Cuando llegamos a la mesa, Ethan presenta a Bryce a las chicas, y por lo que deduzco, ya ha conocido antes a Mason y Chad.
Nos sentamos en la mesa todos, y los chicos están hablando entre ellos, mientras que Kim nos está explicando a nosotras sobre el chico con el que ha estado bailando que le ha dado su número.
Intento prestar atención, pero cuando levanto la mirada hacia Bryce, cruzamos miradas durante un segundo. Un segundo lo suficientemente largo para que Kim se dé cuenta de que no la estoy escuchando.

-¿Tu que opinas? -Me dice Kim sacándome de mi nube de pensamientos.

-¿Qué?

-Digo, que qué hago

-Mm.. Sí, supongo que estaría bien.

-¿Supongo que estaría bien? No has oído nada de lo que he dicho, ¿verdad?

- Creo que Mad está distraída con semejante caramelito sentado en esta mesa.-Le dice Shelby a Kim mirando a Bryce.

-Shhh..-Les riño por haber dicho eso en alto. Aunque con la historia que está explicando Chad, no creo que haya escuchado nada.- No, es que... luego os cuento, ahora no puedo hablar.

-¿Luego? Vamos a bailar, y nos lo explicas ahora, no aguantamos a 'luego'. -Dice Shelby levantándose de su asiento.

Llegamos a la pista, y les cuento mi encuentro con Bryce en la barra, y mi historia del instituto con él.

Creo que están disfrutando con mi nerviosismo, ya que nunca me habían visto así. Cuando empecé a salir con Alan, fue porque al principio cogimos confianza como amigos, y luego los sentimientos se fueron desarrollando, pero con Bryce, siempre he sentido esos nervios en el estomago, y ahora que lo veo después de dos años, parece que mi cuerpo sigue reaccionando de la misma manera, o incluso más, porque ahora está.. mejor.

-Pues, yo de ti, haría mis movimientos, rápidos, porque parece no perder el tiempo. -Dice Kim mirando hacia la mesa donde están los chicos, y cuando me giro, le veo hablando con una morena demasiado llamativa para mi gusto.

Se percata de que le estamos mirando, y observo cómo le hace un gesto a la chica para que se siente con ellos y me vuelvo a mirar a Kim rápidamente para no quedarme mirando como una tonta la escenita de ligoteo.

-¿Movimientos? No voy a hacer ningún movimiento. Bryce y yo nos conocemos de antes, y ya está. Yo acabo de salir de una relación, que si no hubiera sido por su egoísmo de largarse a Italia, seguiríamos juntos. Así que lo último en lo que pienso ahora, es en estar detrás de un chico. -Replico cruzándome de brazos.

-¡Bueno, bueno..! Parece que los celos no le sientan bien a la señorita. -Dice Kim riéndose.- A ver Mad, tú lo has dicho. -Dice ahora en tono serio.- 'Si no hubiera sido porque Alan se ha ido, seguiríamos juntos', pero es que Alan se ha ido. Y tampoco pasa nada por que disfrutes conociendo a otras personas. Tampoco hace falta que te cases con él, solo decimos, que te lo pases bien.

-Ya, pero no se.. Hecho de menos a Alan, no me veo preparada para conocer a otras personas.

-Bueno, pero si otras personas aparecen, y te sientes cómoda... Solo queremos decir que no te frenes. -Dice Kim cogiéndome de la mano.- Estamos en la Universidad, es nuestra mejor época y lo sabes.

En verdad, tiene razón, Alan no se merece que yo siga pensando en él de esa manera, al fin y al cabo, no le importó largarse sin pensárselo.

Sigo escuchando a mis amigas, que me dan una larga lista de razones por las que debo de dejarme llevar y conocer a chicos, y luego seguimos bebiendo y bailando hasta que Shelby nos dice que quiere irse. Ha bebido bastante y ya está empezando a marearse, así que Kim la acompaña a la salida, y yo me dirijo a la mesa para coger los bolsos de las tres. Cuando me encamino hacia la mesa, veo que Bryce no está, y al buscarlo disimuladamente con la mirada, veo que está con la morena. Ella le está diciendo algo al oído, y a él parece hacerle gracia.

-Chicos, nosotras nos vamos ya.- Anuncio al llegar a la mesa.

-¿Ya? Pero si es pronto. -Dice Chad mirando la hora.

-Son las tres. ¿Qué quieres quedarte a cerrar el local? -Le digo revolviéndole el pelo. Sé que lo odia.- Shelby está mareada.

-¿Queréis que os lleve? He traído el coche. -Dice Mason

-No tranquilo, nos irá bien andar. -Respondo cogiendo los bolsos.

-Mañana queríamos ir a la playa, ¿venís? -Dice Chad, y cuando asiento responde. -Dile a Shelby que se traiga un bikini de esos que ella tiene.- Me dice con picardía, y yo le doy un codazo.

Cuando me despido de los chicos y me dijo hacia la salida, alguien me agarra del brazo, y al girarme me encuentro con la sonrisa de Bryce. Joder, es tan guapo...

-¿Te vas?

-Sí, es tarde y los efectos del alcohol me piden echarme en la cama.

-Ya..., Bueno, si quieres te acompaño, he venido en moto, pero, tengo un casco de sobra.

-No, tranquilo. Me voy con las chicas. Y bueno, tampoco quiero distraerte, veo que estás entretenido -Digo mirando hacia la morena que nos está observando, y antes de que se gire, ya me he marchado.

La verdad es que no sé porque le he dicho eso, salgo a toda prisa hacia la puerta y por suerte no me sigue.

Cuando llegamos a casa, me desmaquillo, me pongo el pijama, me recojo el pelo en un moño alto y entro en la cocina y para prepararme un sándwich. Shelby se ha recostado en el sofá e intuyo que pasará la noche ahí. No creo que tenga muchas fuerzas para cambiarse y llegar hasta la cama, teniendo en cuenta que apenas se sostenía de pie al caminar.

-Mm.. que bien huele, ¿Qué es? -Pregunta Kim a mis espaldas.

-Un sándwich caliente de jamón dulce y queso, ¿Quieres uno?

-Sabes que no te diría que no a eso jamás.-Sonrío, y me pongo a prepararle uno. Cuando acabo, nos sentamos en la barra de la cocina a comérnoslo.

-¿Estás bien? -Pregunta Kim con la boca llena sacándome de mis pensamientos.

-Si, solo que.. Bryce.. he sido estúpida, y al irme le he dicho algo que no debería.

-¿Qué le has dicho?

-Bueno, cuando me marchaba, me preguntó si me iba a casa, se ofreció a llevarme, y le dije que no hacía falta, que estaba pasándolo bien con esa chica. Y claro, después de dos años, no entiendo ni yo por qué le he dicho eso.

-Pues por que te gusta. -Dice Kim, y me quedo callada mientras sonríe.
-Bueno princesa, vamos a la cama, que mañana nuestras ojeras nos recordarán que no debíamos haber salido.-Me da un beso en la mejilla, y sale de la cocina.

Me tumbo en la cama, pensando en las palabras de Kim, y sin darme cuenta, mis labios se curvan en una sonrisa. Tengo que reconocer que me ha gustado verle.

Cierro los ojos, y me quedo dormida, hasta que mi móvil vibra bajo mi almohada.

Miro la hora, son las cinco y media, y cuando miro el móvil, es un número que no tengo guardado, pero al leerlo, sé que es él.

                       ¿Estás despierta?

Después de ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora