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Después de un largo recorrido la carrera se detuvo,ambos príncipes se vieron,ya habían llorado lo suficiente y lamentando muchas cosas,pero no se dejarían encerrar por aquellos demonios. La carreta se abrió,tres de esos demonios le recibieron pero antes de que estos los tomaran se abalanzaron contra ellos haciéndolos caer y golpearlos aún con sus manos inmovilizadas.

Se miraron entre ellos y con un asentimiento decidieron convertirse en lobos y poder escapar junto Minho.

Pero cuando estaban a punto de hacerlo una voz los interrumpió.

-Ahh,pensé que no harían esto- antes de que los Principes hicieran algo contra aquel dominio,este les arrojó una bola de energía negra hacia sus pechos,dejaron salir un quejido sintiendo como algo en su pecho dolia y en su interior parecía cerrarse.

Hyunjin:¿Qué...mierda nos hiciste?- preguntó sin poder contener el dolor que comenzaba a expandirse por cuerpo-

-No podrán convertirse en lobos hasta que estén encerrado- se encogió de hombros y sonrió de lado- Descuiden el dolor pasara

Yeji:Es un hijo de...- frenó sus palabras cuando su lobo emitió un aullido en dolor-

No pudo evitar doblegarse un poco debido al dolor creciente.

El segundo Dragón al mando les hizo una seña a sus ayudantes,quienes obedeciendo sus órdenes amarraron mejor a los príncipes,y así comenzar a llevárselos. Estos aún intentaban liberarse,pero solo lograban que sus heridas empeorarán,en el caso de Hyunjin.

El Alfa dirigió su vista hacia la carreta esperando ver que bajaran a Minho,en lugar de eso la carreta comenzó a avanzar con su amigo dentro.

Hyunjin:¡A dónde mierda lo llevan!- gritó sintiendo sus cuerdas vocales desgarrarse en el acto,su cuerpo estaba muy débil de eso no había duda-

-El no nos sirve,será enviado por nuestro segundo amo a un lugar donde su amigo pueda morir en paz- dijo con desinterés provocando la ira en ambos hermanos-

Hyunjin apretó sus dientes y Yeji solo se contenía,odiaban ser sometidos de esa manera,solo podían pedir a los Dioses que nada le pasara a Minho,el recuerdo de su padre envolvió la mente de ambos aún preocupados por lo que haya pasado en el castillo,y si su padre logró seguir con vida,o si habría muerto...descartaron aquello ultimo,su padre estaba bien,tiene que estarlo.

Yeji recordó el pergamino que llevaba dentro de su armadura,esperaba que siguiera intacto,si su padre se lo dio fue por algo y en cuanto pudiera lo leería.

Ambos llegaron a un lugar desconocido,a su alrededor sólo había pastizales y un bosque,parecía un castillo a simple vista,demacrado y con años de antigüedad.

El sol se ocultó dando paso a la oscura noche,los faroles alumbran su camino a la entrada siendo guiados al interior topándose con más demonios,algunos en su forma y otros un poco mas "humano"a la vista.

Observaron todo tratando de memorizar alguna fuente de escape,por si acaso.

Fueron llevados por un pasillo oscuro hasta la parte subterránea del castillo,no habían muchas celdas,sin embargo la sangre decoraba el lugar,haciendo que un olor mareante los inundarán sintiendo ganas de vomitar.

Frente a ellos dos celdas se abrieron cerradas por vigas de hierro,muy resistentes a simple vistab,en una metieron a la Omega y en la otra al Alfa,quien fue arrojado bruscamente al interior haciendo sangrar sus heridas,la sangre se podía apreciar en las partes no cubiertas de su armadura,hasta este punto se encontraba más pálido de lo normal. Yeji observaba a su hermano con preocupación,si bien ella no tenía heridas profundas pero si golpes y cortadas superficiales que le causban dolor,no estaba muy especializada en medicina pero sabia que su hermano necesita ser atendido con urgencia.

Y̻o̻u̻'̻r̻e̻ m̻y̻ O̻m̻e̻g̻a̻❅ʜʏᴜɴɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora