El castigo de Damiana👑✅(Terminada)

Esto es guerra 24

AREN
Tres días después

Escucho la voz de Azriel lejana al otro lado de la linea. Keane, Alice y Arnold me odservan esperando a que les diga lo que sucede, sin embargo dejo todo atrás, sin importar que este en medio de una maldita reunión, salgo tan rápido como mis pies me lo permiten.

Me encuentro sumamente furioso, enojado, preocupado y desesperado.

Veo a mi alrededor la calle vacía, sin importar nada me convierto en lo que soy.
Busco el rumbo a las enormes montañas, cruzo la cerca de alambres eléctricos y sigo mi camino.

Solo corro sin dirección alguna, me detengo y empiezo aullar.

Sigo corriendo. De varias direcciones escucho otros aullidos.

Cruzo un puente y me dirijo a las altas montañas de Suecia.
El viento sopla fuerte con un poco de frío, muy pronto vendrá el invierno y nevara, eso haría todo más complicado si no la encuentro pronto.

Juro matar a quien se la haya llevado, todos de alguna manera no aceptaban a Damiana, alguien fue por ella mientras yo no estaba, pensé que dejandola con sus padres nadie le haría daño y ahora me doy cuenta que sin mi a mi lado jamas estará segura, jamas debí dejarla sola para ir a esas estúpidas asambleas que no sirven para nada, más solo para perder el tiempo.

Que se hayan metido con ella solo significa que me han declaro la guerra absoluta.

La temperatura es más cruda mientras subo cada vez más las montañas, el viento sopla fuerte y hace más frío.

La tarde esta cayendo poco a poco, mientras sigo subiendo, vuelvo a ullar para que sepan donde voy.

Al llegar a la cima puedo ver todo a mi alrededor, escucho los aullidos de mi manada cada vez más cerca.

Vuelvo a ullar una y otra vez.

Al cabo de quince minutos tengo a toda mi manada mirándome y a los ¿amigos de Dam?

-Han roto mi primera regla, de las cinco que impuse y eso no se los perdonaré jamás aquel que la haya rompido - empiezo hablar - Todos la saben y es que nadie le pusiera una mano encima a mi esposa o yo mismo declararía la guerra contra quien lo hiciera y hoy digo que el que se interponga en mi camino yo no tendré piedad ni dudaré en hacerlo pedazos, la buscaré hasta debajo de las piedras si es posible.

***

La hemos buscado por días y no hay rastros de ella ni quien pudo ser.
Los días se vuelven más fríos y las manadas jóvenes siguen peleando contra las más mayores, todas las reglas están rompiéndose.
La universal es la primera que se ha roto y era no luchar contra nosotros mismos, pero ya es historia pasada esa regla alparacer.

-Hay muchas manadas que se han movido de un lugar a otro y por eso no damos con quien se la llevó -La voz de Quinn entrando a la sala hace sacarme de mis pensamientos.

Veo a Azriel y a Quinn llegar juntos y detenerse enfrente de mí.
-Todo los rastros van hacia el norte, aunque con el frío que hace ahí dudamos mucho que puedan aguantar las manadas y pensamos que entre esas que se han movido una de ellas llevan a Damiana, aunque no logramos encontrar su aroma ya que con ellas llevan a una hechicera o un guardián que hace muy bien algún tipo de campo invisible para que no podamos detectarles - explica Quinn -Tal vez hubiéramos podido encontrar un rastro, pero sin Neron o Náyade cerca no pudimos, ellos son los únicos que pueden saber si es un guardián el que hace que no haya pistas.