tomás
limpiaba mi nariz con mis ojos cerrados tras la tercera línea, al abrirlos veo a chulu entrar en el bar, revoleo mis ojos maldiciendo la hora que le enseñé el lugar contándole que vengo cuando quiero escapar del mundo, como en este momento.
- dejá esa mierda y vamo' - habla demandante señalan a la salida
río amargado recostándome en mi silla
- ¿chulu, vo' te pensás que yo soy idiota, hermano? - me mira confundido - tus cambios de humor, tu pérdida de peso, tu falta de apetito, tu agresividad - enumero viendo como se va tensando, él consumía la misma mierda, él se mataba de la misma manera - dejá de ser hipócrita, andate y no me rompas más las pelota', demasiado me las rompiste con lo de avril - recuerdo cuando le recordó mis errores enfrente mío hace un rato
- perdoname por eso, no sabía cómo mierda reaccionar, estaba diciendo cosas sin pensar, ya ni me acuerdo bien todo - lo miro negando con una sonrisa irónica
- igual gracias eh, me dí cuenta que ella no lo valía
¿qué mierda decís, tomás? ¿sos imbécil?
- ella es demasiado para vo' - siento me sangre hervir ante ese comentario y creer que tiene razón
- ¿ahora la defendés? ¿cuándo la trataste de cornuda, de inmadura y ni fuiste capaz de pedirle perdón? - le recuerdo enfrentándolo - ¿y por qué está tan resentida con vo'? ¿qué mierda hiciste para que no te perdone? - pregunto con intenciones de provocarlo
es tu hermano de toda la vida, tomás
- cerrá el orto que vos no te quedás atrás - me empuja haciéndome caer debido a la poca reacción, cuando me levanto e intento atacarlo también me detienen
a ambos nos echan del bar, él estaba más rescatado entonces logró calmarse, yo solamente no le rompía la cara porque no desconozco, pero igualmente tenía una furia dentro casi incontrolable.
cuando entramos a mi departamento los insultos de troca no tardaron en llegar a nosotros, ambos lo mandamos a la mierda, chulu se tira en el sillón junto a franky, este se armaba un faso como si nada.
troca hablaba al teléfono, no le presté atención, tampoco a la charla entre los otros dos, sólo me dedicaba a mirar a un punto fijo sintiendo mi mandíbula media tensa, moviéndose sola en algunos momentos y con avril en mente.
- no, avril ¡me cortó, la puta madre! - los gritos de troca lograron sacarme de mi transe
- voy a bañarme - era más bien un pensamiento, sin embargo salió como aviso
- ¡no, tarado! - me frena troca para llevarme del brazo hasta una silla - te sentás y no moves el culo de ahí - ordena señalándome, me hace acordar a homer cuando me reta, su parecido no era solamente físico - franky ¿podés ayudarme con todo este quilombo? - le pide alterado a fran mientras manda mensajes asustado en su celular, este solamente hace un gesto con su cabeza así continúa hablando - fijate que tomás no vaya a bañarse, lo que falta es que la quede este boludo, yo tengo que ir a hacer que avril no suba
lo miro a troca asustado al escuharlo comenzando a perseguirme, mi perla no podía verme así, homer tenía razón, las cosas nunca me salen bien en este estado.
- ¡no ¿cómo avril! ¡que no suba, mirame! - exclamo a los gritos ganándome la mirada de los tres
- encargate vos - habla troca cansado a franky, al cual quedo mirando esperando una respuesta
- no sea' paranoíco - me dice sin darme mucho interés realmente
- pero mirá si se da cuenta que soy un drogadicto de mierda
- de mierda fuiste siempre - aclara sin mirarme, en serio no me daba bola - ademá' ya sabe lo de la merca - abro aún más mis ojos y él hace lo mismo mirándome al fín
- ¿cómo sabe, boludo? - interrogo con miedo, no quería seguir decepcionándola - ¡franky, no podés ser tan hijo de puta, amigo! - grito cuando no contesta, obvio fue él, le pedí claramente a los cuatro no decirle nada a avril
y ahí comenzó mi locura
