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25. Entrenamiento II

Capítulo Veinticinco 

El entrenamiento II

ADELA 

Me levanté como pude del suelo, el dolor en mi espalda era fuerte, creo que no era la única que iba a quedar con un horrible dolor de espalda dentro de unos días.

Taylor seguía lanzando las correntadas de su poder a cada uno de nosotros, a Veck lo golpearon tres veces y las tres veces cayó al suelo como saco de papas, mientras que al resto solo nos golpeo una vez, agradezco eso.

Chiara y yo comenzamos una pelea, ella lanzaba ráfagas de viento para que perdiera el equilibro y yo le lanzaba esferas de agua que la mayoría lograban golpearla. En un movimiento pude crear una esfera más grande que las demás logrando que ella se rindiera conmigo.

Seguí peleando, con mi abuelo fue un poco más complicado ganarle, pues el tenía más experiencia en las peleas usando poderes, yo apenas sabía algunas técnicas, al cabo de unos quince minutos logre vencerlo, debo decir que eso me sorprendió.

Veck ya estaba en el suelo, Daniel le había ganado, debo decir que todos nosotros teníamos a nuestro alrededor nuestro poder, Daniel era cubierto por el fuego que emanaba de sus manos.

Dios, como pude verse una persona tan sexy haciendo eso.

Ninguno de los dos quería pelear en contra del otro, pero era una orden de Taylor y teníamos que cumplirla.

El primero en lazar el golpe fue Daniel, lanzo una de sus esferas hacia mi dirección, pude protegerme gracias a que el agua puede apagar el fuego, eso es un punto a mi favor.

La pelea cada vez era más intensa, las esferas eran más grandes y más potentes que las anteriores, podía ver como el fuego se hacía cada vez más grande y de paso el color era más fuerte.

¿Han visto Harry Potter y las reliquias de la muerte, parte 2?

Si no la han visto que falta de cultura.

Bueno en la pelea de Voldemort y Harry crean dos fuentes de poder luchando para ver cual gana, pues justo eso nos paso a nosotros, Daniel lanzo todo el poder que tenía en su cuerpo y yo no me detuve, hice lo mismo.

Fuego y agua, ambas fuentes de energía luchando para golpear a uno de los dos, gracias a toda la potencia que sentíamos era más complicado y sentía que por mi cuerpo está pasando un tipo de electricidad.

Daniel con su Pyrokinesis y yo con mi Hydrokinesis.

Ahora el fuego no solo estaba por todo el cuerpo de Daniel, sino también en su cabello. 

Cerré mis ojos un instante y nuevamente los abrí y cuando lo hice, mi poder se hizo cada vez más fuerte ganando esa batalla que teníamos.

Daniel cayó al suelo, ya no tenía su poder por el agua que lo había apagado.

—Dios mío, eso fue mejor que una pelea de una película—Dijo Veck sonriendo de lado a lado.

—Excelente, Adela, estás mejorando—sonreí—y ustedes—señala a mis amigos—, no se quedan atrás, pelean demasiado bien para ser la primera vez que pelean con poderes de la manera correcta.

Le extendí mi mano a Daniel para ayudarlo a levantarse, él la agarro, cuando lo hice sentí las típicas mariposas en el estómago, malditas mariposas hija de su cola.

—Buena pelea, Adela—Me felicitó.

—Lo mismo digo—dije, estábamos demasiado cerca, la diferencia de altura era notable.

Sus ojos tan hermosos, me recuerdo que cuando lo conocí lo primero que le dije era que sus ojos eran lo más lindos que yo había visto, hasta el día de hoy sigue siendo así.

—Joder ya bésense—Nos dijo Veck en una súplica, reímos un poco.

Taylor se aclaro la garganta arruinando aquel momento que tenía con Daniel.

—Será mejor que se vayan a sus casas, a menos que tengan algo más que hacer—Nos dice, su mirada esta fija en Daniel, parece que lo mata con verlo.

Entonces es cuando nos acordamos.

—Mierda, mañana tenemos partido—Decimos Veck, Daniel y yo al mismo tiempo.

—¿Que partido?—Me pregunta Chiara con curiosidad.

—Mañana es el partido contra la institución más creída de todo el país, y no hemos practicado—Explica Veck moviendo sus manos muy rápido.

—¿Y que esperan? Vayan a entrenar—Le damos la razón a Taylor antes de salir corriendo.

Agarramos nuestras cosas y salimos corriendo de la casa de mi abuelo, antes de retirarnos me giro para ver a Taylor.

—Gracias...—asiente—por todo.

—Para eso estamos, nieta—Sonrío antes de seguir a mis amigos, los cuales me dejaron atrás.

Mis pies se empiezan a mover muy rápido, parece que mi grupo de amigos están haciendo una carrera para ver quien gana, no estoy compitiendo pero parece que realmente lo hago, corro como nunca, corro como si está fuera la última vez que lo haría.

Usain Bolt se queda pendejo a la par mía en estos momentos.

Alcanzo a mis amigos y llevo la delantera, los escucho maldecir mientras intentan subir la velocidad a sus piernas.

Soy la primera en llegar al instituto, sonrío con orgullo, ellos me fulminan con la mirada divertidos.

La escuela nos da permiso de entrenar en la cancha de la institución cada que toca un partido, a Chiara siempre la dejan entrar aunque no juegue con nosotros, mañana habrán dos partidos, uno de las mujeres y uno de los hombres.

Cuando llegamos a la cancha notamos que parte del equipo ya esta ahí practicando.

—¿Me quedo aquí?—Pregunta Chiara señalando las bancas.

—Si quieres—Le digo, ella asiente y se sienta en una de las bancas.

Veck me pasa uno de los balones para comenzar a entrenar.

Hoy fue un día bastante largo, nos enteramos de muchas cosas a cerca de nuestros poderes, también estuvimos entrenando de varias formas y logré ganar en las peleas con habilidades, ahora era tiempo de entrenar y rezar para ganar el partido.

Solo espero que nada salga mal, aunque conociendo mi suerte será imposible.