Después de quedar estática al procesar que le trabajaría en algún momento a la DEA, Fran me condujo hacia la sala de reuniones, pues iba a comenzar a hablarme sobre muchas cosas más que la estructura del edificio... o casa.
Me senté junto a Fran, y frente a mí se sentaron los otros dos.
–Debo decir –comenzó Fran–, que para mí es muy satisfactorio tenerlos trabajando junto a mí, porque a pesar de que no soy mucho de trabajar en equipo, sé que con ustedes lograré sentirme bien y daremos mejores resultados. – Se tronó los dedos de las manos. – Todos aquí son nuevos y aunque todos ya nos conozcamos y sepamos cómo trabaja cada uno, estoy seguro que por lo menos sentirán la diferencia de trabajarle al FBI a trabajar conmigo. Y bueno, este es un trabajo de tiempo completo porque nos adentramos más al espionaje que otra cosa. Nosotros investigamos y vamos a la investigación. Nosotros somos la investigación. – sonrió como si le causara gracia lo que decía. – Entonces, quiero que tengan entendido que si los necesito a las tres de la mañana ustedes tienen que atenderme, porque de otra forma esto no serviría y me regresaría a trabajar solo. ¿Alguna duda?
Negué de inmediato y los chicos hicieron lo mismo.
–No le veo lo complicado. – dijo Zack.
–Bien, y tienen que saber que Zack se queda aquí o donde le indique, porque es el único de nosotros que no puede correr o hacer sobreesfuerzo en la pierna. Y espero que entiendan su situación.
–Claro. – dije de acuerdo y Zack me dedicó una sonrisa a medias. En ese momento, una duda llegó a mi cabeza, y sin pensarla del todo, pregunté. – Oigan, pero ¿no que Zack estaba de descanso del FBI? Pregunto esto porque si Leonard se entera de que Zack está trabajando en su tiempo de reposo, creo que tendrá problemas serios.
Zack se acomodó en su silla, como si quisiera relajarse.
–Sí, y qué bueno que preguntas. Fran ya tiene conocimiento de esto, pero Paul y tú no, así que seré breve. Leonard me hizo firmar mi retiro definitivo, así como a ustedes dos. – Hice una mueca involuntaria al sentir la acidez causada por lo que escuchaba. – Así que entregué mi placa del FBI, y después de un tiempo Fran lo supo.
–Y aquí lo ven. – agregó Fran. – Hay cosas que yo nunca entenderé de Leonard, pero quiero pensar que él sabe lo que hace. Y ahora nosotros cuatro somos los ex empleados de él.
Eso era totalmente cierto, pues todos habíamos tenido que firmar nuestra renuncia obligatoria por petición del mismo.
–¿Le dirás a Sarah lo de la DEA? – preguntó Paul.
Una vez más, esa palabra me hizo temblar de pura adrenalina.
–De hecho, ya le estuve hablando sobre el tema, y pues ahora lo haré con más detalle. – Fran se acomodó en su asiento y lo giró un poco para quedar frente a mí completamente. – Resulta que tengo un convenio con una amiga que trabaja en la DEA.
Zack soltó una risita irónica y Paul hizo como si se riera de algo. Yo clavé la vista en ambos sujetos al igual que Fran.
–¿Una amiga? – pregunté con la intención de generar cualquier reacción en los dos chicos, y sonrieron otra vez.
–¿Por qué se ríen así? –preguntó Fran como si estuviera ofendido.
–¿Qué tiene de malo tener amigas? –preguntó Zack aguantando reírse. – Todos tenemos amigas, ¿verdad, Paul?
–Claro, no tiene nada de malo. – dijo el otro y con la mirada retaba a Fran.
Mis ojos se clavaron en Fran, que parecía sudar.
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Mi Protegida
RomanceDespués de la apasionante historia de Evant y Arianna en "Mi Guardaespaldas" llega "Mi Protegida", historia que gira en torno a Sarah y Maslow y puede ser leída de manera independiente. Sarah, de 29 años descubre estar profundamente enamorada del ag...