos a desayunar con los demás y nadie preguntó nada ni mencionó algo al respecto lo que significaba que no se habían dado cuenta de nuestra pequeña fuga o eso quería pensar hasta que Lissa habló.
-¿Si subiste después de que regresamos? No te oí pasar-la pregunta era inofensiva en si y ella al parecer no tenía segundas intenciones por lo que fue fácil mentirle al respecto.
-Si, seguramente ya estabas dormida-respondí tratando de parecer lo más natural posible con las miradas escrutadoras de los demás ante la pregunta de la rubia mientras Dimitri me pasaba por debajo de la mesa una pastilla para el dolor de cabeza, al parecer por su aspecto el se encontraba mejor que yo que quería golpear al primero que hablase.
-¿Quién fue la última en subir?-preguntó Abe alertándome por lo que se venía.
-Yo ¿Algún problema?-no andaba con ánimos de hablar.
-¿Se llevaron el auto?-ignoró mi comentario y maldije internamente al ver que sospechaba.
-No-contestó Liss frunciendo el ceño-Caminamos-
-Las llaves del auto estaban tiradas en las escaleras y la copia que te di estaban cerca de la puerta- dijo mirándome desconfiadamente y claramente tenía sus razones.
-Debieron de caérseme-traté de sonar indiferente.-Lo de las llaves del auto no puedo decirte algo al respecto porque no tengo nada que ver-
Se oyó un ruido gracioso como de una risa contenida. Era Adrian. Al ser usuario del espíritu podía leer las auras lo que le permitía saber si estaba mintiendo o no, también cabe recordar que las auras tienen un color en especial cuando acabas de tener sexo. En resumen, estábamos jodidos.
-¿Qué es lo gracioso?-preguntó Abe casi gruñéndole lo que hizo que palidecer.
-Nada nada-contestó rápidamente.
-¡Oh vamos! ¿No planeas decirlo?-se burló Christian-Y sobre ti Rose, para mi que eso de las llaves es muy sospechoso. ¿No será que te escapaste en medio de la noche?-
Lo fulminé con la mirada. -Sparky, porque no mejor te metes en tus asuntos y cierras tu boca de m...-
Dimitri carraspeó haciendo que dirigiera mi mirada asesina a él pero parecía no tener el mismo efecto.
-¿Lo estás disfrutando no es así?- le dije enojada.
El solo sonrió antes comer lo último de sus waffles.
-¿Disfrutar qué?-dijo Eddie confundido.
-Hicimos una apuesta-sacudí la cabeza.
-Tu nunca pierdes una apuesta-me dijo Lissa riendo.
-Ya no me digas-me lamenté.
-¿Cuál era la apuesta?-preguntó curiosa Jill.
-Una especie de... reto-me rasqué la nuca nerviosa no queriendo dar detalles por obvias razones-Si yo ganaba él no usaba su gabardina por lo que restan de las vacaciones y si perdía no puedo decir ningún improperio por el mismo tiempo-
Todos estallaron en carcajadas, los miré incrédula y algo irritada ya que no ayudaba mucho la resaca.
-¿Qué es lo gracioso?-repetí la pregunta de mi padre.
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Linaje restaurado
FanfictionLa historia estaba en mi anterior cuenta pero la perdí y no la pude recuperar, era vale45679. Después de Vampire Academy y Bloodlines. Todos se ponen de acuerdo para pasar las vacaciones de inverno en Rusia. Habrá mucho de que hablar ya que han pasa...