MLP FanFic - Manhattan's Fire (RariJack/FlutterDash)

19- Como que alguien no cuadra

La vaquera, salió del hospital un par de días después, y como si hubiera sido un castigo, llegó a su casa, directo al frigorífico, para abrazarlo, pues la comida de hospital, no era especialmente buena, y ya que quería pasarla bien, ordenó algo de sushi hasta la casa, esperando que apareciera Sunset, a quien ya consideraba parte de su vida, pero bastaron un par de minutos de su cotideaneidad, para entender que algo le estaba faltando.

Pese al ruido de Pinkie, y a su hermanita jugando con su teléfono en la misma sala, se sentía vacía, tal vez por eso también ordenó sushi, cuando tal vez lo que prefería era algo que llenara más.

La figura del teléfono que descansaba junto al ventanal, sin hacer ruido, era fuerte en los ojos de la rubia, pues, había personas con las cuales moría por hablar, pero... no quería llamarlas, "Rainbow estará entrenando ahora mismo, no debo molestarla" se repetía constante, estiraba su mano, para después correrla de vuelta a su muslo, para de nuevo, intentar alcanzar el teléfono... era algo lamentable ver su nerviosismo, y a su hermana empezaba a exasperarle...

— ¿Qué tienes hermana?
— Oye AppleBloom, ¿No vendrán hoy tus amigas?
— Pues, no lo creo... ayer salimos todo el día, así que...
— hmm... ya veo...
— Por cierto, Trend nos acompañó al cine el otro día, se veía algo, triste... ¿Tienes alguna idea al respecto?
— Quien sabe... Me parece un chico bastante extraño, pero, puede tener sus días también...
— Sip, pero es extraño que prefiera salir con nosotros, ¿No está para eso su novia? Porque... sigue siendo su novia ¿Verdad?
— Já... No por mucho...

Su horrible personalidad, salió con esa pregunta, el chico no le agradaba, y que su hermana le recordara, no le hacía sentir muy alegre, y lo que pudo haber logrado en esa cama, se desvanecía cada vez más, pese a toda su frialdad, la vaquera era una romántica, y sabía que las flores se marchitan si no las riegas lo suficiente, y si alguien más se encargase de ella, era cuestión de tiempo para que se la quitaran... Trender, tenía que irse...

La ambivalencia en su mente, empezaba a desaparecer, pues incluso si después debía cederle su lugar a RainbowDash, el primer paso era asegurarse que la preciosa diva, se desprendiera de ese gusto, y de ese chico...

Por su lado, la peli-morada, pasaba sus días en la boutique y el trabajo, sin cambio, reclinada en el mostrador de la preciosa tienda, con una mano en su mejilla, su vista reposaba en la puerta de cristal, como si esperara ver a alguien entrar por ella, Trender, estaba allí, sintiéndose tan excluido que su propia figura era incomoda a un lado de las perchas, pues poco tenía que conversar, su novia no hablaba mucho con él además del trabajo, que ahora se reducía a un limitado "Ya sabes... lo de siempre".

La energía de los sentimientos es fuerte y constante, y difícilmente desapercibida, el chico, sabía que algo andaba mal, y se acercó a su novia, para preguntar al respecto, claro, tenía temor de la respuesta, pues ahora hasta parecían desconocidos.

— Hoy... hoy está algo tranquilo en la boutique... ¿No crees linda?
— Pues, si... hoy no hay tantos clientes, dales una semana, y vendrán por las liquidaciones de temporada como un enjambre enojado...
— Jaja, ya lo creo que si... Y pues... ¿No quisieras hacer algo hoy?
— Oh, me encantaría cariño... pero le di la tarde libre a Sassy hoy, así que debo quedarme...
— Y, ¿no podría quedarse alguien en tu lugar? Coco podría quedarse a cargo, hoy no será un día concurrido, y pues... no hemos salido desde hace un tiempo...
— No lo sé Trend... ¿Qué tal mañana?
— Ah... está bien... ¡P-pues mañana será!

El chico, sonrió forzadamente, y dándole un beso en la mejilla se volvió por la puerta y salió del lugar, se hubiera quedado como de costumbre en la casa, pero, parecía no ser un lugar para estar...

Sweetie Belle entró por la misma puerta a la par de Trender, y con confusión regresó la vista a su hermana en el mostrador, donde se encontraba pasando la pantalla de su celular, mirándolo desinteresadamente.

"Se habrán peleado" pensó la pequeña, pues notó la triste expresión del chico al salir, pero instantáneamente lo olvidó, y pasó por un lado del mostrador, hacia la puerta trasera que daba a la casa, Rarity le siguió con la mirada, y notaba que esta llegaba apresurada, esto, claramente le llamó la atención, y dejó un momento la vacía tienda, para ver que tramaba la pequeña...

— ¿Sucede algo Sweetie?

La pequeña escuchaba desde su habitación la pregunta de su hermana, y desde allí resonó un golpe seco, que alertó a la hermana mayor a subir a donde se encontraba, al abrir la puerta, se notaba el lugar horriblemente desordenado, y una niña recogida en el suelo, sosteniéndose la rodilla "Así que de ahí vino el golpe" pensó la modista, y llevándose la mano a la cadera, arqueó una ceja mientras miraba a su hermana...

— ¿Y bien? ¿Por qué el alboroto?
— Ah... jeje... pues... invité a las chicas a venir y... voy a recoger un poco, para que se vea más ordenado...
— Pues... tienes bastante trabajo que hacer aquí- Dijiste que vendrán...
— Ah- si... las invité ¿No hay problema verdad?
— Y asumo que AppleJack vendrá para dejar a Applebloom ¿No es así?
— Pueees... supongo... Tal vez sí... ¿Por qué preguntas hermana? ¿Acaso te gusta?
— ¡Q-! ¡Claro que no! Era solo... curiosidad...
— Claaaro...

La diva tenía los colores en la cara, y una expresión entre nerviosa y enojada, se dio una marcada media vuelta, tiró con fuerza del portón y se fue del sitio haciendo sonar sus tacos, Sweetie retenía sus ganas de burlarse en su cara, y de inmediato tomó el teléfono para decirle a su amiga... "AppleBloom, ni se te ocurra venir sin AppleJack, ¿Entendido? Es hora de comprobar si nuestra teoría es cierta..."

Caía en la obviedad el hecho de que, entre esas dos, había cierta afinidad, pero, su trato tan diferido, mantenía la duda, pues pese a los griteríos y molestas quejas por parte de ambas, no se negaban nunca la una a la otra, y el tiempo que compartían ya daría paso a conocerse mucho.

El encuentro estaba destinado a las 6:30 en la casa de la modista, pero las niñas se toparon previamente en el parque central, AppleBloom que siempre mantenía esos aires de madurez frente a su hermana, saltaba por la emoción, pues cuando se trataba de hacer travesuras, esas tres eran una combinación peligrosa.

AppleJack, en su casa, se vestía para salir junto a su hermana, prestandole desde hace buen tiempo, más atención a los detalles de su ropa, pues la estancia con Rarity le había enseñado silenciosamente un par de cosas sobre como vestir.

Por su parte, Rarity, ya llevaba unas cuantas horas decidiendo que ponerse y preparando su ropa, pese a ser un encuentro de un par de minutos cuanto mucho, pues AppleJack no haría otra cosa más que dejar a su hermana en el sitio, y con ese pensamiento, no sabían que hacer exactamente, pues, las vestimentas, estaban bien, pero ¿No sería demasiado? ¿No se notaría en el esfuerzo y su inminente deseo de pasar más de un rato juntas?

Dieron las horas, y AppleJack salió junto con su hermana en el auto, hasta la entrada de la Boutique, al pasar por ahí, noto que solo estaba coco, en el mostrador, y no mas de dos personas... "Ah, claro... son finales de invierno" pensó, viendo la poca gente que pasaba, Entró con AppleBloom tomada del hombro, y preguntó por las demás...

— Deben estar adentro, aunque no se si Rarity está aquí, hace unas horas que me encargó la caja...
— Ya veo... Bueno... AppleBloom, Pásala bien con las chicas... iré a ver el baloncesto...
— ¿Qué? ¡No!
— ¿Hmm?
— Ah, digo... espera un rato, veré si están aquí... Ya conoces a Sweetie...
— Pues, bueno... esperaré...