El chico de la banda

Los bolos

Verónica

Estaba en mi recámara preparándome para la cita con Connor. No me decido por que ponerme, no me ha dicho a donde me llevará así que no sé muy bien como debo de ir vestida. Al final me decido por unos pantalones claros de mezclilla, una blusa de tirantes, los cuales se amarran, de color lila con pequeñas flores, de zapatos escojo unas valerianas negras. Dejo todo listo para cuando termine de ducharme.

Cuándo salgo de bañarme ya solo faltan 20 minutos para la hora que acordamos. Me visto muy rápido, me pongo unos aretes y el collar con mi nombre que me dio mi padre.

Connor llega puntual a buscarme, mi mamá dice que es un caballero por entrar hasta la casa y presentarse con ella. Lo cual ella aprovecha para hacerle un interrogatorio.

-Entonces, ¿cuántos años tienes, Connor?- comenzó.

-19, señora.- respondió Connor algo nervioso.
No quería hacerlo pasar por esto, pero aún no estaba lista, estaba tratando de apurarme lo más que podía.

-Por favor, no me digas señora, me haces sentir vieja- dijo mi mamá siendo amable con él- dime Ely.

-Bueno, Ely- contestó Connor soltandose más. Hasta que mi mamá hizo la siguiente pregunta.

-¿Y que es lo que pretendes con mi hija, Connor?- él se quedó pasmado por dos segundos sin saber que contestar.

-¡Mamá!- le solté un pequeño grito a mi mamá.

-¿qué, hija? Solo quiero saber que piensa él que pasará esta noche- dijo mi mamá sin dejar de ver Connor.

-No pretendo más que salir con su hija- volvió hablar Connor, mientras se tronaba los dedos, por los nervios- pasar un buen rato con ella.

-Esta bien, si Vero ya esta lista, pueden irse ya entonces- dijo mi mamá poniéndose de pie y dejando solo a Connor en la sala.
Yo ya estoy lista, así que Connor y yo nos estamos dirigiendo fuera de la casa, no sin que antes mi mamá me diera hora de llega, hasta las 11.

-¿Estás lista, Vero?- dijo Connor poniendo énfasis en el Vero.

-Si, estoy lista, y por favor no me llames Vero, mi mamá es la única que me llama así- también lo hacía mi papá.

-Está bien- dijo sonriendo y poniendo en marcha el auto.

-Entonces, ¿a dónde iremos?- le dije intrigada.

-Bueno, el otro día, en la cafetería dijiste que nunca habías jugado bolos ni patinado sobre hielo, así que, hoy haremos las dos cosas-no puedo evitar sonreír, me parece algo súper lindo que recordará eso, que lo haya escogido para nuestra primera cita.

-Gracias, gracias, gracias- dije con una sonrisa de oreja a oreja y dándole un pequeño abrazo, cuidando de no distraerlo mientras conduce.

Llegamos a una plaza donde están las dos cosas. Una pista de patinaje sobre hielo y en otro parte los bolos.

-¿qué quieres hacer primero?- me da escoger.

-creo que, los bolos- asiente y entonces nos dirigimos hacia los bolos.

Como no llevo calcetas, debo de comprarme unas pero Connor insiste en hacerlo él.

-¿qué te parece si mejor me invitas un helado al salir?- negocie con él.
Aunque al principio no quiso, acepto.

En los bolos no hablamos mucho, nos pasamos la hora de juego riéndonos de lo mala que soy en esto, y lo bueno que es Connor.
Al terminar esta claro que Connor es el ganador, sus lanzamientos eran casi perfectos.

- ¿quieres esa helado ahora? De compensación por haber perdido- dijo burlándose de mí.

-Claro- dije con un puchero fingiendo estar enojada.

-Era broma- se disculpó Connor acariciándome el cachete. Fue un gesto muy tierno, tranquilizador.

-Vamos- le tome de la mano para ir por el helado.
Al entrar a la zona del comedor en la plaza busco un McDonald's, Burger King o dónde vendan helados.
Buscando, veo entre la gente a alguien que se me hace familiar. Entrecierro los ojos para ver mejor y logre ver quien es. Calum.
¿A caso Sidney es un pueblo? O porque siempre me encuentro con Calum a dónde quiera que vaya.
Antes de que el me vea dirijo a Connor y a mi hacia el Burger King que esta de espaldas de donde Calum esta sentado. Esta con los otros chicos, Michael y Luke. Ellos están enfrente de él, me pueden ver fácilmente, pero no creo que pase nada. Con Luke apenas y he hablado y Michael no me ha de conocer.

-¿de que lo vas a querer?- me saco de mi subconsciente Connor.

-Chocolate, cono de vainilla- dije dándole una sonrisa.
Connor pidió los dos helados y nos los entregaron enseguida. Nos sentamos en una de las pocas mesas que estaban vacías, cerca del Burger King.
Estuvimos hablando mientras nos comíamos los helados, de la escuela de su música. Connor sabe tocar la guitarra y hace cover de todo tipo de canciones que sube a YouTube.

Hablamos muy bien durante poco tiempo hasta que llego alguien a interrumpir nuestra conversación.