¿El sueño o la realidad? (Flamantha)

Capítulo 16 - FRIENDS

La noche con Flavio fue perfecta. Todo lo que había organizado para pedirme ser su novia me conmovió demasiado y sabia que por el valía la pena arriesgarse. La cabaña, la cena, la decoración, la idea de ver una película. Lo había pensado todo tan bien que no podía no estar feliz. No me había equivocado al arriesgarme por él, definitivamente era la clase de chico que siempre había esperado. El detalle del collar también había sido hermoso, tan sencillo pero tan significativo, parecía que el me conociera de toda la vida y sabía que era exactamente lo que  me gustaba. Pero no. Flavio era de esas personas que pasan por tu vida solo una vez y te demuestran que aun hay personas que son capaces de ponerte el mundo patas arriba, de hacerte sentir como una de las mujeres más afortunadas del mundo por ese trato especial que tiene contigo, que hace que detalles tan pequeños estén llenos de significado porque se asegura que, por más que sea pequeño, sea perfecto. El estaba siendo de capaz de curar mis heridas. Esa tarde había pasado por un ataque de ansiedad y él me había hecho olvidar de todo eso.

Con él, solo era Samantha, podía ser yo perfectamente sin tener que fingir, porque él me había demostrado que no necesitaba aparentar nada porque así tal como soy, soy perfecta.

Además, pudimos terminar lo que ni siquiera habíamos podido comenzar la noche de la fiesta. Pero no esperé sentir tantas emociones. Haber hecho el amor con él fue diferente, me sentí cuidada y amada. En todo momento nos estuvimos dedicando miradas y sonrisas, no era necesario más, esos simples gestos significaban más que muchas palabras juntas. Ahí definitivamente supe que mi corazón le pertenecía y que no había vuelta atrás y supe que si lo perdía a él, parte de mi se perdería. Sé que puede sonar muy exagerado pero, en mis 24 años nunca me había sentido así de bien como con él. Y esos son sentimientos que solo pasan una vez en la vida, es de ese tipo de amor difícil de superar. Tenía que luchar para no perderlo pero, para eso, debía luchar contra mi pasado y superarlo.

Esa mañana tuvimos que levantar temprano porque debíamos pasar por nuestras casas para ir a la universidad. Antes de separarnos decidimos que ese día les contaríamos a nuestros amigos lo que estaba pasando, no podíamos ocultárselos más y queríamos demostrarnos nuestro cariño en cualquier momento.

Al subir a mi habitación me la encontré a Anaju sentada en mi cama, esperando ansiosa a que le contara todo. Y con todo, me refiero a todo, ella no pretendía que me guardara ningún detalle. Termine con mi historia justo a tiempo para dirigirnos a la facultad. Ya en el coche le conté que habíamos acordado contarle todo a los demás.

Ella estuvo totalmente de acuerdo porque merecían saberlo. Tras ello vino lo que yo venía evitando hace tiempo
- Sam – me dijo en un tono serio, sabía que venía algo de lo que aun no quería hablar - ¿sabes que tarde o temprano deberás contarle todo a Flavio, no?
- Si – le respondí con un suspiro – lo sé. Pero tengo miedo
- Pero no lo puedes seguir atrasando Sam, sabes que mientras más tiempo dejes pasar será peor
- Lo sé, y lo dejé pasar mucho. Y ahora siento que es demasiado tarde, ¿sabes? Creo que si se lo cuento ahora se molestará porque le mentí y le oculté demasiadas cosas.
- Pero, aunque creas que es tarde, debes hacerlo. El se merece saber lo que hiciste todos estos años, no puedes vivir con miedo a que se enteren por parte de otras personas. Lo de ayer es una prueba de ello.
- Si, lo sé,  pero si le cuento eso también debo contarle porque regresé y aun no estoy preparada para ello. Ni siquiera fui capaz de contártelo a ti.
- Pero puedes explicarle y seguro que él te entenderá.
- ¿Y si se aleja de mi porque soy famosa?
- Pero ya no lo eres Sam, ya no eres Amy, eres Samantha
- Amy sigue estando Anaju, yo tarde o temprano debo volver a Inglaterra, firme un contrato y debo cumplirlo – la cara de mi hermana en ese momento se llenó de confusión.

Cuando regrese a España pensé que no volvería a irme a Inglaterra y eso fue lo que le dije a mi familia. Pero eso no podía suceder. Tenía un contrato y debía cumplirlo. Hace un tiempo tuve una reunión con la discográfica en la que me informaron que si bien no aceptaban la manera en la que me había ido, eso serviría para que los medios se olvidaran de lo de las fotos. Pero también me informaron que cuando ellas me dijeran, debía volver.