Capítulo Nueve
Lo raro
ADELA
¿Por qué me están mirando cómo si fuera un muerto que acaba de revivir? ¿Por qué me duele todo el cuerpo? ¿Por qué tengo un tubo ventilador en la boca? ¿Qué demonios me pasó?
—Ella está… Ella —empezó a hablar mi mamá pero las palabras se quedaban atoradas en su garganta.
—Está despierta —dijo Taylor.
¡¿Taylor?! El viejo amargado que tengo como vecino, el cual no tiene plantas y casi nunca sale de su casa ¿Ese Taylor está aquí? ¿Con mi familia?
—¿Qué hago aquí? —pregunto quitando el tubo ventilador de mi boca.
En la puerta entraron unos doctores con enfermeras atrás de él, sus caras decían asombro. ¿Por qué me ven así?
—También despertó… —susurró una enfermera.
—¿También? ¿Qué pasó? —pregunto para que alguno me dé una mejor explicación y no sólo me ven asombrados.
—¿No lo recuerdas? — preguntó Taylor y niego con la cabeza
—Sólo recuerdo, que estaba en un carro con mis amigos… y ya no recuerdo nada más —respondo.
—Tuvieron un accidente, tú llegaste aquí grave con otro chico, ambos quedaron en coma y acaban de despertar al igual que los otros dos que están mejor —me explicó el doctor.
Ahora esto tiene un poco más de sentido.
—¿Y mis amigos? ¿Chiara? ¿Veck? ¿Daniel..? ¿Cómo están? —pregunto impaciente.
—Están bien, están siendo revisados por las enfermeras, iré ahora con ellos. Pero necesito que te recuestes y descanses, acabas de despertar de un coma, que no duro ni siquiera un día… Trata de descansar.
Mis padres salieron detrás de él. Taylor me dio una mirada y sonrió, le devuelvo la sonrisa. Él se marcha y me quedo sola en la habitación.
Hace mucho que no estoy en un hospital, la última vez que me llevaron a uno fue por un pedazo de vidrio que tenía en mi pierna, ahora que recordaba tenía vendajes en mi abdomen como si algo lo hubiera atravesado, mi cabeza también esta vendada al igual que mi brazo izquierdo y mi pierna izquierda.
Siento líquido en todo mi cuerpo, pero debe ser mi sangre, pero no recuerdo que la sangre sea tan líquida.Me recuesto en la cama cerrando mis ojos, mientras estaba antes dormida había escuchado a una mujer hablar, diciendo que era su hija y que si fuera por ella se quedaría, luego a un hombre decirle que yo no la recordaría cuando creciera, ella luego le dice que lo sabe.
La curiosidad invade mis pensamientos, quiero saber quién era, la voz no es de mamá y la voz del hombre tampoco es de papá, entonces… ¿Quiénes son?
***
Tengo los ojos cerrados pero escucho que hay personas hablando en la habitación, trato de parecer dormida para escuchar que dicen.—¿Se pondrá bien? —escucho que preguntan… Veck
—Esperemos que sí, no la podemos perder —escucho que responden… Daniel
—No la perderemos —le sigue otra voz… Chiara
—No me perderán —digo “despertando” de mi sueño, con una mano logro sentarme en la camilla ellos me miran sonriendo.
—Qué bueno que estás bien —me abrazan los tres, tienen cuidado con mis heridas, noto como Veck tiene un brazo enyesado al igual que una pierna y anda en muletas, yo estoy de la misma manera, solo que sin muletas.
Chiara y Daniel también tienen un brazo enyesado.
—¿Y ustedes? ¿Se encuentran mejor? —pregunto al separarnos
—Mejor —contestan al mismo tiempo
—¿Saben algo de Sam? —pregunto y ellos niegan con la cabeza
—Seguro aún está en esa tonta fiesta —bufa Chiara
—¿Celosa? —pregunto Veck bromeando
—No— responde cortante.
Nos la pasamos hablando, ellos parecían mejor, tenían raspones al igual que yo. Quería pararme pero sabía que ellos no me dejarían hacerlo.
—Oigan ¿ustedes también sienten su sangre muy líquida? —pregunto y ellos niegan
—Siento mi sangre ardiendo, como fuego—hablo Daniel.
—La mía está espesa y rocosa, como tierra—dijo Veck
—La mía apenas se siente, parece aire—comentó Chiara.
—Y la mía se siente como Agua—digo.
Se siente demasiado raro, nunca nos sentimos de esa manera, incluso pensamos que quizás los sueros tenían algo que nos hizo alucinar pero descartamos esa idea, aunque aún estaba en una posibilidad.
—Bueno debemos irnos, si no nos regañan—dijo Chiara y asiento, mis tres amigos se levantan me abrazan otra vez y antes de que salgan les pregunto:
—¿Les dijeron algo cuando despertaron?
—Una luz blanca, eso fue lo que vieron antes que despertáramos—comentó Daniel, asiento y los tres se marchan de la habitación.
Me recuesto nuevamente en la cama, tengo una sensación extraña en todo mi cuerpo y no sé qué es, lo único que espero es recuperarme rápido y que mis padres me hayan quitado el castigo cuando salga de este hospital.
Me pregunto ¿por qué estaría aquí Taylor? No he hablado con él, nunca tuve la oportunidad y ahora estaba aquí me sonrió cuando salió se había preocupado por los cuatro según me contaron los chicos.
—Ella es fuerte… puede con eso y más, por eso estarás cuidándola, a ella y a los demás, debes cuidarlos de una manera sana, no te acerques tanto a ellos o llamarás la atención de esa mujer…
Nuevamente esa voz… ¿Qué mujer? No estoy entiendo nada de lo que esa voz dice, ni siquiera sé quién es, pero ella si sabe o sabía quién era yo. Necesito saber más sobre esa mujer que habla tantas veces en mi cabeza, necesito saberlo.
ESTÁS LEYENDO
Elementos [#1] ✔️
Science FictionEllos no eran normales. Ellos no tenían ni idea de lo que pasaba. Confiaron en personas que no debieron confiar. Amaron a personas que no debieron amar. Pelearon como si no hubiera un mañana. Perdieron como humanos. Ganaron como Guerreros. Aquí nada...