Cap. 30 - Feliz Cumpleaños Elizabeth.

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Iván.

Y así, en un abrir y cerrar de ojos, habían pasado dos meses más, dos meses del cual no pasaba nada más allá de lo monótono.

Y increíblemente hoy es el cumpleaños de Eliza

Desde las ocho estoy decorando un pastel de chocolate con fresa, el que tanto le gustaba a su madre y del cual se convirtió en el favorito de Eliza.

No puedo evitar sentirme nostálgico, no sólo en este momento sino por el día. Fue el mismo día que su madre había muerto.

Una vez que termino de poner la crema color rosa, pongo una vela de cumpleaños, del cual empezaría a tirar chispas durante unos segundos hasta apagarse por completo.

Agarro la caja de fósforos y me dirijo a la habitación de Eliza

-¿cómo está la niña más hermosa?-gojeo al entrar a su cuarto y al verla despierta junto a Andy, quien había pasado la noche con ambos-feliz cumpleaños, princesa-enciendo la vela y este no tarda en hacer lo suyo.

Elizabeth chilla de la emoción mientras lleva sus pequeñas manos a la boca, sus ojos azules se ven iluminados por los pequeñas chispas de la vela que no tarda tantos segundos después para apagarse

- gracias, papá-esboza un sonrisa y luego salta por mi agarrándose de mi cuello

- gracias a ti, por ser mi hija-debo admitir que no podía seguir aguantando mis lágrimas y la necesidad de abrazarla-vamos a la cocina, te haré el desayuno y luego haremos las compras-asiente y rápidamente va hasta el baño-olvidas tu ropa-le aviso para luego reír al verla volver

Miro a Andy y le hago una seña para ir abajo. La agarro de la mano y bajamos juntos, ¿sienten que se perdieron de algo? Quizá estén creyendo que eso no es algo considerado monótono o al menos no en el caso de ambos.

Después de estos meses decidí tomar más en serio mis propias palabras. Deje de lado mi orgullo y me acerqué a ella como lo tenía previsto sin dar alguna excusa para no hacerlo.

Después de la charla que había tenido con Rubén creí que ella estaba embarazada del cual claramente no era yo el padre de ese bebé que viene en camino.

Y lo único que puedo decir es que aún no lo he confirmado sólo sé que quizá esté esperando el momento para decirlo. Varias veces la había oído en el baño vomitando, y en todas esas veces intento ayudarla

Si había sucedido lo mismo con la madre de Elizabeth, ¿por qué no podría pasar lo mismo con Andy?

Desde otro punto de vista podría decirse que estoy siendo un estúpido al aceptar a dos hijos que siquiera he tenido tanto acercamiento con ambas mujeres y mucho menos son en verdad de mi sangre

Pero debo admitir que odio los que tienen un pensamiento egoísta y no puedo ser así al saber que Andy ahora se encuentra bajo mi responsabilidad, más como esposa que como alguien que me está ayudando a conseguir una herencia

Simplemente no quiero dejarla a su suerte sabiendo que puedo ayudarla, siempre y cuando nadie se entere de la verdad.

Aquel bebé llevaría mi apellido y sería criado y cuidado por mi, como si en verdad fuera de mi propia sangre.

- ¿papá?- la voz de Eliza me quita de mis pensamientos haciendo que me dé cuenta que la tostada que dejé en el horno está apunto de quemarse

- aquí tienes, corazón-sirvo un poco de jugo de naranja en un vaso y se lo paso, quito dos tostadas de la bandeja y lo sirvo en un plato con nutella y a un lado una taza de chocolate con malbabiscos

La Propuesta Engañosa.  - Ivan y Emilio Martinez.  [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora