5. MK ultra.

357 48 35
                                        

Jane

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jane.

Él me observaba mientras presionaba su labio inferior con los dedos y, al mismo tiempo, cruzaba una pierna sobre la otra mientras se mantenía apoyado en el borde de la mesa. Su mirada solo me transmitía simple curiosidad. Ya no había rastros de enfado o sorpresa como hace media hora atrás, pero aún así, no tenía ganas de hablarle.

Llevé la vista a mis mangas y las bajé para tapar mis manos. Sentía los nervios carcomerme de a poco. Nos habían dejado solos en aquel cuarto, a la espera de alguien más. La doctora había desaparecido en cuanto le expliqué la situación. Según ella, debía ir a buscar a su compañero de laboratorio. Y mientras se había marchado, Harry tan solo se había dedicado analizarme con su mirada intensamente verdosa. 

—Esas marcas en tus muñecas —habló de pronto él—. ¿Te las hiciste en ese laboratorio? —preguntó ahora cruzándose de brazos.

Asentí mientras mantenía la mirada en mis pies.

—¿Qué te hacían?

Lo miré demostrando algo de desafío. 

Harry alzó sus manos al aire, en símbolo de paz. Y luego, dejó de estar apoyado en la mesa para mirar por la ventana de la puerta. Me observó de reojo antes de soltar un pequeño suspiro para hacerse a un lado de la zona.  

—Espero que no nos mientas —advirtió él. 

La puerta se abrió sin darme tiempo a contestarle. Observé a las personas que ingresaban y me removí de manera incómoda en mi asiento, notado como la doctora llevaba una carpeta amarilla en sus manos. 

—Buenas tardes, Jane —saludó el chico—. Soy Marlon. Uno de los científicos de la base. Ayudo a Susan en lo que más puedo últimamente.

—Hola...

Marlon parecía joven, se veía de mi misma edad, pero quería creer que su inteligencia era mucho más que la edad que llevaba encima. 

—Ya le he explicado a Marlon lo que nos has dicho, pero prefiero que se lo digas con tus palabras —sonrió ella con calma—. No tengas miedo, somos de confianza.

Las palabras resonaron en mi mente al momento de decirlo, lo que me hizo observarla con miedo. Somos de confianza, era lo mismo que Nexus me había dicho antes de encerrarme. Arrugué mi entrecejo mientras sentía sus miradas en mí, esperando de manera expectante que comenzara hablar. Sin embargo, todo lo que había querido decir en un inicio, se atragantó en mi garganta para no querer salir. 

Junté mis manos con nervios, e hice sonar un cuantos huesos de mis dedos. 

—Puedes comenzar hablar... —dijo el chico presentado como Marlon. 

THE CODE [H.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora