tomás gira por fín dejándome ver su cara, tenía una sonrisa y lágrimas corriendo en esta ¿estaba tan felíz de ser papá?
— ¿vamo' a ser papás? — asiento nuevamente, no tenía más que hacer — ¿juntos? — vuelvo a hacer lo mismo, asentir con mi cabeza mirándolo atónita ante tanta felicidad — ¡juntos, avril, juntos! ¡gracias, te amo! — me abraza desbordado de felicidad
no le correspondí el abrazo, me alegraba que no se lo tomara mal como llegué a imaginarme en un momento, sin embargo no entendía cómo tener tanta felicidad por la notícia. además, era raro verlo así después de tanto, después de volver a verlo durante semanas apagado, a veces bien, pero ahora era el tomás de neuquén del cual me enamoré; alegre y felíz de forma sincera, como sentimientos que le nacían realmente de adentro.
— ¿vo' no estás contenta, amor? — pregunta bajando mil cambios
estando tan metida en mi cabeza intentando procesar todo; el amor saliendo de sus labios como antes, su reacción a la noticia, la mía a su felicidad y hasta mi embarazo en sí necesitaba procesar aún. que entre, todo eso, no contesté, pero recién me dí cuenta cuando lo escucho sentarse y llorar bajito, no quería que lo escuche.
— no, no llores, tomi — digo y arrodillo frente a él — perdón, tengo mil quilombo' con todo esto — cuento tomando sus manos — y no sé, no sé como me siento, ni como debería sentirme, no sé — admito — sólo sé que quiero tenerte conmigo para afrontar esto — pido con un hilo de voz y él me contiene entre sus cálidos brazos
— siempre me va' a tener con vo', perla — murmura en mi oído haciéndome llorar más aún — pero necesito saber que te pasa con esto y qué querés hacer — dice soltándome un poco para mirarme a la cara — ya sabés que pienso yo, supongo, pero de todas forma' te voy a acompañar, apoyar y respetar en lo que vo' decidas — asegura acariciando mi espalda, él sabía contenerme como nadie más
sabía de que hablaba, del aborto. con su reacción entiendo que no quiere hacerlo, que quiere que lo tenga, pero también acepta mi lugar a decisión, a elegir, aunque yo no sabía que mierda elegir.
por un lado siempre soñé con ser mamá joven, más al lado de él, pero por otro, como están las cosas ahora no acompañan: ahora no tenía la vida resuelta como me imaginaba a los 21, ni estaba con tomás como a los 16. no sabía si íbamos a hacer las cosas bien, y, con una persona más además de nosotros, no podían salir mal.
— pensalo bien, no te presiones — aconseja tomando mi cara entre sus manos para dejae un beso en mi frente — te amo y estoy con vo' a pesar de todo, reina — habla con firmeza y seguridad mirando a mis ojos
con todo esto tomás me demostró cuánto creció y maduró, él sería un papá increíble seguro, hace absolutamente todo bien, pero ¿y yo, yo sería una buena mamá? ¿nostros podremos estar bien juntos? tenía mil dudas y mil certezas rondando en mi mente, mil a favor y mil en contra, pero yo quería hacerle caso a lo que sentía, porque mi cabeza no está en totales condiciones de decidir con todo el lío dentro, en cambio mis sentimentos tienen las cosas más claras, yo siempre tuve claros mis sentimentos, solamente elegía evitarlos algunas veces.
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