"Él es un exitoso hombre, no ha pasado hambre y nunca ha sabido lo que significa verdaderamente la palabra necesidad, viste con trajes elegantes y maneja un auto que vale más que mi departamento. Somos totalmente distintos."
"Y yo sólo soy un simpl...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Dejé ir un suspiro fuerte mientras veía a Hoseok perder las fuerzas de sus brazos y se dejaba caer cuidadosamente sobre mi cuerpo. Acaricié su espalda desnuda y le di un beso en su mejilla.
—Ahora te limpio —dijo con la respiración aún agitada sacando su miembro de mi cuerpo y quitándose el condón para amarrarlo y llevar a tirar al baño.
Me di la vuelta y me recosté boca arriba con una sonrisa cansada, Hoseok en definitiva se ha puesto más cariñoso desde que nos comprometimos.
Miré mi anillo, aún no podía creer en que momento pasé de trabajar en un hotel a estar comprometido con nadie más que Jung Hoseok. No me quité el otro anillo porque le tenía un enorme cariño, así que estaba debajo del otro.
—De acuerdo, ven, precioso —sentí sus manos girarme para poder cargarme pasando sus brazos por debajo del pliego de mis rodillas, me aferré a su cuello y nos reímos juntos.
Me llevó al baño, la tina ya estaba lista para ambos, así que me depositó allí con cuidado de que no me rebalsara. Me acomodé para que él pudiera entrar conmigo. Apenas se metió pasé mis piernas a los costados de sus caderas para estar más cerca.
Me abrazó desde esa posición y me regaló un beso dulce.
—¿Jimin llega a las siete? —me preguntó tomando algo del agua para empezar a limpiar mis hombros y brazos con algo de jabón igualmente. Yo hice lo mismo con su pecho.
—Sip —me reí bajito cuando vi las marcas que le había dejado en su cuello. Era una fortuna que siempre usara traje en su trabajo, no quisiera que nadie viera eso.—Dijo que la cita era a las ocho y media, pero quería aprovechar para ver unas cosas más cerca —como era de esperarse, él se ofreció para ayudarme a organizar mi boda.
Y se lo tomaba en serio, supe que incluso le pidió a su asistente organizar su agenda y dejarme días libres para que pudiera llevarme de compras.
—Entonces debemos darnos prisa, después debemos recoger a Kookie de casa de Yugyeom, ¿no? —asentí.
Me vestí con ropa cómoda, hoy era la prueba de mi traje junto a Hoseok, y conociendo a Jimin, me haría probar un montón de trajes así que debía estar cómodo.
—¿Listos? Vi unos trajes preciosos para ambos y ya quiero verlos en ustedes —Jimin tenía a Yoongi tomado de la mano por lo que lo arrastró cuando entró de forma apresurada a la casa. Hoseok los imitó y me tomó de la mano.
—Siento que será una noche larga —Jimin sonrió con maldad. Y yo suspiré con una sonrisa.
—Ya deberías saberlo —aunque confiaba en las habilidades de Jimin en la ropa, como modelo comencé a tomarle un poco de importancia a como me veía y ya sabía que cosas me favorecían.
