La Propuesta Engañosa. - Ivan y Emilio Martinez. [EN EDICIÓN]

Cap. 67 - Pasta

Ivan.

Lastimosamente hace mucho calor hoy, yo estoy en la cama terminando de leer los contratos, prácticamente aún en pijama

Y Andy... siquiera sé si está en casa, la dejé en la cocina desayunando mientras fui a llevar a Eliza a clases.

Dejo a un lado las hojas y me decido por ir a la sala

-¿y este milagro?- veo a Emilio en el salón

-solo vine por la firma de abuela y luego me iré- aclara

Lo ignoro y voy hasta la entrada, abro la puerta y me quedo en el marco de esta

-¡buenas!

-¡lpm, Rubén!- ¿alguien vio mi corazón por ahí?-¿qué carajos te pasa para aparecer así?

- es sólo coincidencia del destino, ¿de qué hablas?

-si, la coincidencia del destino te pidió que esperes hasta que el abra la puerta -murmura Boggie

-ay X, sólo vinimos para avisarte que hay una chica, vendrá para una entrevista, quiere trabajar en el restaurante

-¿a qué hora?

-pues en unos segundos, sólo espera a que cruce la calle-dice mirando al otro lado

-¿Que?- volteo pero no logro saber cuál de las tres chicas podría ser-al menos hubieras avisado, así me cambiaba de ropa

-si contestabas mis mensajes lo sabrías...

-estabas en el patio, ¿Que te costaba subir?

-mucho

-espera, ¿no es...?

-si...- es la misma chica de la foto

Miro a Emilio quien se encuentra tranquilamente esperando mientras escribe algo en su móvil

-y mira quién más viene - veo a Amelia entrar justo al mismo tiempo que la chica

Ay dios mio.

-¿esto acaso es una coincidencia?

-es el destino -dice Rubén-el hermoso destino...

-si, el destino- murmura Boggie

-Hola- saluda Amelia, la chica se queda atrás observando un poco tímida

-pasen, por favor- nos hacemos a un lado

Emilio voltea y por poco no le da un infarto

-Amo el destino-murmuramos los tres al ver su cara de poema

Nos mira pero nosotros desviamos la mirada - Emilio, ¿tan descortes vas a ser?- Rubén ayudando como siempre

-perdón, mi amor, ¿que haces aquí? - se acerca a darle un beso en la mejilla-¿cómo estas?- le pasa la mano a la chica

Los tres aguantamos las ganas de reír a carcajadas por la expresión de ambos

-vine a buscarte para ir a comer

-¿comer?

-si, tu secretaria me avisó y dijo que estabas aquí- Rubén lleva la mano a la boca y voltea

Boggie y yo estamos más rojos que el mismo color de tanto aguantar la risa

-¿vienes para la entrevista? - me dirijo a la chica

-si...

- yo soy Ivan, soy el propietario, ellos son Rubén y Boggie, prácticamente mis socios