Perfecta Sincronía

7

Rayan:

Fui a casa, me cambié y le avisé a papá que regresaría un poco tarde, no hizo preguntas y creo que ya intuye porque, sin embargo como dije solo me dejó ir.

La fogata y las luces se ven desde que pongo los pies en la arena de la playa, no debo ni preguntar a los pocos bañistas que quedan, quienes ya se están retirando o a los mismos ciudadanos de Rosemary Beach.

Me acerco a la fogata y lo primero que noto es a Nate al lado de Bill, ambos conversando, mientras Nate se lleva la lata abierta a los labios probando de una cerveza.

A mitad de eso, me ve y baja la lata para mirarme con una sonrisa, también captó la atención de Bill, pero es Nate quien viene hacia mi, corriendo.

—Hey.. —Su respiración sube y baja, observo su playera, asquerosamente llena de colores, la cual señaló y el ríe. —No preguntes, fueron los padres.

—No lo haré.

El señala. —Ven, voy a presentarte.

Tira de mi brazo con cuidado hacia el centro de la choza, a unos metros se encuentra su parrilla y dentro todo el equipo.

Todos ponen los ojos en mi.

—Quiero presentarles a Rayan. —Los murmullos crecen y se elevan, más de uno se acerca a saludarme.

—Señorita Rayan, es un gusto.

—Muchas gracias por lo que hace con nuestros hijos.

—Usted es grandiosa.

—Seguramente con usted ganaremos.

Y así me lleno de comentarios, a los que les respondo con una sonrisa y al asentir con la cabeza.

Me vuelvo hacia Nate, cuando ellos desaparecen tras el anuncio del padre de Nataly pidiendo que se forman ahora que el asado ya se cocinó.

—Ten. —Nate me ofrece una lata de cerveza, Bill se coloca a su lado.

—No bebo, te lo dije.

—Creo que hoy puedes hacer una excepción. —Me dice Bill.

Regreso mis ojos a Nate. —Vamos, será como tu bautizo, dale un sorbo, si no te gusta no tomes lo demás.

—¿Y si me gusta?

Nate sonríe. —Entonces cuidaré que no hagas una locura toda la noche. Seré tu guardián.

Aprieto los labios y el insiste, tomo un respiro y abro la lata, dándole un sorbo profundo.

El sabor amargo se desliza por mi garganta y provoca un gesto de desaprobación en mi rostro, los chicos se ríen.

Nate me quita la bebida. —Definitivamente no es para ti.

—Te dije que no bebo.

—Esta bien, lo prefiero así.

¿Preferir que?

Carraspeo volviéndome hacia las familia. —¿Cuál es la historia?

Nate empieza a contar. —Mark y Thomas vinieron con sus dos padres, ambos trabajan en vienes raíces, así que nos ayudaron más con el presupuesto..

—Nataly solo vino con su padre. —Sigue Bill. —Su madre murió hace un año...

Nate continúa. —Timothy es independiente y a Anthony sus padres lo dejaron venir sin problema.

—¿Qué hay de Sheyla?. —Pregunto yo, mirándola.

—Su madre murió y su padre no esta muy interesando en esto, sin embargo la dejo venir.