HERMOSA PESADILLA [YACCHAN ♡ TAMURA]

🧡 ME HACES CAER MUY RÁPIDO 💙

~ Te prometo que tú eres todo lo que veo...
Así que me puedes arrastrar por el infierno
si eso significa que puedo tomar tu mano ~

Al terminar la clase, Toono se acerca a él y caminan juntos durante un rato, sin atreverse a mencionar nada. Aun cuando Yaguchi ha estado tratando de evitar esa conversación, no tiene sentido seguir postergando algo que es inminente, solo tiene que dejar que todo empiece para que pueda terminar. Necesita quitarse ese peso de encima.

- Pregunta ahora mismo - suelta, a la vez que deja salir un pesado suspiro.

- ¿Por qué te fuiste con Tamura-senpai? - cuestiona el castaño con cierta seguridad que desencaja a Yaguchi. No parece el típico chico tímido que suele ser. Ese cambio repentino le fastidia, le hace creer que hay algo diferente en la forma en que lo mira, algo que le permite enfrentarlo de esa manera.

- Porque no supe cómo reaccionar en ese momento, todo era muy confuso.

- Y al final, ¿de qué hablaron?

- Me dijo esas cosas raras acerca de que le gusto... no lo sé, no me lo esperaba - se encoge de hombros, aparentando indiferencia, incluso incomodidad.

- ¿Y a ti te gusta también?

- Toono, mírame bien y dime si tú crees que podría gustarme alguien como él. Pero dímelo con toda honestidad.

- No, no lo creo - responde después de mucho rato. Le resulta imposible, y hasta risible, que los hermosos ojos de Yacchan puedan ver de esa manera al ojiazul.

- ¿Entonces por qué insistes en preguntar? Solo lo escuché por educación, nadie se merece que lastimen sus sentimientos, a pesar de que no puedan ser correspondidos - es exactamente lo que diría Yuu, palabra por palabra, incluso con esa entonación de piedad que llega a generar admiración.

- Entiendo. Por un momento pensé muchas cosas... además estabas llorando, fue muy extraño.

- ¿No te pareció que Shikatani-senpai se veía lamentable? Cualquiera habría llorado por eso.

- Eso quiere decir que Tamura-senpai en verdad pasó la noche con Shikatani-senpai. El presidente del club dijo que los encontró durmiendo juntos.

- Supongo que pudo haber sido cualquiera, los tipos como él no pueden ser tomados en serio - el simple hecho de que el nombre del ojiazul sea mencionado junto al del pelinegro en una situación tan sugerente le causa irritación. Disimula haciendo una mueca de arrogancia.

- Solo espero que funcione con Shikatani-senpai, de verdad pienso que harían una buena pareja.

- Toono, deja de pensar en eso. Es muy molesto.

- ¿Por qué lo dices?

- Olvídalo, no quiero volver a escuchar de esos dos.

- Toono-Kun, Yaguchi-chan, almorcemos todos juntos - Akemi aparece detrás de ellos y los dirige hasta una de las mesas del comedor, en donde ya se encuentran los demás chicos, incluido Tamura.

El cobrizo se siente avergonzado, pero no se le ocurre ningún pretexto para huir de ahí. Le lanza una rápido mirada a Toono, solo para comprobar que se encuentra en la misma situación. Observa al grupo, que está sentado a pocos metros, y distingue a su novio de inmediato; está riendo alegremente con el extraño chico de pelo rosa y, para variar, Shikatani se encuentra a su lado, demasiado cerca. ¿Acaso la herida en su labio no es un recordatorio claro de que no debería meterse con él?

- ¿Miren a quienes encontré en mi camino a la cafetería? - Akemi empuja la espalda de ambos y el grupo interrumpe su conversación.

"Incómodo", piensa Yacchan. "Maldito, Shikatani", agrega, mientras les regala la mejor sonrisa que tiene. Kashima le devuelve el saludo y se apodera de Toono en segundos, haciendo que se siente a su lado. El rubio se instala cómodamente en las piernas de Itome y Yacchan decide sentarse en el único espacio libre: al lado de Yuri. Este lo observa unos largos segundos, luego empieza a jugar con su cabello.