36. La Chancla

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Abrió la puerta lentamente, con cuidado de no provocar ni el más mínimo ruido, asomó su cabeza y recorrió con la vista todo el lugar, una vez se aseguró de que no esté nadie, entró a paso lento para evitar que el piso chillara.

—Naruto..— palideció al oír su voz.

Giró y la vio sentada en un sofá individual con el ceño fruncido.

—¿Si?— murmuró nervioso.

—¡VEN AQUÍ!— sacó la chancla.

—¡Nooo!— comenzó a correr por toda la habitación siendo perseguido por la chica.

• • •

Ambos se miraron extrañados al escuchar todo el desastre que parecía ocurrir dentro del departamento.

El mayor saco sus llaves y abrió con cautela, esperando encontrar la típica escena de su novia peleando con el pequeño y no un enemigo o algo peor.

Al dar un paso dentro de la habitación, se agacharon esquivando un objeto.

—¿Eso fue..

—¿Una zapatilla? Sí— concluyó el peli plata, confirmando la duda de su amigo.

—¡NARUTO!— el nombrado paso como bala entre ellos saliendo del departamento, dejándolos sorprendidos por su velocidad.

—Como que está muy blanco, ¿no?— dijo mirando el lugar por donde había pasado.

Seguido vieron a la chica venir en su dirección con una zapatilla en la mano, ambos palidecieron al igual que el chico.

—¡Muévanse!— paso por el medio de ellos, saliendo al pasillo y divisando al rubio.

Al verla apuntar, el peli plata se apresuró a decir— ¡Yamato!.

Éste hizo las posiciones de manos correspondientes haciendo aparecer varios troncos que crearon una enredadera que cubría casi todo el pasillo.

El rubio giró aliviado, creyendo estar a salvo al final de éste, gran error.

La chica ya preparada, lanzó la chancla haciéndola pasar por el medio de las maderas y dando justo en el blanco.

• • •

—Cuando dije tu nombre, esperaba que atraparas a Hanny con la madera para dejarla inmóvil, no que le pusieras obstáculos para practicar tiro al blanco— lo miro de reojo sin cambiar su pose autoritaria.

—Lo siento, senpai— rascó su nuca apenado.

—Y tú, Hanny— la chica levantó el rostro con los brazos cruzados al igual que él— ya hablamos de no ser violentos, no le debes pegar a Naruto.

—Yo no le pegue, le pegó mi chancla, eso es diferente.

—Hanny— dijo en tono de advertencia.

Se oyó la risa del niño, quien sostenía una compresa fría en su mejilla.

—Hanan sensei fue regañada— canturreó en forma de burla.

—¡Naruto! Hablamos de ser amables.

—Exacto insecto, respétame.

—Nunca entenderé como Kakashi tiene la paciencia para lidiar con ustedes— agregó el castaño negando con una media sonrisa.

—A todo esto, ¿ahora por qué lo estabas persiguiendo?— cuestionó el peli plata.

—Iruka nos volvió a citar a una reunión— al escuchar eso, el ojiazul se levantó lentamente con la intención de salir de ahí sin ser visto.

—Te quedas— murmuró sin mirarlo provocando que volviera a su asiento.

—Deberías de entender que la violencia no es la manera para poder corregirlo— habló el castaño.

—Lo sé, pero así es más divertido, ¿verdad pulga?.

—¡Si!.

—¿Para ustedes, pelear de esa forma es divertido?.

—Por supuesto, yo nunca le haría daño en serio a la pulga.

—Kakashi— el nombrado lo miró— te encargas tú, ¿verdad?, a mi ya se me bajó la presión.





;-;




Hanan sería una mamá latina

Lamento que los capítulos estén siendo muy randoms, pero es lo que me viene a la cabeza ahora mismo ;-;

¡Gracias por leer! :D

Kakashi Hatake • One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora