Mi castigo (Final)

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Damiana

He despertado en la enfermería y la enfermera tras explicarme todo a detalle quise desmayar me de nuevo y soñar que no era cierto.

Salgo de la enfermería en silencio, con uno y mil pensamientos.
Una lagrima baja por mi mejilla, podría estar feliz como muchas mujeres lo suelen estar al enterarse lo demi estado, pero yo ¿Qué puedo hacer sola? No sabré ni como reaccionará Aren ante esto, me siento confusa, camino por los pasillos.

Esquivo algunas personas y me dirijo a mi casillero a guardar la ropa de física, presiono la pantalla y enseguida marco la clave, abro la puerta pequeña del casillero y meto mis libros que ya no ocuparé.

Siento unas manos tapar mis ojos. Me llega el olor a su perfume y su calor corporal.

Cierro el casillero y me giro quitando sus manos, sonríe y me abraza.
Mi corazón puedo sentirlo latir algo más rápido, un hueco en mi estomago y un nudo en mi garganta.

-Aren - digo apartándo me de él.
-Dime
-¿A que edad te gustaría tener un hijo?
Se queda en silencio y luego sonríe.
-A cualquier edad mientras sea contigo, amor - responde tomando mi rostro y mirándome.
Me acerco a abrazarlo y puedo sentir mis lagrimas bajar por mis mejillas enseguida.

-¿Quieres tener uno ya? - pregunto.
-¿Lo vamos a tener o hacer? - su pregunta me hace reír un poco.
-¿Que harías si te digo que tenemos?
-No lo se, creo que haría esto - dice, se aleja y empieza a caminar alejándose de mí y luego regresa a plantar sus labios contra los míos.
-Se que vamos a tener un hijo, la enfermera me lo dijo - aclara, lo veo seria y niego.
-Así me hiciste hacer ese pequeño show - sonríe y asiente.
-Quería saber si me lo dirías hoy o cuando desearás - toma mi cara y me queda observando, desliza sus dedos por mis dos mejillas quintando el rastro de las lagrimas.
-Pues no te lo iba a decir, solo tomaría mis cosas y me iba a perder entre el bosque más profundo para que nadie me encontrara - respondo.
-Oh, eso hubiera estado muy mal.
-¿Porqué?
-Porque hubiera mandado un ejército completo a buscarte hasta por debajo de las piedras - sonrío y niego.
-De hecho no sabría que hacer, si no querías verme después que te lo dijera me hubiera ido posiblemente para donde mis padres o no se ya dije.
-Bueno, por mi podríamos tener un hijo cada año - lo veo seria y niego.
-¡¿Estás loco?!
-Quizás, pero debo decir que tú me pusiste loco
-¿Yo?
-Si
-Es demasiado arriesgada esa acusación
-¿Entonces lo podemos hacer sin...

-Damiana ya estás bien? -escucho la voz de Náyade acercándose, esta alverme quita a Aren de mi lado y me abraza.
-Creí verte colgando los zapatos - me dice bromeando.
-Fue solo un desmayo por no comer bien en la mañana.
-Bueno debes comer más de hoy en adelante.

***

Entramos a casa y es solo silencio. No hay nadie cerca al parecer.
Todos deben estar haciendo oficio.

Tiro mi bolso en el sillón y me siento enseguida, Aren me observa divertido.

-¿Qué te divierte? - se hecha a reír.
-Nada, iré a la cocina a comer algo - responde.

Lo veo dirigirse a la cocina y desaparecer por la puerta.
Tiene una cara bastante de bastante feliz, escucho la puerta principal abrir y enseguida dos voces se hacen presente, a los segundos veo a Keane y Azriel, ambos vienen serios, sin embargo Azriel se acerca y sonríe tímidamente.

-¿Ya estas mejor? - pregunta.
-Si, gracias por preguntar - asiente.
-¿Dónde está mi hermano?
-En la cocina - sin decir nada ambos de dirigen hacia ahí.

Tomo mi bolso y empiezo andar hacia las escaleras.
Poco a poco subo y enseguida voy hacia la habitación.
He vivido aquí bastante tiempo y nunca me he tomado el tiempo en conocer toda la casa.

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⏰ Última actualización: Jul 29 ⏰

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El castigo de Damiana👑✅(Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora