Capítulo 36.- Ahora o nunca

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Tres toques en la puerta hicieron que me levantara algo desorientado, aún echado en la cama vi por la ventana y el día parecía agradable, el sol ya estaba en lo alto alumbrando nuestro jardín y el cielo lucía de un celeste reconfortante. Me costó un poco darme cuenta que ya era un nuevo día; me estiré lo más que pude y con algo de dificultad me despegué de las sábanas. Otros tres toques retumbaron la puerta, esta vez algo más fuertes.

-¿Quién? – pregunté algo dudoso por la extraña manera de despertarme.

-Tyfani – respondió mi prima susurrando – Necesito hablar contigo.

-¿Es muy importante? – a estas horas no tenía muchas ganas de hablar con nadie, lo único que quería era dormir un poco más.

-Más o menos – contestó – Tengo algunas dudas y me gustaría que las pudieras responder.

Me toqué el cabello algo cansado y al darme cuenta que lo tenía todo enredado y como paja comencé a peinármelo de manera algo frenética con las manos, una vez sentí que ya estaba algo presentable le dije que pase a Tyfani. Ella giró algo lento el picaporte de la puerta y abriendo un poco metió su cabeza por una rendija.

-¿Estás despierto? – me miraba esperando la respuesta.

-Tyfani me estás viendo y he estado hablando contigo todo el rato, así que sí estoy despierto-

-Tienes razón – sonrió y luego entró a mi habitación ya sin miedo – Que bueno que te hayas levantado, la verdad es que la hora ya estaba muy avanzada y se me hacía raro que estuvieras durmiendo hasta tan tarde.

-Es sábado – me defendí – Los fines de semana puedo dormir hasta la hora que me dé la gana. ¿De qué querías hablar?

-De lo que pasa entre Marcos y tú – se sentó en mi cama, yo me acerqué a ella para escucharla – La pelea que tuvieron ayer no es normal y la manera como se tratan desde que llegamos es horrible, ¿Quiero saber qué pasó con ustedes? Los dos eran como los mejores amigos y ahora parecen que se odian.

Me quedé observándola por un par de minutos, sabía que contándole la verdad no lograría nada, es más, lo probable es que si lo hacía me ganara más problemas aunque parece imposible de creer, pero hubo algo en la mirada de mi prima que me hizo confiar en ella, tal vez fuera porque necesitaba confiar en alguien de mi familia o tal vez solo fuera por el sueño pero decidí contarle todo. Mientras hablaba de todo lo que había ocurrido en mi vida estos últimos meses, incluido lo de Luck, Rafael, y la trampa de Marcos; mi prima no dejaba de hacer muecas con cada cosa que se enteraba, hubieron momentos hasta que mi vida parecía ser algo graciosa por la muecas de Tyfani, ella siempre fue expresiva pero ahora lo era aún más, se le vía muy preocupada con lo que se enteraba, o ella era muy buena actriz o era cierto que no sabía nada de lo que me había hecho su hermano; y basándome en algunas obras escolares que vi de ella puedo asegurar que buena actriz no era. Terminé de contarle todo y el silencio acaparó el lugar. Tyfani se quedó observando el vacío, como procesando toda la información.

-Pero si Luck tuvo sexo conmigo y luego contigo… ¿Eso no es incesto?-

No sé porqué no me sorprendió escuchar por segunda vez esa frase.

-Tyfani concéntrate – le pedí – Hay cosa más importantes que te he contado.

-Sí tienes razón, pero es que se me hace muy difícil de creer, no te estoy llamando mentiroso ni nada por el estilo, pero es demasiado raro. Marcos siempre te adoró y nunca me di cuenta que te odiara – siguió hablando mientras enroscaba su cabello – Por más que trato de encontrarle un sentido a todo esto no lo consigo. ¿Qué te dijo él? ¿Te dio las razones para hacerte todo eso?

MPO - ReeditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora