Capítulo 35

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*Narra Cindy*

Corro con todas mis fuerzas intentando esquivar los disparos. Solo veo a Daryl. Mis respiraciones aumentan y siento que el corazón se me va a salir del pecho.

-¡Daryl!-grito sin aire.

-¡Cindy! Joder vete de aquí-me responde asustado.

Llego a dónde está y le desabrocho las cuerdas. Éste me abraza con fuerza.

-Te quiero Daryl-susurro entre lágrimas-siempre te he querido.

Y me besa. Es un beso corto, pero necesario. Me agarra del brazo y tira de mí.

-Vamos. Te acompaño a dentro del pabellón. No es un lugar seguro.

-¿Qué?-pregunto molesta- No. Yo quiero luchar.

Empiezo a correr hacia donde está Sergey y tiro de Daryl. Éste refunfuña y empieza a hablar enfadado, pero no le escucho.

*Narra Sergey*

Llego al cuerpo de Hershell. Lo primero que hago es darle la vuelta para ver si la bala ha salido. No ha salido. Está dentro. Eso es lo peor que podía pasar. No me lo pienso y cargo con él como puedo. Camino dando tumbos portando el cuerpo de mi maestro.

-Bájame Sergey, no puedes cargar conmigo mucho rato y lo sabes-sentencia Hershell entre jadeos.

Es cierto. No creo que aguante mucho su peso. Si voy a este ritmo tan lento seré un blanco fácil para el enemigo. Visualizo un coche semivolcado y deposito a Hershell apoyado contra la puerta.

-Te vas a poner bien-susurro entre lágrimas. Abro su camisa y observo la herida. La sangre mana muy rápidamente y no sé qué voy a hacer. Me rasgo ambas mangas de mi camisa e improviso un paño. Tapono la herida como puedo, ejerciendo presión.

-No. Yo sé que no-responde ahogado- Necesito que hagas algo por mí, Sergey.

Empiezo a negar con la cabeza rápidamente. No va a morir.

-No. No vas a morir-repito. Sigue brotando mucha sangre y me desespero-¡Joder!-bramo entre lágrimas-¡Deja de salir! ¡Deja de salir!-grito desesperado. Aumento la presión. El paño ya está empapado por la sangre de Hershell-¡Te vas a quedar conmigo Hershell! ¡Te vas a quedar conmigo! ¡Te necesito!

-Escúchame-dice pausadamente- Te he enseñado muchas cosas. Ahora tú vas a ocupar mi lugar. Eres un chico estupendo-yo empiezo a negar rápidamente sin poder decir nada, pero Hershell prosigue- sé que vas a cuidar muy bien de todos. Sé que vas a cuidar muy bien de mi pequeña Beth. Ahora tú vas a ser yo.

-Hershell-le tomo de la mano. Éste empieza a toser y le sale sangre por la boca. Sus respiraciones se entrecortan y, tras sonreírme efímeramente, expira.

-No-acerco su cara a mi hombro-¡No!-Miro a Beth. Está apoyada en la verja. Me mira con sus ojos azules muy enrojecidos y llenos de lágrimas. Glenn está sujetándola para que no salga y corra peligro. Niego con la cabeza mirándola a los ojos y ella lo entiende. Empieza a gritar y patalear hasta que cae al suelo y se hace un ovillo tembloroso. Y yo estoy ahí. Tirado. Solo. Sujetando el cuerpo sin vida de mi maestro. Y contemplando cómo su hija y la chica a la que quiero se derrumba. Qué injusta es la vida y qué fácil te la pueden arrebatar.

Noto una presión en mi hombro.

-Tenemos que irnos Sergey-es la voz de Cindy. Me giro con lágrimas en los ojos. Ella está con cara descompuesta y Daryl está a su lado.

-Se ha ido. Se ha ido-respondo.

Cindy no dice nada. Simplemente se agacha a mi altura y me abraza. Y yo empiezo a llorar como un crío pequeño. Ella me abraza con más fuerza. Y yo solo quiero hacerme más pequeño. Esto me viene grande.

TWD: A NEW HOPE IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora