El chico de la banda

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Calum

Al terminar la escuela, los chicos y yo planeamos un ensayo de la banda. Así que decidí esperarlos  en las bancas de fuera la escuela.

Cuándo estaba saliendo, pude ver a Verónica, hablando con un chico, ambos se veían nerviosos, pero él más que ella,¿qué los podría tener así?. El chico se me hacia conocido, creo que era uno de los chicos que me presento Beca en la fiesta del viernes. Traté de escuchar la conversación, pero me fue imposible ya que estaban muy lejos.

Poco después de que Verónica terminará de hablar con el chico, llegaron Michael y Luke al mismo tiempo.

Estuvimos ensañando un rato, hasta cansarnos y darnos hambre. Como estábamos solos en la casa, ninguno quería hacer de cocinar, pero estábamos a la vuelta de una plaza. Después de un rato de pensar si ir a la plaza o pedir que nos llevarán una pizza, decidimos ir.
Llegamos directo a la sección de comida, porqué solo habíamos planeado ir a eso, pero después de comer, de salida de la plaza, en cuanto Michel vi en una estantería de una tienda, un videojuego que quería, entramos a ver los demás.
Estaba en la tienda, viendo los videojuegos, hasta que vi por el cristal ver pasar a Verónica, iba camimando sola. Le dije a los chicos que me iba, no tenía la intención de que me acompañaran, solo les avisaba, pero en cuanto vieron el porque, me dejaron solo con ella.

-¿siempre me estas siguiendo?- dije acercándome a ella.

-¡¿disculpa? Jaja no, gracias!- dijo cambiando su postura y caminando hacia mí.- esto es pura casualidad.

-si,¿igual que todas las otras veces?- solté haciéndola enojar—me gusta su rostro de enojada—, y dando otros tres pasos más hacía ella.

-si, exactamente- me espetó acercándose, dejando el mínimo espacio entre nosotros.
Teniéndola tan cerca puedo notar sus pequeñas facciones, sus delgados, pero carnosos labios, su lunar en dónde termino el ojo derecho, lo ligeramente que se le marcan sus clavículas. Puedo percibir su aroma, un increíble aroma a naranja. Ella luce tan perfecta estando ahí, sus labios, quería besar los. No decíamos nada, solo estábamos los dos, viéndonos, parecía como si el resto del mundo no existiera, solo éramos ella y yo.

Pero no era así, porque llegaron a sacarnos de ese sueño vívido.
Quien nos interrumpió fué el chico con el que estaba hablando en la escuela. Venía con ella, y al verlo, entiendo todo. Era una cita. Por eso estaban nerviosos hablando hoy. Y entonces me doy cuenta de que lo mal entendí todo, a ella no le gusto yo, le gusta él, y lo que acabamos de tener no significo nada, no para ella, no fue ningún momento especial, no como lo habia creído.

-¿quién es él?- le pregunto el chico a Verónica.

-Es Calum, mi...- ¿qué somos? Nada- mi compañero de clase- solo eso- Calum, él es Connor- no quería aparentar que me había tomado de sorpresa así que lo salude e hice una media sonrisa-Bueno, ya tenemos que irnos- se despedía de mí, mientras tomaba a Connor del brazo.
Que le tomará del brazo en frente de mí lo confirmo todo, le gustaba él, pero, ¿porque me preocupaba?, a mi no me gustaba. Pero si no me gustaba,¿porque me sentía así?. Tal vez si siento algo por ella, he estado evitando mis sentimientos todo este tiempo, y la verdad es que si sentia algo por ella, que estúpido fui, ahora está alguien más, no puedo hacer nada.

Busque a los chicos y para regresar a casa de Michel. Al llegar a su casa solo tome mi bajo y volví a la mía.

Todo el trayecto estuve cabizbajo, pensando en Verónica. Lo perfecta que lucía hoy, pensándolo bien, siempre luce perfecta. En lo mucho que me habría gustado robarle un beso, pero que idiota fui, tuve que verla con alguien más, para darme cuenta de lo que siento por ella.  Ahora no podré recuperarla. La he tratado mal todo el tiempo, la deje plantada cuando no era ni una cita, por miedo a aceptar lo que sentía. Y ahora, no podría confiar en mí.