Dove se encontraba realmente muy nerviosa, volver a ver a Sofía después de muchos meses era algo que la emocionaba pero al mismo tiempo la ponía muy nerviosa y ansiosa.
A paso lento pero decidido la rubia camino hacia la ultima puerta del tercer piso, se detuvo frente a la puerta que tenía un pequeño número 15 en el centro.
Dio dos ligeros golpes en la puerta, al no obtener respuesta volvió a realizar la misma acción.
Espero unos segundos y la puerta fue abierta por una Sofía con su ropa un tanto desordenada al igual que su cabello. La gran sonrisa de Dove disminuyó un poco al ver a la castaña de esa forma, le parecía algo extraño.
La latina estaba tan concentrada en arreglar su vestimenta que aún no se dignaba a ver quien había llamado a su puerta.
Se llevó una gran sorpresa al levantar la vista y ver esos hermosos ojos verdes que hacía mucho había dejado de frecuentar. Por su parte la sonrisa de la rubia aumentó, no supo cómo pero los nervios parecieron abandonar su cuerpo con el solo hecho de cruzar miradas con Sofía.
—¿Dove?— preguntó incrédula.
No era que le molestara la presencia de la rubia, pero las cosas entre las dos no habían terminado muy bien meses atrás.
—Creí que estarías más feliz de verme— comentó, sonrió de lado.
La latina se recargó sobre el marco de su puerta, no parecía tener la intención de invitar a la ojiverde a su departamento.
—No es eso— se apresuró a decir —Me alegra verte, solo que me sorprende que estés aquí— confesó —Ya sabes... cómo dijiste que no querías volver a verme— recordó.
Dove rodó los ojos, sabía lo que había dicho pero creyó que la castaña ya lo habría olvidado y la recibiría con los brazos abiertos.
Sofía miró fugazmente hacia el interior de su departamento, acción que repitió la rubia. Dove aprovechó la distracción de Sofía para observarla mejor, la latina estaba descalza, vestía unos jeans azules junto a una camiseta blanca con el dibujo de el pato Donald en el centro.
—Solo fue una tonta discusión— argumentó.
Sofía frunció el ceño, para ella no había sido una tonta discusión.
—Da lo mismo— rodó los ojos —¿Se te ofrece algo?— preguntó.
—Por supuesto— la castaña la animó a seguir —Hablar, pero preferiría que lo hiciéramos cenando— sonrío.
La latina río ligeramente por lo dicho por la rubia.
—Me encantaría ir a cenar y que me cuentes como te ha ido pero justo ahora estoy ocupada— explicó.
Fue el turno de Dove de reír por lo bajo, ella creía que era una broma por parte de la ojimarrón. Eso debía ser, porque Sofía nunca estaba ocupada cuando se trataba de ella. Así había sido desde que se conocieron.
—Busca tus zapatos y vamos a cenar— insistió.
—Es en serio, no iré a cenar contigo— comentó.
La rubia estaba por decir algo más cuando un ruido de algo que había caído al suelo la interrumpió, el sonido venía del interior del departamento de Sofía.
La castaña se apresuró a llegar a la cocina, estaba segura que el ruido había venido de allí. Dove la siguió, aún necesitaba que la chica le explicara porque no podían salir a cenar.
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One Shots - Multifandom
FanfictionPequeñas historias de mis ships favoritos. De todo un poco.