Rebecca's POV
No podía conciliar el sueño, así que salí a dar una vuelta. Había llegado hasta uno de los mejores barrios de Los Ángeles cuando escuché una voz que me resultaba demasiado conocida y una voz de una mujer que no había escuchado nunca. No iba a quedarme a escuchar porque no me parecía apropiado, así que decidí darme media vuelta y volver por donde había venido.
Estaba nerviosa, muy nerviosa. Quedaban 24 horas para el juicio de mi padre y estaba todo en juego. Una parte de mi, quería creer a Damien y pensar que tenía un buen motivo para hacer lo que hizo en su día, pero otra parte me decía que un traidor siempre iba a ser un traidor.
Unos días atrás, le pedí a Axel que me acompañara al juicio, pero ahora estaba empezando a dudar. No sabía que iba a pasar y con mi petición lo único que estaba haciendo era atraerlo al punto de mira. Víctor también iba a venir y tampoco podía permitir que le pasara nada malo, pero después de hablar con Alison, mi padre tenía muchas opciones de salir inocente gracias a la huella que Axel me consiguió.
Seguían pasando un montón de cosas por mi cabeza cuando me di cuenta de que escuchaba unos pasos detrás de mi que se acercaban cada vez más. La última vez que estuve en esa situación, no acabé muy bien. No quería volver a pasar por lo mismo, así que decidí acelerar el paso, pero cada vez escuchaba las pisadas más cerca. No llevaba ningún arma así que me preparé para lo peor. Si la persona que estaba detrás de mi iba a atacarme, iba a defenderme y lo iba a pagar muy caro.
Estaba tan centrada en las pisadas de la otra persona que no me di cuenta que venía alguien de frente.
—Perdona.—La persona que estaba detrás de mi, chocó levemente contra mi chaqueta y siguió su camino.—No te había visto.—Me disculpé cuando me choqué contra aquella mujer.
—No te preocupes, no ha sido nada.—Respondió la mujer desconocida. Aunque fruncí el ceño nada más escuchar su voz. Me resultaba conocida.
Miré en la dirección de aquella persona que no pude identificar porque no le vi el rostro, pero estaba completamente segura de que era un hombre. Aquella mujer también miró en su dirección al ver que no respondía.
—¿Te encuentras bien? Estas un poco pálida.
Su voz me sacó del trance. Era preciosa. Su color de pelo era pelirrojo y tenía notables pecas en la mejilla.
—Si, si. Gracias.—Respondí aun sujetándome a ella. Después de verla, supe al cien por cien que se trataba de ella.
—Eres ella, ¿verdad?
Ella no se sorprendió por mi pregunta. Pareció entenderlo a la perfección.—Conoces a Axel.—Afirmó.
Asentí.
—¿También te dedicas a lo mismo que él?
—No sé a que te refieres.—Sonreí al recordar que era una agente del FBI. Ella me devolvió la sonrisa.
—Soy Grace.—Me tendió la mano.
—Rebecca.—Se la estreché.
—Esto no puede estar pasando.—Nos giramos al escuchar aquella voz masculina.
Grace rio y yo me maldije por dentro porque Axel podía pensar que antes los había visto hablando y que me había dado un ataque repentino de celos, lo cual no era verdad.
—Ha sido un encuentro accidental.—Respondió Grace.—Nos chocamos sin querer. De todas formas, yo ya me iba. Ha sido un placer, Rebecca.
—Igualmente, Grace.—Respondí para después verla alejarse a lo largo de la calle.
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BESTIA
عاطفيةES INDEPENDIENTE DE LOS ANTERIORES. La bestia interior se apodera de ti cuando el humano ya no puede escapar. A los ojos de todo el mundo la belleza es algo increíble y que no todos pueden poseer. Sin embargo, no es real: es una máscara que oculta...