Dulce y Descarado [Omegaverse]

Capitulo 32

Donghae estaba escribiendo una lista de nombres para su bebé, había comenzado con los que le gustaban, después continuó con los que tenían significados bonitos, luego con los extranjeros con significados bonitos, para seguir con los americanos que sonaban bien y finalizar con los que le gusten a Hyukjae. En la última revisión le dijeron que sería una niña así que estaba escribiendo apurado porque estaba a menos de un mes de dar a luz.

En ese preciso momento la posición le resultaba algo incomoda, estar tan inclinado sobre la mesa con su abdomen demasiado voluminoso. Se mordía el labio pensativo mientras golpeaba la mesa de madera con la pluma. Escuchaba a Amber entrar y salir ya que estaba haciéndola de jardinera con sus plantas, pobre de ella si le pasaba algo a su precioso árbol de aguacates, a Hyukjae le costó tanto conseguirlo además de lo caro que salió. Debía lucir espléndido y brillante.

Estaba por volver a su tarea después de su pequeña distracción en sus pensamientos cuando el teléfono sonó haciéndolo saltar. Se puso de pie con pesadez y camino hasta la sala para tomarlo y responder. Llevaba una camiseta de algodón y un pantalón de tela delgada, ya era verano pero afortunadamente en ese lugar no hacía tanto calor. Por lo que podía pasear cómodamente y caminar sin sudar.

—Hae-Hae ¿Cómo estás tú y mi sobrina?- Pregunta Sora entusiasmada al otro lado de la línea.

—Exactamente igual que ayer, bien. Pero agradezco tu llamada, Amber ya no habla conmigo al menos que sea estrictamente necesario, dice que soy demasiado "difícil" ¿Puedes creerlo?- Cuestiona Donghae indignado.

—No entiendo como puede decir eso si a palabras de tu esposo, mi hermano, eres una "dulzura".- Dice ella con una melódica risa al final. El castaño asiente satisfecho con lo que dice su cuñada, si él es un amor de persona.

—Ya lo se.- Responde el joven sentándose con cuidado en el sofá.

—Y dime ¿Que hacías? ¿Aún no conoces a mucha gente?- Cuestiona Sora con curiosidad.

—Un poco, con el embarazo tu hermano me tiene vigilado como si yo fuera un bebé. Así que solo salgo acompañado por si llegara a suceder algo o se delantara el parto. Pero conocí a una chica llamada Yoona con la cual hablo de vez en cuando. Tiene un horario de trabajo algo desordenado así que es difícil que tenga tiempo libre.- Explica mientras toma el mando de control y enciende la televisión, le baja un poco el volumen y cambia de canal continuamente.

—Interesante. Me alegro que ya conozcas más personas, así podrás presumirles a tu pequeña cuando nazca. Dime ¿Ya escogieron un nombre? Pregunta Sora tratando de sonar casual, no lo logra.

—Noup, he estado haciendo una lista pero solo tengo seis páginas y faltan los nombres que le gusten a Hyukjae.- Replica Donghae con un puchero en sus labios.

—Pueden tener más bebés para que usen los nombres de la lista.- Dice su cuñada con una risa divertida y una voz sugerente.

—No por ahora, cuando nazca éste esperaremos como unos tres o cuatro años para el siguiente. Realmente quiero otro bebé pero el parto me va a doler mucho.- Se queja mientras un escalofrío recorre su cuerpo ante la sola idea.

—Y dime... no han pensado que la bebé pueda llámese, ya sabes, Sora.- Sugiere está con un tono inocente pero Donghae es tajante.

—No, eso significaría ponerle al siguiente bebé Donghwa y no será así. Mi hermano estuvo insistiendo por teléfono durante tres semanas pidiéndome que llamaran al bebé igual que el, por eso pedí que me dijeran el sexo, y así me deshice de mi hermano. No quiero que se sientan, así que mi bebé no tendrá el nombre de ningún familiar. ¿Entendido?- Pregunta el más joven con voz firme.

—Pues ya que, pero cuando yo tenga un hijo no le pondré Donghae.- Dice ella satisfecha con su respuesta.

—Para eso necesitas un esposo y ni a amigos llegas.- Dice el castaño agregando un "Adiós" rápido antes de que su cuñada se enojara. Deja el teléfono a su lado y se recuesta en el respaldo del sofá, eso de estar esperando un bebé era demasiado agotador pero su pequeña lo valdría.

Frunció los labios de forma inconsciente mientras seguía pensando como llamarla, había demasiados nombres para una bebe además de que debía de acomodarlos para que tomaran con "Lee". Apago la televisión con la intención de ponerse de pie, pero estaba tan cómodo.

—¡AMBER!- Grita con fuerza mientras frunce el ceño, la chica no se apuraba. Estaba a punto de llamarla una vez cuando escuchó sus pasos acercarse por el pasillo que daba al jardín trasero.

La rubia apareció llena de tierra, con raspones en la mejilla y los ojos llenos de preocupación, su rostro lucía asustado mientras veía a todos lados tratando de encontrar algo. Por fin su mirada se detuvo en el, lo escaneo de arriba a abajo y frunció el ceño.

—¿No te paso nada?- Cuestiona esta viéndolo sorprendida.

—No, claro que no. Me pasas la lista de la cocina.- Pregunta Donghae sonriendo con amabilidad, Amber solo entrecierra los ojos y respira profundo. Se gira y camina tensa como un alambre mientras murmuraba entre dientes sin quedo más joven l escuchara. "Esta esperando un bebé y te paga bien, esta esperando un bebé y te pagan bien."

—Aquí está.- Dice ella entregándosela hasta el sofá.

—Gracias, pero porque estás llena de tierra, arruinarás el piso.- Se queja Donghae tomando la lista y revisando una vez más los nombres.

—Porque me llamaste, me asuste, creí que ibas a dar a luz o te sucedió algo.- Explica la rubia indignada.

—Estoy perfectamente bien, pero gracias por preocuparte.- Respondió Donghae pero Amber solo resopló y se dio la vuelta saliendo de ahí. Nuevamente esta le daba esquinazo y no entendía porque si él era una maravilla de persona. Volvió a concentrarse en su lista y recorrió los nombres buscando el indicado. ¿Y si la llamaban Bonnie?