La mánager ━━Haikyuu!!

10. La respuesta para mi duda.

Kuroo.

Ya habían pasado unos días desde lo ocurrido esa tarde. Ella seguía actuando como siempre y no me prestaba tanta atención como había empezado a hacer tras lo que pasó. Era molesto ver cómo hablaba con los demás miembros mientras que conmigo solo compartía palabras cuando yo me dirigía a ella o con cosas puntuales relacionadas con el equipo.

No tardé nada en notar como se había vuelto más cercana a Lev. Ya no solo lo observaba, también se tomaba la molestia de corregirlo cuando hacía algo mal durante los entrenamientos. También vi como comenzaba a llevarse mejor con Yaku, el problema de Yamamoto lo estaba ayudando muchísimo para acercarse a ella. Pero él tampoco se quedaba quieto, no, Yaku también se relacionaba con ella para mejorar su amistad.

Era tedioso ver cómo él avanzaba muy rápido con ella y sin ninguna dificultad. A veces hasta pensaba que lo hacía a propósito, para jugar con esa rivalidad que había entre nosotros.

También empezó a interactuar más con Kenma. Hablaban a menudo entre ellos, él la dejaba jugar a veces, ella había aprendido a cómo tratarlo y él, por alguna razón, parecía estar cómodo a su lado.

Hasta mi mejor amigo se me había adelantado con esa chica.

Aburrido de estar en casa decidí salir a dar una vuelta para despejarme. No había podido sacármela de la cabeza ni durmiendo.

La tarde ya había caído y para estar en mayo, las temperaturas no eran las apropiadas para esta época tan próxima al verano. En esta ocasión había tenido que ponerme una chaqueta para salir en vez de ir solo en manga corta.

Salí de casa sin saber a dónde ir. Tampoco me apetecía invitar a nadie para hacerme compañía. Poco antes de irme había estado hablando con Bokuto sobre el tema para saber su opinión y por si tal vez podría decirme qué hacer. Pero lo único que hizo fue reírse por el hecho de que una chica estaba pasando de mí.

Bokuto (enviado a las 5:33 p.m.):
¿Alguien ha podido resistirse a tus encantos?

Esperaba con ansias el día en que pudiera conocerla y entendiera cómo había sido la primera en resistirse a Kuroo-senpai.

Bokuto (enviado a las 5:35 p.m.):
¿Pero estás seguro de que no fue nada para ella?
Que alguien te bese es algo que te da mucho de qué pensar.

Kuroo (enviado a las 5:35 p.m.):
¿Lo dices porque a ti te pasó con Akaashi?

Bokuto (enviado a las 5:36 p.m.):
Hey, hey, hey
Cállate gato.

Bueno, al menos estaba en lo cierto. Cuando alguien te besa es imposible que no le des vueltas a lo que ha hecho.

¿Pero por qué parece que tú no lo haces?

Suspiré cansado de tanto darle vueltas, —¿Por qué es tan difícil?

Esta chica me iba a hacer perder completamente la cabeza.

—¿Hablando solo, Tetsurou?

Maldición, ¿por qué a mí?

Me esforcé para deshacer la tensión que se había apoderado de mi cuerpo y fingiendo que nada había pasado, me giré para contestar.

Allí, a un par de metros de mí, estaba la chica que no había dejado tranquila mi cabeza en días. Con su rostro inocente y angelical. En esta ocasión vestía unos vaqueros negros y una chaqueta deportiva blanca y morada que se le quedaba muy holgada. La llevaba abierta y en vez de situarse en los hombros, se encontraba en la zona del codo y el antebrazo. Su cabello azabache caía sobre sus hombros, ocultando los tirantes de su camiseta oscura y resaltando encima de su piel clara.