Después de ti.

8

Cuando llego a casa, cierro la puerta con cuidado de no hacer ruido, y me dirijo a mi habitación, me meto dentro de las sábanas, e intento conciliar el sueño, y sin darme cuenta, no puedo parar de pensar en lo último que me ha dicho.
¿Quiso devolverme el beso? ¿Querrá hacerlo ahora?. No sé dónde me estoy metiendo la verdad, pero intento pensar en lo que me han dicho las chicas. Dejarme llevar.

Me despierta un ruido que viene desde el cuarto de baño, y deduzco que es Shelby buscando algo para la resaca. Enciendo el móvil para ver si me ha dicho algo Bryce, pero no tengo ningún mensaje suyo. Pero si tengo uno de mi hermana.

¿Sabes si mi hermana está viva? Te echo de menos.

Sonrío al leerlo. Supongo que estará nerviosa porque dentro de dos días empieza el último curso del instituto, luego la llamaré para hablar con ella. Seguro que lo primero que me pregunta es que debe de ponerse el primer día. Hope es muy coqueta.

Tenemos una relación muy cercana. Siempre estamos en contacto, y todavía me acuerdo el último año de mi curso en el instituto, no se despegaba de mí porque sabía que me marcharía a la universidad. Todas las noches venía a mi habitación, y hablábamos de los chicos de su clase, de sus amigas, me pedía consejos y un día a la semana, íbamos juntas al centro comercial a comer y a comprarnos ropa.

Yo también la echo de menos, pero el año que viene ya estará en la universidad y podré verla cada día.

-Buenos días. -Digo al entrar en el salón. Kim está con el móvil en el sofá y Shelby está con los ojos cerrados y la cabeza apoyada en su hombro.

-Buenos días. Debes de estar cansada. -Dice Kim sin despegar los ojos de la pantalla con una sonrisa en los labios.

-No tanto como Shelby si es lo que me quieres preguntar.

-No. Ayer me pareció escuchar la puerta por la noche. Fuiste a tomar el aire... ¿sola?

-Pero bueno, ¿Y tu que hacías despierta tan tarde? -Digo tirándole un cojín a la cabeza.

-Estuve toda la noche hablando con el chico del bar. Es bastante mono, igual quedo con él algún día. -Me explica mientras me siento en el reposabrazos con las piernas en el asiento del sofá.

-¿Y tú qué? ¿Vas a decirnos a dónde fuiste? Aunque intuyo algo.

-Bryce me escribió por la noche. -Respondo sacando el móvil para enseñarle la poca conversación que tuvimos.

-Y...¿Dónde fuisteis? -Dice devolviéndomelo.

-Estoy escuchando aunque parezca que estoy en coma. -Dice Shelby levantando la mano y nos echamos a reír.

-No lo dudábamos petarda. -Dice Kim.

-Pues fuimos a la azotea del edificio de los chicos. Y estuvimos hablando.

-¿Hablando? -Pregunta Shelby.

-Sí. Hablando. Cotillas. Cuando pase algo diferente, seréis las primeras en saberlo. Voy a darme una ducha. -Digo levantándome del sofá, y las dejo cuchicheando en el salón.

Enciendo la música del móvil, pongo la playlist de Ariana Grande, abro el agua de la ducha, hasta que sale vapor del calor, y decido entrar. Hecho la cabeza hacía atrás para mojarme bien el pelo y noto como el calor va abriendo mis poros. Me enjabono y me masajeo la cabeza mientras suena y tarareo thank you, next, y se me pasa por la cabeza comprarme unas extensiones de cola de caballo para la próxima vez que salgamos. Puede ser divertido.

Salgo de la ducha mientras goteo el suelo con el agua que cae de mi pelo, y me dirijo a mi habitación.

Tengo un pequeño tocador, así que me seco el pelo, me hago un moño y me pongo el bikini para ir a la playa, con unos shorts tejanos y una camiseta de tirantes blanca.
Cuando salgo, las chicas ya están vestidas, así que salimos y vamos andando hasta la playa.