—No.- Responde de manera rotunda su esposo quien está saliendo de la ducha, llevaba una de sus pijamas lisas color azul y el cabello algo húmedo.
Eran casi las nueve de la noche y desde que llegó Hyukjae del consultorio tiene a Lee Donghae tras el, pidiéndole que llamen a su hija "Bonnie" sin razón alguna. Al parecer al pelinegro le llegó el nombre de la nada y ya no se fue de su mente.
—Pero es bonito.- Dice el castaño con un puchero adorable.
A Donghae el nombre le parecía adorable, sonaba bien y le gustaba. Punto final. El omega creía y aseguraba que su esposo le diría que si en cuanto lo escuchara pero este solo se negaba.
—¿No es el nombre de un conejo o algo así?- Pregunta su alfa mientras seca su cabello, el pelinegro se sienta en la cama, recargado en las almohadas contra la cabecera, las piernas cruzadas y sus manos acariciando su abdomen.
—Claro que no, no lo creo. Pero es lindo ¿O como la quieres llamar?- Cuestiona Donghae viéndolo con atención. Negándose a darse por vencido.
—Me gusta Hayoung, MiYoung, Sunhae, Eun-hee o si quieres un nombre extranjero puede ser ¿Allison?, ¿Isabel? O ¿Que tal, Seo-bi?- Sugiere su marido, quien camina con calma hasta la cómoda, donde abre una crema y empieza a humectar su piel con calma, después un poco de bálsamo en sus labios.
—Seo-bi no es extranjero.- Se queja el más joven bajándose de la cama.
—No, pero si es bonito.- Responde Hyukjae mientras sonríe y se gira hacia su omega quien lo ve furioso pero al mayor solo le parece adorable. Así que se inclina y aprieta la mejillas regordetas mientras lo besa.
—No es justo, Bonnie es un lindo nombre y suena bien.- Sigue quejándose el más joven mientras se pone de puntillas tratando de verse más alto e intimidante para el castaño.
—El nombre lo escogeremos ambos, y Bonnie no me gusta. Además tienes una lista de seis páginas no entiendo cuál es el problema de que me niegue al primero que me dices.- Continua Hyukjae rodeándolo para quitar las almohadas de la cama y prepararla para dormir.
—Pero dime que lo pensarás, que existe la posibilidad de que se llame así.- Los ojos marrones del omega brillan esperanzados, solo espera un ligero asentimiento y sabrá que habrá ganado pero su pareja es consciente de eso.
—No, no existe ni la remota posibilidad de que mi hija se llame "Lee Bonnie" es una completa locura.- Responde el más alto llevado las almohadas al sofá, una por una.
—¿Y "Bonnie Lee"?- Pregunta con inocencia mientras ladea el rostro y sonríe. Hyukjae se quedó quieto por unos segundos, lo piensa, realmente lo considera pero al final niega con la cabeza para agregar sus opciones.
—¿Y qué tal "Allison Lee" o "Lee Eun-hee?- Pregunta con calma dejando la sábana hacia bajo y la cama lista para dormir.
—No lo creo.- Responde sin más el castaño. Camina hasta la cama y se mete bajo el edredón, llevaba una adorable pijama de estrellas y con su vientre de embarazo mientras hacía una rabieta, lucía tan lindo.
—¿Lee Seo-bi?- Pregunta el alfa apagando las luces para meterse a la cama a lado de su omega.
—Tal vez, suena lindo.- Donghae se muerde el labio pensativo, cuando recuerda algo.
—Bien, entonces...- Trata de dar por terminada la charla de esa noche, pero parece que el destino no quiere que duerma.
—No, espera. Te mostré lo que compré por internet.- Dice con rapidez el joven, se levanta y camina hasta el armario, rebusca a oscuras hasta dar con la pequeña cajita blanca donde venía su encargo. A regañadientes el alfa enciende nuevamente la luz, era una suerte que al día siguiente descansara o ya habría mandado a dormir a su esposo desde las seis de la tarde.
—Dime que no gastaste tanto como la última vez.- Pide Hyukjae mientras se acerca hacia el joven quien niega divertido.
—Claro que no, ¡Mira! ¡Mira! ¡Mira!- Dice Donghae entusiasmado mientras saca dos mamelucos pequeñitos, uno con estampado de fresas y el otro con estampado de aguacates.
La última vez, el omega había usado la tarjeta de crédito para encargar ropa de bebé, tenían un clóset en la habitación que sería de su hija, llena de esa ropa.
Cientos de mamelucos, vestidos, calcetines, zapatitos, guantes, shampoos, peines, diademas, aretes, y hasta sonajas. Todo para un recién nacido, con suerte y se lo pondrían una vez, cuando vio la cuenta sintió que se le hija el alma del cuerpo. No es que tuvieran problemas económicos pero, en realidad podían darse esos caprichos, pero si dejaba a Donghae cumplir todos esos caprichos estarían en la ruina.
—Debo admitir que son lindos.- Responde el alfa tomando las pequeñas y delicadas prendas en sus manos.
—Lo se, está vez solo pedí dos. Había tantos e incluso uno con duraznos, estuve a nada de comprarlos.- Explica Donghae entusiasmado y orgulloso por su autocontrol, o casi autocontrol.
—Debo empezar a ponerle límite a tu tarjeta.- Piensa en voz alta el alfa, examina la ropa con cuidado, solo le parece más y más adorable.
—Eres malo.- Le da un manotazo en el brazo su esposo quien no quiere admitir que si dolió.
—Tu eres malo conmigo.- Contraataca el alfa mientras deja los mamelucos en la cajita, la cual deja sobre la mesilla de noche. Donghae se encoge de hombros mientras vuelve a la cama.
—No se de que me hablas.- Dice este, se quedan a oscuras una vez más y se recuestan en la cama dispuestos a dormir.
—Me has negado la intimidad desde hace dos semanas, quieres volverme loco. Aún faltan tres semanas para que des a luz y después esperaremos hasta que te recuperes.- Dice el alfa girándose, Donghae se acurruca en sus brazos dándole la espalda.
— Dijiste que no era recomendable la penetracion.- Susurra el más joven cerrando los ojos.
—Podemos hacer muchas otras cosas.- Responde el mayor besando la cabellera del otro.
—Si la niña se llama Bonnie...
—Olvídalo. Buenas noches.- Responde Hyukjae cortando la frase del otro, se quedan dormidos esperando que uno de los dos se rinda pero ninguno lo hace.
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Dulce y Descarado [Omegaverse]
FanfictionLee Hyukjae es un hombre tímido y vergonzoso respecto a la intimidad, a sus veintiocho años termino una relación de un lustro, pero después de diversos imprevistos termina casado con Lee Donghae un joven de veintiún años que al contrario del otro, e...