La leyenda que nadie quiere contar.
la vida de _____ Basteri es sumamente normal, la típica vida de una chica de 19 años que solo busca ser alguien en la vida, ella a decido estudiar en la Universidad la carrera de Filosofía.
Todo iba bien hasta que...
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Viernes
La música en mis auriculares sonaba ligeramente en mis oídos, Ciende CNCO era lo que es escuchaba muestras cerraba mis ojos.
Mi abuela se enojaba que durmiera con auriculares puestas ya que temía a que me ahorcara con el cable, pero solo puedo relajarme si tengo música.
Llevaba como media hora tirada en mi cama escuchando música, y es que la verdad estaba muy cansada, hoy fue un día muy cansada en la Universidad, agradezco que sea viernes, arrugue la nariz al recordar que había quedado de salir con Mateo a cenar, en esos momento me había arrepentido de haber aceptado, quisiera quedarme aquí a tomar una taza de chocolate caliente. Pero también debía ir al trabajo.
Tome mi celular y pause la música, quite los auriculares de mis oídos y suspire. Gire mi cabeza para ver mi reloj que se encontraba en mi buró que tenía a un lado, 5:30p.m.
Me levante de mi cama y salí de mi habitación, la madera rechinaba con cada paso que daba, la casa estaba en completo silencio, lo que se me hizo extraño. Baje rápidamente a la Codina ya que había humo.
-¡Santo Cielo!- dije al abrir la puerta de la cocina que estaba cubierta por una capa de humo negro. Tosí y me dirigí a la estufa para apagar lo que se estaba quemando, abrí todas la puertas y ventanas que estaban en la cocina.
-¡Blanca!- grite pero nadie contesto.
Comencé a buscar a Blanca y a mis abuelos por toda la casa, pero no había nadie.
Toque mi frente frustrada ¿Dónde pueden estar? Esto no me estaba gustando me dirigí a la entrada de la casa y abrí la puerta.
-Buenas tardes señorita-dijo una señora que pasaba por ahí.
-Buenas tardes- dije.
Fue cuando vi a Blanca y a mis abuelos a unos cuantos metros, estaban observando el cielo. Me acerque a ello
-¿Que hacen? ¡Casi me incendio!- dije enojada.
-Shh- dijo mi abuela.
- ¿Qué pasa? No entiendo- dije frunciendo el ceño- que están viendo- mirando a donde ellos observaban.
-La Luna cariño. Esta roja- dijo mi abuelo.
-¿Y?- comente- a veces pasa eso.
-Pero cuando sucede solo se ve de noche- respondió mi abuela- y todavía no anochece.
-¿Y eso que significa? - dije mostrando mas interés.
-Significa que hay algo en el pueblo que no es bueno- respondió mi abuelo.
-Sera mejor que entremos señores- comentó Blanca- puede ser arriesgado estar afuera.
Mis abuelos asintieron y comenzaron a caminar en dirección a la casa, y yo me quede observando la luna.
