Capítulo 9

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《Tienes que aceptarlo》



Cerro sus ojos mientras apoyaba su cabeza contra la cabaña. De tan solo recodar lo que esa estúpida mujer dijo de él hacia que su sangre hirviera de enojo y también quería golpear a McGarrett por permitirle hablar de esa manera de él.

— Mi hermano suele ser un completo idiota a veces, pero no hay manera de estar mucho tiempo enojado con él.

Una voz femenina se escucho por el lugar. Alarmado se puso en posición de ataque, puños en alto y piernas levemente flexionadas, uno de sus puños cubriendo su rostro y el otro listo para dar un golpe de ser necesario.

Una figura femenina apareció frente a él, justo entre los arbustos.

— ¿Conoces a Steve? — Pregunto desconfiado y era una pregunta estúpida teniendo en cuenta que dijo que era su hermano. Suspiro cuando la chica dejo escapar una risa —. ¿Qué es tan gracioso?

— La pregunta aquí es ¿Quién no lo conoce? — Respondió como si fuera lo más obvio del mundo —. Pero no del todo ¿No? Algunos lo conocemos más que otros y algunos menos, pero tu y yo tenemos la dicha de conocerlo perfectamente, como la palma de nuestra mano.

Se quedo en silencio observando a la mujer, tenía un vestido azul cielo, muy sencillo para la fiesta en la que estaban. Detallándola más a fondo logro encontrar rasgos físicos parecidos a los de Doris, pero también se parecía a Steve como en la postura y su rostro serio al momento de hablar.

— Eres Mary ¿Verdad?

— Y ese es el detective con el que salía mi hermano — La mujer le sonrió dándole la razón —. Un placer Detective Williams.

— ¿Qué haces aquí? — No iba a perder tiempo con formalizades, ya ambos sabían quien era el otro y hasta el momento no sabían si seria un placer conocerse —. Es decir, allí hay una gran fiesta y por lo que entiendo muchos morirían por estar allí adentro.

La mujer se apoyo contra la pared y se sentó en el suelo, segundos después le invito a que se sentara a su lado. Ambos se sentaron en el suelo, observando las luces de todos los colores y en todas las direcciones.

— Nunca fue mi estilo la verdad — Se cruzo de piernas rompiendo las reglas de etiqueta —. Nunca llegue a encajar allí adentro, me siento fuera de lugar como si fuera un fenómeno. De hecho, siempre que había este tipo fiestas me metía en este laberinto y lo recorría toda la noche.

Ahora tenía sentido, cuando se adentro en el camino y giro en la primera esquina que encontró, en cierto momento sintió que camino en círculos.

— Ya somos dos — Le dio la razón a la mujer —. Jamás llegue a entender la necesidad de aparentar cosas o tener que comportarse frente a muchos solo por tener dinero y lo peor, tener ese complejo de superioridad por tener demasiado dinero. Estúpidos ricos que se creen superiores y aún más estúpidos lo que lo permiten.

— No lo sé, pero siento un aire bastante personal en ese comentario ¿Fue por eso que te peleaste con mi hermano? — Miro a Danny con una sonrisa mientras levantaba sus cejas —. ¿El viejo matrimonio tiene problemas en el paraíso?

— ¿Viejo matrimonio?

— Kono, Chin y Malia dijeron que ustedes dos parecían eso — Levanto sus hombros inocente —. Y bueno, creo en su palabra plenamente. Además de las miles de veces que escuche a mi hermano quejarse de ti y sus estúpidas peleas me lo confirma.

— ¿Steve habla de mi contigo?

— Lo hizo unas cuantas veces. Sabes que él no es muy conversador como sabes, siempre gruñe a mitad de sus llamadas y susurra tu nombre. Aun no se si lo decía enojado o emocionando — Ambos rieron —. Entonces esta pelea ¿Fue como esas peleas sin sentido o esta esta justificada?

McDanno: Just for YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora