Felicity es abandonada por él hombre que decía amarla cuando más lo necesitaba, ahora le toca aprender a vivir con una nueva perspectiva, con ayuda de personas que la quieren y sobre todo de la ayuda de Laurel Lance quién se convertira en un pilar e...
Han pasado dos días desde que todos supieron acerca de los dos atentados contra mi vida, desde ese día, Laurel y yo no dormimos en la misma cama, a sido muy silenciosa, casi no me habla pero tampoco es grosera conmigo, se que me ama pero no me a perdonado del todo por ocultar algo tan grave y lo entendía, cometí un horrible error, uno que lastimó a todas las personas que quiero pero hirió mucho más a la mujer que amo y estaba tan arrepentida, no sabía que hacer para ganarme por completo su perdón pero por ahora era mejor dejarla sola.
Estos dos días han sido duros para mí y aún peor que los atentados, había ocasionado que Sara y Nyssa estuvieran un poco separadas, Sara estaba enojada por qué Nyssa oculto también información valiosa, me dolía eso por que sabía que el dolor de ambas era mi culpa, tenía que hacer algo pero no sabía que. Nyssa es la única que no me había dejado de hablar a pesar de que soy la culpable de su pelea con Sara, todos estaban enojados y heridos y lo entendía pero dolía demasiado.
Diggle me hablaba cuando era necesario al igual que Roy, Thea comenzó hablarme un poco más, tuvimos una charla donde me dijo que necesitaba un poco de tiempo, que me quería pero la había lastimado al ocultar el primer atentado por qué no tenía mucho de haber salido de un atentado que casi me mata, Sara no dijo nada, simplemente mantenía una pequeña distancia con Nyssa y conmigo, las lágrimas picaron mis ojos.
Parpadee varias veces para evitar llorar, trague en seco y volví mi vista a mis computadoras, seguí escribiendo algunos códigos, sentí una presencia a mi lado pero no volteé.
-¿Tienes todo listo? Hoy es el día de ir a ese edificio-. Dijo Diggle y giré para verlo.
-Lo tengo, hay cuatro fuentes de calor en este momento-. Dije mostrando las imágenes.
-Tenemos que movernos rápido, esto puede ser alguna trampa-. Dijo Laurel, asustandome un poco y giré para verla.
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-Por eso estaremos alerta... Es hora de cambiarse-. Dijo Diggle mirándo a los demás para después observarme fijamente.
Asentí con la cabeza, miré como Diggle y Laurel se iban y me dejaban sola, solté un suspiro y me levanté de la silla y fui a cambiarme por unos pantalones más cómodos y otra blusa con una sudadera, después regrese corriendo hacía mis computadoras y tomé las cosas que necesitaría.
-Todos manténgase alerta, esto podría ser una trampa, Felicity, siempre mantente al lado de uno de nosotros-. Dijo Diggle y yo solo asenti con la cabeza.
Salimos de la guarida y yo me subí a la camioneta de Diggle, los nervios me invadían, a pesar de haber salido varias veces en el campo, aún no me llegaba acostumbrar a eso, en poco tiempo llegamos al edificio, al bajar, Diggle dio unas órdenes, la mayoría se separó y yo me quede con Diggle y Roy.
-Mantente detrás de nosotros-. Dijo Roy y yo asenti con la cabeza, al momento que ellos caminaban, yo también lo hacía.
-Hay dos hombres al frente-. Dijo Roy deteniéndose por unos segundos.
