Rayan Dominika Pepper, mejor conocida como "El león marino", es la ganadora de cinco años consecutivos en la competencia de Surf de Rosemary Beach.
O lo era, hasta que una tragedia la azotó y la alejó de las olas para siempre.
Al menos eso esperaba...
—Las noticias vuelan, pescadito. —Dice papá desde la camilla.
Halle ríe.
Papá suspira.
—Y a todo esto ¿Cuándo habrá noticias para mi?. —Pregunta Papá. —Ya quiero irme a casa.
Imagino lo difícil que es para el y más cuando le gusta estar trabajando, pero eso se acabo, al menos por un tiempo.
—Mañana.—Le respondo.
Los ojos de papá se abren ilusionados.
Me cruzo de brazos y le dejo bien en claro. —Pero eso no significa que te pondrás a entregar cebo, papá.
—Pescadito, es el trabajo de mi vida.—Me recuerda el.
—El trabajo de tu vida podrá esperar, primero es tu salud.
Papá se queja y golpean la puerta.
—Adelante. —Digo yo.
La madre de Halle ingresa a la habitación.
Papá suspira. —Lo que me faltaba.
Halle y yo reímos.
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—Fue amable de parte de tu madre quedarse con papá. —Pronuncio mientras nos dirigimos a la fogata de la playa. Al lado de la choza.
Cruzamos la arena, Halle cuelga su brazo sobre el mío y ambas sonreímos.
—Aunque creo que Stuart no está contento con eso. —Bromea Halle.
—Opino lo mismo.
Coloco mi mirada en la misma choza donde celebramos una vez con los chicos, ahora se les ocurrió, no a los padres sino a mis alumnos, celebrar mi regreso a las olas.
—¿Tu y Nate ya hablaron?
—Halle..
—Soy tu mejor amiga, debo saber.—Prácticamente me amenaza.
—Si, bueno no... no realmente.
—¿Qué significa eso?
—Aún no hemos hablado claro respecto a todo, me porté como la mierda con el...—Después de todo el solo quiso ayudarme y yo.
