Capítulo Veintidós.
Amenazas.
Mia Hobbs.
Un chico de cabello rubio y ojos rallados se baja de un auto blanco completamente blindando, pronunciando esa simple oración que hace brincar de mi corazón de pánico. Su voz es fría y cortante, es como una apuñalada en el corazón, esta llena de rencor y su mirada esta perdida en manera burlada.
— Deja a ella tranquila, — Alex, habla frío agarrándome del brazo colocándose delante de mi.
Ríe cínico, — Tranquilo, amigo, yo solo la quiero para un rato.
Alex intenta caminar furioso hacia él y lo sujeto del brazo, sus ojos conectan con los mios llenos de impotencia, — No lo hagas, solo te esta provocando.
— Has caso a la cachorrita bonita.
¿Cachorrita?
— Eres muy curiosa, cachorrita, así me gustas más.
Ahora lo entiendo todo, tengo en frente al chico que me estaba mandando anónimos desde hace tiempo. Sus ojos viajan por mi cuerpo y un escalofrío lo recorre, Alex gruñe molesto ante la intensa mirada.
La curiosidad invade mi cuerpo rápidamente y todo aquellos nervios brotan por mi cuerpo fuertemente, pensar que espere tanto por verlo y ahora que lo tengo solo no se que sentir, pero decir que me sorprende el hecho de que puedo preguntarle todas aquellas cosas que necesito saber y todas mis curiosidades.
Daxon, ese es el nombre del causante de todo esto.
— ¿Cómo entraste, Daxon?.
Vuelve a reír y luego vuelve a su porte serio, — Alex, crecimos juntos, ambos sabemos la técnicas de los dos, pero… — camina hacia a mi y Alex le impide el paso.
¿Crecieron juntos?
Acaso, ¿Hay algo que no sé?
— Ya te lo dije, no te quiero ver cerca de ella, — vuelve a repetir serio.
Lo mira serio parándose frente a él con un semblante rencoroso, — Deberías cuidarla mucho, porque hay otras personas que están interesados en ella.
— Tú, por ejemplo, lamento decirte que ella es mía y no necesitó que me digas lo que ya se, — responde de manera cortante y grosera.
Ríe, — Sí, yo estoy interesando en ella. — responde cínicamente, — y no voy a descansar hasta quitártela.
De manera rápida se sube en su auto y tres de ellos se van en cuestión de segundos, el se detiene y me mira determinadamente, — Cachorrita, — lo volteo a mirar, — Estas guapísima, pronto nos volveremos a ver.
— ¡Maldición, lo voy a matar!, — grita cabreado cuando ya se han ido completamente.
— Alex… calmate…
Este quita mi mano bruscamente mis ojos lo buscan curiosos al ver su acto, — Lo siento, ash… disculpa, princesa.
— No debes ponerte así, Alex, yo estoy contigo.
— Lo sé, lo sé.
Agarra mi rostro entre sus manos y da un beso casto nuevamente, — Tienes que aclararme muchas cosas ¿lo sabes?
Asiente, — Te amo.
— No me cambies el tema, McKay, — digo rodando los ojos.
— ¿No me amas?, — pone ojitos de corderito.
Asiento haciendo un puchero, — Te amo, pero debes contarme.
— esto es muy largo, — me da otro beso, — Es muy fastidioso ¿quiere saberlo igual?
— si, tengo todo el tiempo.
Post data: ¿Qué querrá ese tal Daxon? Que bueno, jajajaja, muchas cosas por saber, aquí es donde viene lo bueno, faltan como 10 capítulos para el final, va estar candente. ¿Quieren Spoiler?
Bye, Minion.
Lokoolu.
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Tú eres mía, princesa© (Libro I)
Teen Fiction«La vida es una ruleta rusa que nadie a podido descifrar, y los que quieren mueren en el intento » Me llamo Alex McKay, y tú eres mía princesa, por las buenas o por las malas.